Stolitzø (Reto de 30 días shipp) *Stolas x Blitzø*

Día 29

Haciendo algo tierno.

Era una mañana como cualquier otra, a pesar de que no fuera luna llena, Blitzø se quedo en la mansión de Stolas con la escusa de que lo estaba jodiendo hasta más no poder por sentirse solo.

El imp se levanto de la elegante cama para estirarse. Se rigió al baño para asearse, al terminar se cambio y..."¿Todavía Stolas sigue dormido?" Eso si que le extraño, el era el que siempre se levantaba más temprano que el, y si no lo hacia a los pocos segundos que se despertaba el diablillo, el príncipe lo hacia; y no es como si se fueran acostado tan tarde, solo comieron algunos bocadillos, jugaron por un buen rato...hubo uno que otro beso y manoseada pero más allá no como para que se estrasnocharan.

- Stolas - lo llamo susurrando moviendo lo un poco - Stolas - repitió la acción pero ahora llamándolo más fuerte - Vamos amigo párate...no quiero que me llames después quejándote de que no me despedí ¿He? - le advirtió. Su ceño fruncido se hablando al ver como el príncipe se daba la vuelta aun acostado pero con una cara terriblemente enferma - Ho mierda...¿Y a ti que rayos te paso? - pregunto desconcertado.

- Yo no...*sniff* - se sonó la nariz - no me siento muy bien~ - le respondió débilmente a Blitzø con una voz que a kilómetros se notaba que era de congestión.

- Hooo...carajo - refunfuño dándose la vuelta para pensar. Tenia que ir a su trabajo en pocos minutos, pero tampoco quería dejar solo a Stolas, si ya sabe que su mayordomo lo puede cuidar y eso, no obstante ese sentimiento de querer atenderlo por su propia cuenta no dejaba sus pensamiento "¿Sera buena idea que lo cuide?" "¿Y por que carajo quiero hacerlo?" Era todo un delirio con lo que quería hacer pero a la vez no. No quiso pensar más en el asunto y solo se dejo guiar por lo que su corazón dictara - Bueno...no tengo algo muy importante que hacer en mi trabajo así que me quedare a cuidarte - dijo quitándose su larga gabardina para tirarla en cualquier parte de la habitación.

- ¿De verdad?~- se emociono de forma notoria pero algo agotador - ¿Harías eso por mi?~

- Haammm...- pensó antes de volver abrir la boca, pero con la seguridad que tuvo respondió - claro que si.

Esto emociono más al demonio de la realeza, si no se sintiera tan mal agarraría al imp con sus dos brazos y lo fuera abrazado con todas sus fuerzas.

- Gracias, querido~- fue todo lo que podía decir. No tenia que esforzarse mucho o nunca se mejoraría, así que se volvió a costar mejor para poder descansar un poco.

Como toda buena "pareja" si se puede decir lo que son, Blitzø decidió quedarse por eso mismo, el sabia perfectamente que Stolas no lo pensaría dos veces si el estuviera en la misma situación. El diablillo rojo tomo su celular, marcando a su empleado del mes.

- ¿Hola? - atendió al llamado Moxxie.

- Hola Mox, te informo que no podre ir al trabajo hoy - dijo de forma serena, mirándose las garras para esperar la respuesta de su amigo.

- ¿Por que, señor? - pregunto Moxxie dudoso.

Blitzø  quedo en silencio un momento, no quería decirle que iba a cuidar a Stolas.

- Yo heee...- pensaba una buena mentira, una que Moxxie se la creyera - tengo...mi...cola atracada en...¿La nevera? - "Es la peor mentira que he dicho en toda mi vida"

- ¿Que? - soltó moxxie aun más confundido, sin creerle una sola palabra.

- Haaaggg - soltó un gran y desagradable suspiro - Esta bien, te lo diré - se dio por acabado - mira la cuestión es que, Stolas está enfermo y me tome la libertad de cuidarlo, por eso no podre ir a trabajar el día de hoy ¿Ok? 

- Haaa ya entiendo, jefe - sonrió por lo escuchado.

 - Bien, bien, como sea, no le digas a las chicas esto. No quiero oír sus cursis palabras cuando llegue mañana - explico serio.

- Señor...creo que es muy tarde para eso - respondió algo nervioso.

- ¿Por que lo di - no pudo terminar su oración al escuchar la voz de Millie gritar de alegría.

- ¡Haaaa! ¡jefe, que amable de su parte que este cuidando del príncipe! - dijo con estrellas en sus ojos.

- ¡¿Que carajos?! - ahora grito el pero de asombro ¡Moxxie maldito inepto! ¡¿Por que mierda no me avisaste que estaba en alta voz?!

- ¡Porque usted no me lo pregunto, señor! 

- ¡Aaahg! - gruño - ¡Me da igual, nos vemos mañana perdedores....te quiero Loony! - corto la extraña llamada.

- ¿Algún problema, Blitzy?~- pregunto Stolas arrecostado en la cama.

- Si. Mis empleados aveces son algo molesto, pero sean como sean los quiero - sonrió para acercarse al enfermo - ahora tu descansa - sobo su cabeza - mientras yo le diré a tu sirviente que te prepare una buena sopa para aliviar tu malestar...y fiebre - dijo al final al sentir como este tenia la temperatura alta.

(...)

Tranquilo. Eso fue exactamente como pasaron el resto del día, tranquilo y sin ninguna cosa interesante más que ver como Blitzø cuidaba de su "paciente"; le daba unos antibióticos, ponía un trapo húmedo en su frente para aliviar la fiebre, he incluso le dio el mismo la sopa de que preparo el mayordomo.

Ya como a esas horas de 9 o 10 de las noche, todo estaba con las luces apagadas, excepto por la pequeña mesita de noche que estaba junto a lado de la cama de Stolas, donde estaba acostado escuchando atentamente el cuento que le relataba su cuidador.

- Y la pequeña, princesa logro llegar a su gran y hermoso palacio, donde fue muy bien recibida por los empleados y sus padres...- leía un viejo cuento que estaba en un biblioteca de las sientas y sientas habitaciones del castillo - "Los amo querida familia, y esa aventura me hizo reflexionar solo lo muy mierda que es el bosque" dijo la princesa.

- Jajaja,no creo que diga eso - cuestiono Stolas.

- Oye ¿Quien esta leyendo el cuento aquí? - sonrió encogiéndose de hombros para seguir leyendo - La gran princesa la toco el gran y pesado sueño, tomo un baso de leche tibia, se cepillo los dientes, para irse a dormir plácidamente en su cama...- se escucho un pequeño ululeo de Stolas, significando que se había quedado dormido. El cuento sin duda había funcionado - y vivieron felices por siempre...el...fin~ - hablo en voz baja, con una tierna sonrisa de satisfacción cerro el libro de forma delicada para ponerlo en la mesita de noche y apagar la pequeña lamparita que se encontraba en dicha mesa. Antes de acostarse a lado del bello durmiente búho que aun ululeaba de manera sonora y adorable, se acerco a su rostro para darle un tierno besito en su frente y susurrar las palabras "Fue divertido cuidarte, Stolas" para ahora si irse a dormir con el ser que al parecer amaba con todo su corazón, tanto que fue todo un placer cuidarlo con cariño.

No soy muy buena describiendo cosas tiernas, así que esto fue todo lo que se me ocurrió. 

¡No puede ser! :0 ¡Ya esta por terminar este reto, solo queda un día y ya, fin! :"3