capitulo 28

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—Hey! Te estoy hablando ¿Dieter?— la chica frente a mi por fin había conseguido captar mi atención.

No sabía que me pasaba, por momentos aún veía el cuerpo de mi madre en el suelo; su cadáver, que aparecía y desaparecía como si mi cerebro quisiera alterar la realidad y recordarme lo que pasó en esta cocina. Se veía tan real, la sangre en mis manos que por momentos aparecía, el suelo cubierto por ese charco que poco a poco se extendía y esos dos cuerpos inertes tan familiares, que en cuanto más veía mas reales me parecían.

—Fue aquí ¿No es así?— ¿tan obvio era?

—los policías hicieron bien su trabajo...— jugué con la comida, más de lo que lo había hecho antes, no tenía hambre.— investigaron, sacaron fotos, sacaron todas las pruebas, lo recrearon todo con magia, se llevaron los cadaberes y luego dejaron todo como estaba antes de que nada pasara—dejé el tenedor y subí la mirada— pero yo la veo ahí... Es tan realista... Es como si ellos nunca hubieran limpiado.

Conocía bien la mirada que me dedicó. Pena, arrepentimiento... ¿Cuantas veces ví una mirada que me transmitía eso? Era imposibles no recordarlas, esas miradas heran la firma de mi anterior vida; mis padres me abandonaron, por ello me gané miradas como aquella; mi enfermedad no tenía cura y me informaron que viviría poco tiempo y que cada día que pasara la muerte me habrazaría mas fuerte y yo lo notaría, más miradas se sumaron entonces; no podía jugar y me quedaba todos y cada uno de mis días en mi cama, incluso oía llorar a las hermanas comentando mi condición; y como ginda del pastel el tener que aguantar charlas sobre mi futuro, cuando siquiera terminaría la secundaría, cada vez que intentaba ignorar el hecho de que moriría, cada vez que intentaba que me trataran como si mis días no fueran pocos esas miradas estaban presentes.

¿Rencarne En Una Novela? Y Aún Por Encima ¿Como Villana?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora