Mi atención estaba clavada en una puerta de roble macizo desde ya hace al menos unos 5 minutos, la verdad es que ya había perdido la noción del tiempo ¿Que le diría a Conor y como?Si no hubiera enfocado mi atención anteriormente en darle o no darle las gracias a Astrid probablemente aquel tiempo podría haberlo usado en una cosa más útil como pensar al menos como empezar la conversación.
—Conor... ¿Estás ahí?— sin más dije, no era tiempo de arrepentirse de las acciones echas en el pasado, nunca lo es.
—...—al otro lado de la puerta no hubo respuesta alguna.
Esto no sería fácil, aún si realmente no dije (ni pensé) aquelló que lo ofendió tenía que explicárselo y para mí era incluso más complicado que decirle a un niño muy pequeño de donde vienen los bebés.
—mmm, sé que quizás estás molesto—Claro que está molesto tonto—pero creo que del todo no me equivoco...
—Eres gilipollas? Vete de una vez—desde el otro lado de la puerta me interrumpió.
—estás en peligro, es normal que me preocupe por ti y quiera que alguien de confianza se quede con tigo—suspiré y apollé mi espalda en la puerta deslizándose lentamente asta quedar sentado en el suelo—se que esa clase de personas no son una broma y aunque tuvieras muy buenas habilidades de lucha, si te superan en número teniendo habilidades mediocres, pero un plan estarías...— me caí hacia atrás, había abierto la puerta.
—haberlo dicho antes pezado gilipollas— sus ojos estaban ligeramente hinchados y alguna que otra lágrimas seca se veía en sus mejillas, pero no quise arruinar su orgullo.
—si no me hubieras interrumpido te abrías ahorrado el mal humor—sus cejas se fruncieron—o quizás no.
—ya lo arreglasteis?— Astrid apareció como si no hubiera estado escuchando la combersación a escondidas, salvandome de una posible paliza.
Miré a Conor esperando respuesta. El en respuesta bufó, pero tanto Astrid cómo yo esperamos una contestación más clara.
—tsk— partió la mirada
—tomaré eso como un si ¿Que tal si vamos al Yiken, me han dicho que an abierto uno cerca de la academia—Conor casi se encierra de vuelta en su habitación—en realidad me invitaron a una fiesta allí—se apuró a decir Astrid.
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¿Rencarne En Una Novela? Y Aún Por Encima ¿Como Villana?
Acak¿Imaginas morir y reencarnar en una novela? Pero no cualquiera, no, justo la que le leías a tus "hermanos" todas las noches, justo en el papel que menos te esperabas, aunque ciertamente te pega. En cierto modo el protagonista muere debido a una enfe...