Eterno pecado

6

Nora salió al patio de la casa, sintiendo la brisa erizar su piel y el enojo calentarla por completo. Caminó hasta el pequeño bosquecillo que su madre se encargó de cuidar y respiró el aire fresco para poder calmarse.

___ Nora, ¿está todo bien? ___ sabía que Camila la seguiría, luego de aquella mirada de odio que le lanzó no sería extraño que fuese tras ella luego de que casi partió el plato donde comía.

___ ¿Como crees que estoy Camila? Luego de años es que me doy cuenta que mi esposa odia algo que nos unió, algo que ella sabe que amo y me hizo creer estúpidamente que ella también lo amaba.

Camila se acercó a ella, intentando abrazar su cuerpo para cubrirla del frío, pero Nora no se lo permitió.

___ Vamos cariño. Entiendo que estés herida por eso pero, ¿podemos hablarlo y arreglarlo?

Nora se giró para enfrentar su mirada suplicante.

___ ¿Por qué tenía que ser ella y no yo quién lo notara? ___ era eso lo que más le molestaba ___ ¿Y por qué demonios no me dijiste nada? Me hiciste ver como un monstruo allí, Camila.

Su esposa se acercó a ella, tomándola de sus mejillas y dándole un casto beso en los labios.

___ Nora. Entiende que esa no fue mi intención, ¿ok? Si, oculté valiosa información sobre mis gustos, pero eso no te hace ver como alguna especie de psicótica. Yo solo pensé que tus sonrisas al prepararme algo que realmente amas, valía mil veces más que mi poco gusto al café, ¿me entiendes?

Nora cerró sus ojos sintiendo su piel arder bajo el toque de su esposa. Camila le sonrió, y ella se pegó a su cuerpo, intentando darle otro beso y conseguir más que eso sí tenía suerte.

Y Camila estaba dispuesta a corresponderle, pero su mente al parecer no. Mil imágenes de Lauren atacaron su cabeza e impidieron que continuara lo que sea que había empezado entre Nora y ella, así que se alejó y río al escuchar un gruñido por parte de su esposa.

___ No te alejes, me encantas mi amor ___ Nora enredó sus brazos en el cuello de Camila y saltó nuevamente a sus labios. Ella realmente intentó sentir algún tipo de calentura, tratar de pensar en el cuerpo de su pareja, sus caricias y demás.

Pero aquello no la estaba ayudando y se puso peor cuando otro par de labios, manos, rostro y cuerpo se instalaron en su interior. Era Lauren la mujer que la besaba, era ella quién le susurraba al oído y entre cortos gemidos que la deseaba. Camila se había derretido entre sus besos, caricias y susurros.

Apretó su cintura, calentándose en el proceso. Empujó su cuerpo hasta alguna zona estable y la consiguió cuando dejaron de moverse, pues, la espalda de Nora chocó contra algo y ambas aprovecharon eso para convertir su beso en algo más salvaje. Las manos de su esposa bajaron de su cuello hasta el incio de sus pechos, aparentando cada uno de ellos como si fuesen suyos.

Camila gimió y alargó su mano hasta la intimidad de Nora, acariciándola con intensidad. Gruñó cuando se topó con el pantalón que tenía y al momento de querer desabrochar el botón que evitaba poder tocarla, un carraspeo las interrumpió.

Ambas se alejaron rápidamente de la otra con las respiraciones agitadas.

___ Disculpen chicas, no pensé que usarían el patio trasero de la casa como habitación ___ fue sarcástica y ácida al decir aquello. Nora tragó pesado bastante apenada y Camila deseó que alguien la golpeara.

___ Mamá perdón, nosotras no queríamos hacer es...

Lauren levantó su mano para callar sus palabras.

___ Así no fue como te crié Nora. Si necesitas bajar tu calentura con tu esposa, ve directamente a una habitación ___ regaño más fuerte de lo que realmente deseaba, pero no podía detenerse simplemente ___ La privacidad es importante, y no deseo que mi hija sea... eso que estabas apunto de hacer con ella.