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___ ¡Oye eso es trampa! ___ se quejó Aaron lanzando lejos el control del vídeo juego.

Camila río.

___ Eres un mal perdedor.

Abrazó las piernas de Lauren con cariño. La mayor ahora estaba en su regazo, acariciando su brazo mientras Camila se burlaba de su hijo.

___ ¿Mal perdedor? No, no. Tú eres una maldita tramposa ___ la señaló con su dedo ___ Mamá te estaba diciendo que piezas debías colocar para ganar y eso es trampa, enana.

___ ¡Será mejor que te retractes! No soy enana, tú eres demasiado alto, mal perdedor.

___ Basta de pelear, par de bebés ___ Chris bajó de las escaleras sonriendo levemente ___ Cariño, ¿dónde está Nora?

Camila volvió a su realidad al escuchar a Christian preguntar por su esposa. Ella y Lauren no eran una pareja, no estaban casadas y definitivamente no estaban compartiendo un momento de dos enamoradas empedernidas, sino más bien un terrible momento de suegra y nuera.

___ Ella estaba algo alterada en la mañana mientras Leonard jugaba conmigo, pero no lo sé, no presté mucha atención que se diga ___ levantó sus hombros sin darle importancia al asunto mientras acercaba sus labios a los de su esposo ___ ¿La buscas a ella y no a mí? ¿Debo preocuparme?

Él río divertido.

___ Oh si, de un día para otro me dejaron de gustar los hombres, amor ___ devolvió el beso, mucho más intenso que el anterior. Lauren y Camila se veían de soslayo.

___ ¿De verdad? ¿A caso tendré que castigarte, osito?

Aquél susurro hizo temblar al más bajo. Camila levantó ambas cejas, Lauren quería salir rápidamente de allí. Christian sonrió, acariciando su cuerpo con sus manos y bajando cada vez esas caricias hasta finalmente llegar a su entrepierna, sintiendo que tan duro estaba.

___ No lo sé... ___ ronroneo ___ ¿Quieres castigarme, bebé?

___ Deberíamos irnos, ésto es muy incómodo ___ susurró Lauren nerviosamente. Lo que menos quería visualizar aquél día, era la manera en que uno de sus hijos mantenía relaciones con su esposo.

___ ¿Y perderme el espectáculo? Lolo, por favor... al menos déjame grabar un pedazo, ¿si? ___ el puchero del infierno estaba atacando de nuevo. Lauren tragó pesado, tratando de evitar robarle un beso.

___ No hagas eso Camz.

___ ¿El qué? ___ preguntó inocentemente.

___ Tramposa.

Camila le robó un rápido beso y volvió su atención a la pareja al fondo de la sala. Ambos mirándose intensamente y tocando más de lo que deberían.

___ ¡Chicos! ¡¿Ustedes van a querer pizza, porque Nora está...?! ___ Dylan salió repentinamente de la cocina, provocando que Camila dejara caer su teléfono. Lauren saltó del susto y Aaron junto a su esposo volvieron al mundo real ___ ¿Iban a tener sexo contra la pared de la sala? ¿Frente a mamá y Camila? ¿En serio chicos?

Ambos se sonrojaron fuertemente ante aquella mención. Camila río.

___ Estaba a nada de tener buen porno gay Dylan. Demonios, adiós a mi programa de internet.

Dylan sonrió.

___ Deja de ser tan cruel Camilita, no olvides que ellos no son los únicos desubicados en ésta casa ___ apunto ágilmente a su madre, de manera disimulada y sin que Aaron o su esposo lo notaran.

Lauren se sonrojó con fuerza y Camila tapó su rostro con vergüenza.

___ Tenías que decirlo, ¿verdad? Tú simplemente no puedes callarte, ¿cierto Dylan?

Eterno pecadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora