TOCKA [+18]

ПЕРВОЕ ВПЕЧАТЛЕНИЕ

(pervoye vpechatleniye)

PRIMERAS IMPRESIONES

Shaw

Hay algo morboso en el hecho de sobre exponer el amor al juicio de quienes te rodean; como si el sentimiento pudiese construirse en base a la opinión externa y no a cómo nos hace sentir esa persona especial.

El amor de Ronan con Gaira es una clara exposición morbosa de que el amor es un sentimiento demasiado grotesco y rebuscado. Definitivamente nunca voy a enamorarme de nadie que tenga ese poder cegador sobre mí.

Hace una hora atrás, Ronan la traía de la mano a casa, pasó junto a la sala donde yo veía televisión y su demostración de afecto con besos en el cuello de su novia no pasó desapercibido para mí.

Es asqueroso.

Ronan parece un perro faldero lamiéndole el rostro cada par de minutos.

Ugh.

—Shaw, ¿puedes llamar a tu hermano a cenar? La cena ya casi está lista —advierte mi madre desde el umbral de la cocina. Trae un delantal con flores que le regalé hace tres años, cuando apenas podía recordar las letras de su nombre.

—Los dibujos animados casi terminan, también.

—Shaw, ahora, ¿puedes?

Resoplo, volviéndome hacia ella con un mohín de súplica que se ha vuelto mi arma más letal. Este hermoso rostro de cabello negro y ojos brillantes y soñadores —como dice mamá— es una debilidad que no deja pasar desapercibida.

—Quiero acabarlo...

—Si vas ahora, te dejaré tomar los chocolates de la alacena de postre.

—¿Los que yo quiera? —inquiero, me siento ansioso repentinamente.

—Los que tú quieras.

—¡Rayos! —suelto, saltando del sofá. Mi táctica de manipulación ha sido retada por un mayor incentivo. No sabía que enfrentaba a una profesional—. Lo siento, voy ahora mismo, señora mamá —apremio con una señal del ejército antes de desaparecer escaleras arriba.

La emoción me gana de antemano y voy saltando escalones y pisoteando la alfombra ahora desacomodada.

A veces pienso un poco en Ronan y en cómo fracasó nuestro lazo familiar; lo intentamos de todo, juegos, salidas, el deporte, pero nada nunca nos unió de una forma efectiva.

Tengo pocos recuerdos de niños en que alguna vez coincidiéramos en algo al mismo tiempo. Solo somos él y yo, y a veces es un poco deprimente no tener el apoyo del hermano mayor que siempre se negó a ser conmigo.

Suspiro.

Pasa ser sincero, nunca lo necesité. Nos conocimos de una forma brusca que nos generó un rechazo inmediato. Las primeras impresiones no pueden repetirse y creo que la nuestra nos influyó demasiado en el paso del tiempo.