❝𝐅𝐀𝐋𝐒𝐀 𝐈𝐍𝐎𝐂𝐄𝐍𝐂𝐈𝐀❞ ⎜ ❝Todos te ven como el adorable e inocente solecito, pero nadie sabe que te gusta gemir mi nombre mientras me montas y ruegas por mis marcas.❞
Jaemin es tierno y risueño con todos en el instituto, lo adoran y creen q...
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Llevaban algo de cinco minutos en silencio, y Jeno no quería presionarlo pero comenzaba a ponerse impaciente. Notaba la incomodidad y la dificultad del rubio por decir cualquier cosa, realmente debía ser algo bastante malo para que le costara tanto decirlo.
— Jaemin, si es tan malo para ti entonces no me lo cuentes ahora. Hazlo cuando sientas que puedes —dijo tranquilo, acariciando las hebras claras que se movían suavemente por la ligera brisa que comenzaba a correr.
Entonces, de forma repentina y algo desesperada, Jaemin lo agarró de la ropa y lo atrajo de un brusco movimiento que dejó al castaño casi encima suyo, sintiendo así que los brazos ajenos lo rodeaban con urgencia.
— Quedate así mientras hablo, ¿bien? Es más fácil para mi si no me miras —admitió avergonzado.
Jeno frunció el ceño poco comprensivo, pero no objetó nada y sólo se acomodó entre sus piernas para quedar más cómodo y corresponder el agarre que Jaemin le imponía.
— La verdad, es que te mentí en muchas cosas, Dottori —comenzó diciendo contra el pecho del castaño —, pero hay algo que es sumamente jodido y que te lo quiero contar porqué siento que debes saberlo, sino no me quedaré tranquilo.
— ¿Me vas a decir que antes eras mujer y que te implantaron un pene? —soltó con el mentón sobre la cabeza del rubio, sintiéndolo reírse contra su ropa.
— ¡No! Eso no, tonto. Aish, intento ser serio —se quejó en un pequeño berrinche —, y mi pene es muy real —dijo luego de unos segundos, sacándole una pequeña carcajada al castaño.
— Sólo quería hacerte reír porqué estás muy tenso.
Jaemin respiró hondo y finalmente se sintió listo.
— ¿Recuerdas cuándo te conté de mi padre? Que había muerto cuando yo tenia dos años —dijo tranquilo, aunque su corazón estaba latiendo exageradamente rápido, lleno de nervios y ansiedad.
— Sí.
— Era mentira. No... no está muerto —aclaró, y enseguida Jeno intentó alejarse para verlo un poco molesto, pero no le permitió alejarse porque se aferró más fuerte a él.
— Jaemin, ¿cómo mientes con algo así? Yo puedo odiar a mi padre, pero nunca diría algo como eso.
— Honestamente, que estuviera muerto sería mejor, porqué fue un hijo de puta... p-peor que el tuyo —explicó por lo bajo. Cuando sintió el cuerpo ajeno relajarse entre sus brazos, enseguida continuó: —, él me violaba, Dottori, durante siete años lo hizo —soltó por fin, pasando saliva dolorosamente. Se estaba sintiendo sumamente vulnerable y expuesto, como si le hubieran sacado alguna clase de escudo o coraza que lo protegía de todo, a su vez que mantenía todo aquello que lo atormentaba dentro suyo sin poder salir.
