Capítulo 13: Tenemos que hablar.

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 — ¿Qué hacen? —les pregunté a las chicas.

Ellas se miraron y me extendieron una gran sonrisa. —estamos organizando un viaje, por Semana Santa— dijeron al mismo tiempo.

Yo me acomodé a su lado revisé los planes y saqué las cuentas con ellas de los gastos que tendríamos. Serían 3 días aprovechando que Salín no abriría el súper el viernes santo.

—creo que lo mejor sería rentar un auto, así podemos invitar a Yen. — saque las cuentas.

—Pero ella va a querer ir con Javier, no caeremos en un auto. — responde preocupada Lili

La mexicana y yo empezamos a reír, sin entender su lógica, en un auto caen perfectamente, cinco personas.

—Claro que caemos todas, tú, Yen y Anahí atrás. Javier conduce y yo de copiloto. — le señale haciendo los cálculos.

—¡ah! sí, perdón estaba contando a Luca también— su voz sonó un poco triste.

Se hico un silencio incomodo por un momento, resulta que Luca iba a viajar con su familia a España. Iba a aprovechar el viaje para contarles del bebé que venía en camino, aunque él seguía diciendo que ese bebe no era de él.

—será mejor que llames a los chicos— señalo la mexicana.

Los llamo de inmediato, Javier aceptó encantado, estaba con Yen así que dijeron que si después de explicar le los gastos y que él debía conducir.

—¡todo listo!

—espera, ¿tú no tienes que cuidar a Charlotte? — pregunto la argentina.

Moví la cabeza, negando. Pasa que el señor William, con la directora organizaron un viaje familiar, así todos los trabajadores de la casa tenían libre.

—¿Y Adrien? — pregunto ahora Anahí.

Levante mis hombros como respuesta, la verdad no he hablado con él después de lo que pasó en mi habitación la última vez, todavía no tenía una decisión. Quiero seguir siendo su amiga, pero también quiero estar con él. Pero tengo miedo de enamorarme, no veo la manera que todo eso termine bien.

*******

Llegó el día, nos dirigimos a un bello lugar con enormes acantilados. Era un lugar muy verde, pero lo recorreremos al día siguiente. Salimos muy temprano en la madrugada, pusimos música para que Javier no se durmiera, saque las mejores cumbias de mi lista.

Llegamos a una pequeña cabaña, era muy hermosa tenía dos habitaciones, dejamos a Yen y Javier juntos y nosotras nos acomodamos en la otra.

Yen se apoyó en el marco de la puerta de nuestra habitación —voy a preparar el almuerzo, mientras Javier descansa.

La mexicana se puso paro de la cama —yo te ayudo.

salieron juntas en dirección a la cocina. Lili, estaba como loca buscando algo en su bolso, saco todo y lo volvió acomodar unas tres veces.

—no puede ser, no traje mis pastillas anticonceptivas. — dijo tomándose la cabeza.

Terminé de hacer la cama— Vi una farmacia unas cuadras atrás, podemos ir en el auto.

Cerro su bolso con fuerza —Pero Javier ya se acostó— me miro con decepción.

—yo te llevo, qué tan difícil puede ser manejar por la izquierda, aparte no vi policías en el camino.

Ella asintió y salimos. Le fui contando cómo aprendí a manejar, de la vez que me estrellé contra el portón de un vecino cuando estaba aprendiendo.

The last condition (En Corrección)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora