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Cali

No pude conciliar el sueño pensando en las actitudes de todos los chicos hacía mí, después de que todos termináramos de comer helado y cenar, todos los hermanos se fueron al estudio dejándonos a mis hijos y a mi en el cuarto de juegos, la única persona que se acercó a vernos o más bien a los niños fue Sam, pero la note distante hacia mí, quise saber qué pasaba pero ninguno dijo algo, y más o menos a media noche escuche un par de carcajadas en la sala, abrí un poco mi puerta y escuche a todos riendo, la única imagen desconocida que vi fue de una mujer con cabello cobrizo.

Aquello me hizo sentir mal, asi que toda la noche estuve investigando acerca de los Galiano y la guerra que tenían con Sicilia, pero algo que tambien me atormentaba era el asesinato de Halek, ellos actuan como si aun estuviera con ellos, pero lo que no entiendo es como lucen tan tranquilos sin tener el cuerpo de su hermano ante una santa sepultura, hubo un momento en la noche que todo el ruido seso.

Mis hijos conociéndolos ni siquiera se habrían inmutado ante todo el ruido que se encontrara afuera, agregando que su cuarto estaba más seguro que todos los otros.

No solo investigue acerca de todo su mundo de ellos, también en su estilo de vida, estuve bastante tiempo tratando de averiguar sus prácticas sexuales, descubriendo que lo que le hice a Henzo se incluía en una práctica que se llama "pegging" la cual es un tipo de juego de rol en el que el hombre y la mujer invierten los papeles convirtiendo al hombre en una sumisa.

Y soy sincera, me excite.

No dormí en toda la noche aparte que el jet lag me había afectado un poco, decidí tomar una pequeña ducha para no parecer zombie y decidí arreglarme elegantemente.

¡Estamos en Italia!

Tome un vestido rojo que era la combinación de algo casual pero no tanto, un poco suelto del busto pero ceñido por la cintura y con una ligera abertura en la pierna izquierda, me maquille sutilmente pero las ojeras se notaban un poco, hice ondas en m cabello para no verme tan simple y para darle un toque me coloque unas zapatillas blancas con tirantes que se enrollan en mis tobillos.

Nunca dejes que un hombre te vea derrotado.

Salí de mi habitación y observé que eran las nueve de la mañana, mis hijos suponiendo que se acostaron tarde se levantaría hasta medio dia y los "narco italianos" son madrugadores así que supuse que no estarían pero al llegar a la cocina me encontré a la persona que atormento mi noche y ni siquiera se quien es.

Aquella mujer de cabello cobrizo y cuerpo deslumbrante está de espaldas a mí observando el pequeño estanque que se ve desde la mesa que se encuentra en la cocina, tiene un vestido blanco algo suelto sin ser nada atrevido, luce elegante.

Y creo suponer quién podría ser, aquello me hace sentir tonta ¿No dormí por eso?

—¿Sabes? Es de mala educación no saludar— me dice.

—Ahh.. lo siento— se levanta de su lugar y puedo observar mejor, es una copia de Helio pero en mujer y hermosa.

—Tranquila, yo estoy invadiendo su espacio— se acerca hacia la cafetera y toma una taza color azul pastel.—¿Quieres un poco?

—Si, de hecho a eso venía, disculpe soy Ale...

—Alejandra Cali, abogada de la ADE en México con dos pequeños hijos llamados Luk y Ares que son hijos de Hades...—aquello me deja desconcertada, ella sabe quien soy pero ni la conozco.

—¿Como sabes eso?— dejó a un lado su formalismo y siento como mis manos se empiezan a empapar.

—Tranquila, puedo identificar el parecido de mis nietos—dice con una sonrisa despreocupada.

El Ángel De La MuerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora