Capitulo 9

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Pasó las fiestas navideñas con Aome, y realmente le había agradado vivir todo eso con ella, le agrado ver como trataba a Kiki, y como este había adoptado el papel de primo mayor con las hijas de Rin y Sesshomaru.

Rin: Las gemelas lo adoran.
Aome: Y él las cuida hasta cuándo están jugando.
Rin: ¿Lo has pensado Aome?
Aome: ¿De qué hablas Rin?
Rin: Tener hijos, digo, ya tienes a Shippo y a Kiki, pero... ¿No crees que sería lindo darles un hermano? Uno que se parezca a ti y a Mu.
Aome: No he descartado esa posibilidad. - sonriendo mientras miraba a la nada - un hijo, un hijo con Mu.
Rin: Nunca es demasiado tarde, pero tampoco es demasiado pronto.
Aome: ¿Te lo imaginas Rin? - preguntó mirándola con ilusión - Un hijo mío y de Mu, hermano menor de Shippo y Kiki.
Rin: Veo que lo has pensado más de una vez. - sonriendo -
Aome: Rin, yo sería tan feliz de que algo así pasara.

Todo eso había sido escuchado por Mu y Sesshomaru, quienes habían ido a buscarlas, Sesshomaru no estaba muy feliz al saber que Aome pensaba en tener hijos, pero Mu... Él era otra historia, a él tambien le hacia ilusión tener hijos con Aome, llenar de hermanos a Shippo y Kiki.

Sesshomaru: No te hagas ilusiones. - mirando a Mu - Aome es muy jóven para tener hijos.
Mu: No he dicho nada.

......

Todo le había agradado, todo había sido perfecto, hasta que tuvieron que regresar a Rodorio, pues una semana después de su regreso, alguien le había comenzado a enviar cargar anónimas a Aome.

Mu: ¿Ocurre algo Aome? - pregunto mientras la veía leer algo bastante concentrada.
Aome: Mu.... ¿Quien es Mii?
Mu: ¿Mii? - mirándola con notable confusión -
Aome: Si, me enviaron esto. - entregándole el papel - Ya han sido varios anónimos, y en este y el anterior dice que me dejaras como dejaste a Mii.

Hasta ese momento Mu se dió cuenta de que alguien más sabía de Aome, sus compañeros no se lo dirían, pues sabían que era algo que sólo le correspondía a él, y Mii de Delfín, si, salieron unas cuantas veces, sin embargo nunca se concretó nada entre ellos, y no había ningún tipo de resentimientos entre ellos.

Mu: Aome... Mii es una chica con la que salí unas cuantas veces.  - llevándola a sentarse en el sofá - Pero no llegamos a nada, no entiendo porque en este anónimo te dicen esto.
Aome: Supongo que es alguien que tiene algo en tu contra.
Mu: Probablemente. - se acercó a ella para abrazarla y besar su frente - Voy a resolver esto, te lo prometo.
Aome: Te creo.
Mu: Creo que es hora de irnos. - mirando a Kiki dormido en el sofá - Kiki ya está dormido.
Aome: Quédense. - lo abrazo mientras sentía como el color rojo adornaba su rostro - Kiki puede dormir en la otra habitación, y tú....
Mu: ¿Yo?
Aome: Tú puedes dormir conmigo.

Mu ni dijo nada, la apartó un poco para mirarla a los ojos, y al verla así, tan tímida, no pudo hacer más que sonreír, besar su frente y después besarla en los labios.

Mu: Llevaré a Kiki a la habitación. - dijo después de deshacer el beso -
Aome: Está bien.

Cuando Mu dejo a Kiki y salió en busca de Aome, ella ya estaba en su habitación, se acababa de lavar la cara y su cabello estaba amarrado en una trenza, le sonrió y entro para dormir.

Mu: Aome. - llamo su atención al estar acostados - El otro día escuché tu plática con Rin.
Aome: ¿Lo escuchaste todo?
Mu: Si. - besando su frente - Quiero que sepas que a mí me gustaría lo mismo, pero será cuando tú estés lista.
Aome: Yo estoy lista Mu, desde que acepte mis sentimientos por ti, se que estoy lista. - estirando su mano para apagar la luz -
Mu: No Aome, no la apagues. - deteniendola - Quiero recordar este momento, con cada detalle de ti.

La beso, cada parte de ella, cada cicatriz, incluso la que tenía gracias a que la atacaron.
La abrazo, la beso y le hizo saber lo mucho que la amaba, y al final, entro en ella, encontrándose con esa barrera que indicaba que ella le había entregado todo.

Mu: Te amo. - besandola - Te amo tanto.
Aome: También te amo.

Cuando la mañana llegó, ambos despertaron abrazados, y después de unos cuantos minutos de intercambiar besos y caricias, decidieron levantarse.

Kiki estaba feliz de haber dormido en casa de Aome, quería dormir todos los días ahí, quería despertar con el olor a desayuno y encontrar a sus padres en la cocina.

Días después

Los días siguieron pasando, Aome había dejado de recibir los anónimos, sin embargo, ahora quién los recibía era Mu, se había puesto en contacto con Sesshomaru, y este le dijo que no sabía que pasaba, pero que le ayudaría.

Kiki: Quiero ir a un día de campo con los dos. - mirandolos con ojos de súplica -
Aome: Sabes que no puedo negarte nada cuando me miras así. - apretando sus mejillas - iremos.
Mu: ¿Segura? Tu próximo día libre es en una semana.
Aome: Le pediré a Kanna que me cubra.

Ese día habían decidido ir al bosque, cerca del río, comieron lo que Aome había preparado para ellos.
Después de comer jugaron un rato, hasta que la pelota rodó lejos de ahí, y Aome fue a buscarla.

Fue cuando Mu se dió cuenta de que Aome se había tardado demasiado y además esos cosmos que estaba sintiendo no le gustaban nada, uno le pertenecía a Aome, pero el otro era bastante agresivo.

Corrió hacia el lugar y la encontró dentro de una barrera de color rosa, y a un espectro atacandola.
No le importó nada, uso su armadura en ese momento, se paró frente a Aome y paro el ataque.

Mu: ¡Muro de cristal!

El verdadero amor no es el primeroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora