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Capítulo 2

7:00 a.m.
Martes 10 de Junio

Me puse mis zapatos de la secundaria junto un abrigo, la mañana estaba fría, caminé hasta la puerta principal de mi casa quitando los cuatro cantados que estaban en ella, sí, todos los días es lo mismo, candados por las puertas  y por las ventanas, cadenas fuertes cruzadas de un lado a otro por las ventanas incluyendo las puertas también, teníamos que estar bien asegurados, nadie sabía cuando los 3:33 podrían aparecer de nuevo. Luego de lograr abrir la puerta salí y la cerré con llave de nuevo, iba caminando por la acera de mi calle para mi secundaria como solía hacerlo todos los días, igual no quedaba tan lejos y así me ejercitaba.

Haylee, Haylee, sangre, matar, Haylee

Voces en mi cabeza, agarré mi cabeza con ambas manos y la sacudí con fuerza, volví a ver hacía el frente y está todo un poco borroso, todo lo veo muy lento, ¿qué me está pasado?, tragué grueso y fulminé con la mirada mi entorno.

—Haylee, ¿estás bien?— una voz masculina sonaba de lejos —. Haylee

Reaccioné y los vi, los gemelos estaban detrás mío, me volví y entreabrí mis labios.

—¿Estás bien?— preguntó el otro, no sabía cuál era cuál en ese momento, era la primera vez que les hablaba.

—Emmm sí, sí, solo me maree— respondí viendo a uno y al otro.

—Las voces— susurró el de mi derecha.

—Eh, ¿cómo has dicho?— pregunté.

¿Voces? ¿A qué se refería?

—Ignóralo, a veces habla solo o sin sentido— respondió el de mi izquierda —. Soy Matt y él Jayden— me ofreció su mano, dudé en aceptarla, pero lo hice.

Am, Haylee, estamos aquí, matar, Haylee, ven Haylee

—Aaaaa, que mierdaaaa— incliné mi cabeza hacia abajo dejando la mano de Matt y agarré mi cabeza con ambas manos apretándola fuerte.

Un frío está recorriendo por mi cuerpo mientras las voces se repetían en mi cabeza, cerré mis ojos y luego los abrí viendo a los gemelos, con mi vista borrosa logré ver sus sonrisas, esas sonrisas que pusieron ayer, esas sonrisas tan siniestras de medio lado, cerré mis ojos de nuevo y las voces se fueron, volví a verlos y ahora tenían cara de preocupación, ¿Cómo cambian su rostro con tanta facilidad?

—Haylee, creo que no deberías ir hoy a la secundaria, te ves mal— Jayden me miró, sus ojos tenían tanta oscuridad, tenían tanto ¿misterio?

En ese momento caí en conciencia y vi que llevaban uniformes de mi secundaria, ¿no son un poco mayores para ir a la secundaria?, tal vez aparentan más edad nada más.

—No, estoy bien— sonreí —. ¿Van a la secundaria? — les pregunté.

—Sí— respondió Matt —. Nos quedamos unos años pero ya estamos en último año, ¿te podemos acompañar por el camino? — preguntó con una sonrisa dulce, ¿cuantos tipos de sonrisas tienen estos gemelos?

—Supongo— respondí y caminé mientras ellos me seguían.

Si mi madre supiera esto me mataría, aún no tengo su aprobación para poder juntarme con ellos, pero tampoco iba ser tan mal educada y decirles que no.

Llevaba a un gemelo a cada lado, volví a ver a uno y luego al otro, eran idénticos, claro por algo son gemelos, se veían muy atractivos con el uniforme de la secundaria, sus brazos se pegaban muy bien a la manga y hacían remarcar sus músculos, ambos llevaban su cabello despeinado, ¿acaso no conocen los cepillos?, miré sus manos y ambos tenían anillos y sus uñas estaban pintadas de negro, no creo que en la secundaria acepten eso, seguramente les pedirán que se los quiten.

—Lindo pueblo— Jayden interrumpió el silencio.

—Sí— respondí.

—¿Hace cuanto vives aquí? — preguntó Matt.

—Desde que nací, siempre me he criado aquí— respondí mirando mis propios pasos.

—Ilusa— susurró Jayden.

—¿Perdón?— lo miré y fruncí el ceño.

—Te dije que lo ignorarás, solo no le hagas caso, suele hablar sin razón— su mirada y la de él se cruzaron, Matt tensó su mandíbula mientras Jayden le sonreía de medio lado y negaba con su cabeza.

No sé porque pero me dan mala espina, Matt es amable o por lo menos eso ha querido que yo creyera, pero Jayden, no lo sé, me ha llamado ilusa, ¿porqué?, Matt quiere cubrirlo siempre, pero, ¿porqué?

—Como digas— me crucé de brazos y luego me abracé a mi misma —. En la esquina está la secundaria, ojalá les guste— agarré las tiras que colgaban de mi bolso jugando con ellas.

—Es una mierda, ya la conocemos— chilló Jayden.

Matt suspiró y se aclaró de garganta, claro estaba llamándole la atención a Jayden. Soy joven pero no tonta.

—¿Ya han estado aquí antes?— pregunté, ya conocen la secundaria, ¿como?

—Solíamos....

Matt interrumpió a Jayden —. Solíamos venir hacer las vueltas para el traslado, por eso la conocemos—miró a Jayden y le dio una mirada de rabia —. A mí me gustó, solo que Jayden es Jayden y no le gusta nada— suspiró, volví a ver a Jayden que miraba el suelo mientras sonreía y negaba con la cabeza.

¿Que ocultaban y porque Matt siempre corregía a Jayden?

—Mmm ya— no dije nada más, ya estábamos frente a la secundaria, y luego de subir las gradas entramos.

En ese momento, todos lo que estaban en el pasillo volvieron a ver, o a verlos a ellos, mi presencia ahí era como si no existiera, nadie me conocía, y los que me hablaban era solo mi mejor amiga Alisa y Daila que era una amiga que conocía desde hace mucho y uno que otro compañero de clase, caminé junto a los gemelos por medio del pasillo uno a cada lado y yo en el centro, susurros por todo lado, las chicas boquiabiertas viendo a los atractivos gemelos, tan solo ver las caras de los estudiantes me di cuenta que los gemelos ahora serían los reconocidos y los más hablados por la secundaria.

Llegué a medio del pasillo y me detuve —. En este salón voy yo, ¿en cual van ustedes?— pregunté —. Yo les diré donde queda.

—Biología— dijo Matt.

—En el segundo piso, primer pasillo, salón 48– les regalé una sonrisa de boca cerrada —. Bienvenidos.

—Gracias— contestó Matt.

Miré a Jayden y lo único que salió de su boca fue:

—Bienvenida, Haylee— sonrió siniestramente y se fue junto a Matt.

¿Bienvenida? ¿A que se refería?

Nota de autores: No olviden dejar sus votos y sus comentarios, este es el comienzo de una gran y oscura aventura....