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Capítulo 14

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Besaba su cuello mientras ella sonreía, llevábamos haciéndolo por varios minutos, mis manos recorrían su piel desnuda y suave, ella llevó sus labios a los míos y me beso con pasión, de las chicas que me he llevado a la cama ella es una de las mejores, claro ella ya tenía años de práctica.

—Nunca he follado tan bien como hoy— una sonrisa rosaba mis labios —. ¿Te has llevado a muchas chicas a la cama?— ella preguntó.

—Las suficientes, creo que ya tú entiendes eso— me lamé mis labios resecos —. Espero y lo repitamos, sabes que lo disfruto— disfruto lo que está por pasar, follar puedo hacerlo cuando quiera.

—Claro— su voz era suave y tranquila —. Contigo las veces que sean— su mano acaricio mi estómago, luego la bajo hasta que agarro mi miembro, sabía lo que iba hacer hasta que llegó la hora.

—Zaman mi— (Es tiempo), ellos entraron por la puerta, una sonrisa se formó en mi rostro al verla aterrorizada.

—......., ¿qué está pasando?— ella me preguntó asustada, me levanté de mi cama poniéndome el boxer, mientras ella agarraba la sábana y cubría su cuerpo.

—No te asustes, esto acabará pronto— sonreí mientras le daba una mirada a ellos de afirmación.

—Ellos, ellos son....son los 3:33– sus ojos empezaron a lagrimar.

—Yap— (hazlo), señalé con mi cabeza a ella, uno de ellos con su cabeza y manos vendadas se acerco a ella, entre sus gritos la alzó y se la llevó al lugar donde siempre ocurría lo que va a ocurrir..

—¿Geliyor musun?— (¿vienes?) preguntó uno de ellos.

—En seguida— le regalé una mirada y asintió.

Abrí mi gaveta y saqué una gasa y así mismo me envolví mis manos, no envolví mi cabeza porque ya ella había visto mi rostro cuando me la follé. Me puse un pantalón corto y me fui sin camisa para ese lugar.

Disfruto cada minuto de cada asesinato, todos los que mueren tienen algún motivo del porqué, matar para mi equipo es necesario pero por razones, para mi es un pasatiempo, aveces no me controlo, no pienso al inmediato y nada más mato sin ninguna razón, al paso de los años me han tenido que controlar e incluso controlarme, pero cuando salgo de control mato sin ningún sentido.

—....... por favor— suplicaba —. Diles que me suelten— ella estaba en desesperación.

—Telefon etmek— (llama), sí claro, tenía que llamar a ..... para ver cómo iba todo, esto está planeado como todos los asesinatos que hacemos en equipo.

—Her sey hazir hadi baslayalim— (todo está listo, comencemos) quién fuera que estuviera al otro lado de la línea confirmó que empezáramos con esto, ella lloraba descontroladamente, nunca pensó que este día fuera el último que iba a follar.

—No pensé que te la ibas a follar— la persona a mi derecha se froto sus manos con gasa.

—La oportunidad de follar no se pierde— admití.

—Por favor, por favor, déjeme ir, les prometo que no diré nada, yo....yo no diré nada de quiénes son,......, por favor— ella estaba amarrada a una silla, sus manos esposadas, sus pies amarrados y estaba desnuda.

—Siga suplicando por tu vida, porque es una de los mejores sonidos que puedo escuchar— le pasé mi mano envuelta en gasa por su cara —. A ver que te podremos hacer, cortarte una mano primero, mmmm, o te cortaremos el cuello, ¿qué opinan?— miré a las dos personas que estaban a mi lado.

—No me maten, por favor, ustedes.....ustedes son unos malditos monstruos— gritó ella entre llantos.

—Au, eso dolió— llevé mi mano al pecho fingiendo que me dolían sus palabras.