Más que un deber. (One Piece. Law y tú)

Especial: Una habilidad escondida.

Hace 13 años.

Después de que Doflamingo y su tripulación escaparan de Tsuru, había frustración y rabia, había perdido la Ope Ope.

-¿Corazón hablaba?- exclamó Giolla, todos compartían la incertidumbre.

-¿Alguien lo sabía?- cuestionó molesto, y observó con detalle a cada integrante de su familia, cuando sus ojos se posaron en (t/n), ella de manera inconsciente bajo la mirada, él frunció el ceño. -¿(t/n)?- todos se hicieron a un lado, haciendo un camino directo a la pequeña, quien no pudo evitar mostrarse nerviosa, ademas estaba triste, pues ni Corazón ni Law regresarían.

-Yo...- él se levantó de su asiento, y se acercó a ella, su aura era aterradora y las venas de su frente sobresalían, al estar a un paso de ella, la tomó del cuello, levantándola a su altura. -J... joven... amo...- no puedo evitar sollozar.

-Lo sabias y nunca me dijiste algo...- su agarre no era tan fuerte pues deseaba saber qué hizo que la niña le ocultara algo así.

-Co... Cora-san no es malo...- susurró, el miedo era tal que unas lágrimas escapaban por sus ojos. -Él ayudaría... a Law...

-¡Corazón era un traidor!- exclamó. -Me quitó la oportunidad de ser el rey absoluto... se supone que deberías ayudarme...- gritó y la joven seguía llorando. -¿Por qué?

-Cora-san... me prometio... venir por mi...- Doflamingo sintió como un balde de agua fría le cayó encima, su hermano no sólo le quitó la Ope Ope, a Law y ahora también (t/n).

Doflamingo la soltó bruscamente, ella al caer sintió su cuerpo entumido, levantó la vista y lo último que vio fue un golpe por parte de Diamante dirigirse hacia ella, después de eso todo se volvió negro...

Doflamingo se encerró en su habitación, caminando de un lado al otro, se cuestionaba qué haría con (t/n), era evidente su traición y debía matarla, pero aquella idea le parecía imposible...

-¿Por qué tú...- susurró con impotencia.

Cuando despertó, sentía un terrible dolor en la cabeza, se sentó en la cama y descubrió que tenía un grillete en la mano que la ataba a la cama.

-Es para que no escapes...- Baby5 estaba ahí, se mostraba triste y evitaba verla a los ojos.

-Baby5... yo...

-¿Por qué traicionaste al joven amo?- exigió saber, sollozando.

-Yo... no lo sé... cuando supe que Cora-san hablaba... quería decirle al joven amo... pero... en ese momento lo noté, él no era una mala persona...- explicó con un leve sonrojo.

-¡Te mataran!- gritó Baby5, no podía imaginar que la amiga que había hecho en la tripulación, simplemente sería eliminada, (t/n) ya no dijo nada, pues era cierto, pero no estaba asustada, si Corazón había muerto y Law posiblemente también estaría muerto por su enfermedad, ella ya no tenía a nadie.

Pasaron unos días, (t/n) seguía encerrada, Baby5 sólo le llevaba comida, todos se cuestionaban qué pasaría con ella, por qué Doflamingo se estaba tardando en aplicar dicha sentencia.

-Nee nee Doffy... ¿qué pasará con esa mocosa?- cuestionó con interés el ejecutivo.

-Es obvio que morira, pero ninguno de nosotros hará eso...- señaló ante la sorpresa del hombre moco.

-¿Qué planeas?- a Trébol le intrigaba ver a líder de la familia bastante serio, pues a Corazón no dudó en dispararle, pero con (t/n) era diferente.

Cierta tarde, en alta mar, un grupo de tres barcos quería interceptar a la Familia Donquixote, sin embargo ninguno de sus integrantes estaba preocupado, sino todo lo contrario, les causaba gracia que aquellos piratas se atrevieran a enfrentarlos.

-Son ingenuos...- se burló Giolla, quien cargaba a Dellinger.

-Podemos dejar que los mocosos se encarguen...- señaló Diamante.

-Buena idea...- Doflamingo salía del interior del barco, llevando a (t/n) del brazo, ante la sorpresa de todos.

-¡No se preocupe joven amo, seré de utilidad!- exclamó Baby5 mientras transformaba su brazo.

-No...- dijo lo que pasmo a todos. -(t/n) sola se hará cargo...

-¿Qué...?- la niña estaba pasmada, miró las tres embarcaciones, habían muchos hombres, podía contar 35.

-Si sobrevives, tu infierno comenzará ahora...- la soltó bruscamente y los enemigos se intrigaron por eso, Doflamingo los subestimaba y por eso mando a una simple niña.

La batalla comenzó, sólo ella llevaba una espada, su arma habitual con la cual pudo derribar a 3 sujetos, pero la perdió y fue golpeada, antes de poder levantarse, otros golpes le cayeron, había piratas que buscaban pasar a la niña y atacar a los otros miembros o al capitán, pero era fácilmente repelidos por Doflamingo.

Cada golpe dolía, era pateada, cuando podía abrir los ojos, veía como la mayoría reían por su desgracia, mientras Doflamingo se mostraba serio y Baby5 lagrimeaba.

-Sólo quiero morir...- pensó con tristeza. -Cora-san... Law...- las lágrimas eran inevitables y los golpes se intensificaron, sin duda moriría. -Basta... basta...- suplicaba mentalmente. -Acaben rápidamente conmigo...

Los enemigos parecían disfrutar el herir a una niña pequeña, después de ella irían por la Familia Donquixote.

(T/n) seguía con aquellos pensamientos, deseando que todo acabara de una vez, Doflamingo miraba y de repente se percató de algo.

-¡ACABEN DE UNA VEZ!- gritó (t/n) con la frente en el suelo, pero aquello liberó algo que derribó a todos los piratas invasores, la familia se pasmo por aquello.

-Mentira...- susurró Trébol.

-Haoshoku...- Diamante estaba incrédulo.

Notaron como (t/n) había quedado inconsciente tras eso, Doflamingo cerró el puño con rabia.

-Baby5... trata de las heridas de (t/n), los demás tiren la basura al mar...- señaló entrando de nuevo a la embarcación.

Esa noche, Doflamingo miraba dormir a la pequeña, no podía creer su suerte, (t/n) tenía el mismo haki que él, matarla en ese momento sería un desperdicio, pero lo último que quería era que ella lo dominara, al contrario, deseaba guardar su potencial.

Desde entonces su propósito fue doblegarla, humillarla, provocarle miedo, evitando a toda costa que expulsara su haki, algo que a lo largo de 13 años pudo hacer, sin embargo (t/n) ahora era libre, y con una guerra en puerta...

Todo podía pasar.