Capítulo 18: En la capital de las flores. Parte 1

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-Dígame Kin'emon-osan...- (t/n) seguía apenada por ser el centro de atención. -¿Asi llegaré a la capital de las flores?- cuestionó y el samurai al verla lo razonó un poco y después carraspeó la garganta.

-Tal vez me deje llevar gozaru...- admitió avergonzado, después cambio la ropa de la joven por un kimono más sencillo, de colores negros, terracotas y amarillo.

-Gracias...

-¡Bien! Llegó el momento... les recuerdo que mientras esperamos la llegada de Luffy-dono, debemos ser discretos y no armar alboroto, apéguense a sus papeles...- advirtió el samurai y todos asintieron.

Esa misma noche, (t/n) se acercó a la residencia de las oiran, la noche era oscura y apenas alumbraban las lámparas, ella se posó en la puerta sobre su cabeza traía una manta, debía apegarse a su papel.

-¿Quién está ahí?- un guardia de la puerta se acercó a la joven.

-Por favor... necesito ayuda...- sollozo (t/n).

-¿Quién eres?- dijo con desconfianza.

-Mi nombre es (t/n)... necesito ayuda...- bajo la mirada llorando.

-¿Qué pasa?- dijo un tanto preocupado.

-Necesito dinero... se me está acabando y no quiero terminar en un pueblo marginal...- se arrodillo. -¡Haré lo que sea... una amiga mía me dijo que podría venir y solitar trabajar!- suplico la joven.

El guardia se mostraba consternado, en primer lugar, no conocía a la joven frente a él, por otro lado, al verla detenidamente, no estaba tan mal, tal vez podría sacarle provecho.

-¿Qué pasa aquí?- (t/n) levantó la mirada, no pudo evitar sorprenderse, pues frente a ella estaba un hombre que despedía un aura de autoridad, no sabía si era bueno o malo.

-Jefe Kyoshiro... verá...- el guardia maldijo internamente, su oportunidad se había ido.

-Necesito ayuda...- (t/n) recobró su papel y bajo la mirada. -No quiero dejar la capital y necesito dinero, se lo suplico... déjeme trabajar aquí, haré lo que sea...- bajo la frente...- Kyoshiro la miró y pensó un poco, era extraño, y no conocía a la joven, pero su instinto le decía que aceptara, posiblemente una señal.

-Bien... entra...- comenzó a caminar y la joven lo siguió.

Cerca de ahí, Bepo, Penguin, Shachi observaban que (t/n) lo había logrado, se sonrieron mutuamente y fueron con Law para informarle.

Mientras tanto en aquella recidencia, (t/n) seguía a Kyoshiro, se sentía nerviosa, aunque ya había hecho misiones de espionaje, esta era su primera misión como una pirata Heart, así que no debía fallarle a su nuevo capitán.

-Dime niña...- el samurai llamó su atención. -¿Sabes realmente qué harás aquí?- cuestionó con malicia, (t/n) se tranquilizó.

-Lo que me deje hacer aquí... yo... yo no quiero dejar la capital...- admitió con la cabeza baja, en ese momento el samurai la tomó del mentón, mirándola detenidamente.

-No eres fea... eso es un punto a tu favor...- dijo con una leve sonrisa soltándola con delicadeza, después chasqueo los dedos y una mujer de edad avanzada y vestida de un kimono sencillo entro a la habitación.

-Llévala a una habitación... la pondremos aprueba para que trabaje aquí...- ordenó.

-Se lo agradezco mucho...- (t/n) bajo la cabeza en señal de gratitud, en lo poco que llevaba de viaje con los Mugiwara, observaba cómo actuaban los Samurais, así que aprendió modos y gestos para hacer un papel más convincente.

(T/n) fue llevada a un cuarto, donde la mujer le pidió quitarse sus prendas para bañarla y examinarla, sin embargo el primer problema se presentó pronto.

-¡No puede ser posible!- exclamó con enojo la mujer. -Tú cuerpo...- (t/n) se mostró un tanto molesta, pero era cierto, sus cicatrices eran un problema.

-¿Qué pasa?- Kyoshiro entró un poco molesto por el ruido y el drama.

-Está niña no es apta para el trabajo...- la señaló, y ahí el jefe lo comprendió, (t/n) tenía una toalla cubriendo su cuerpo, pero eran visibles sus cicatrices.

-Tienes razón puede ser un problema...- dijo pensativo, era sospechoso.

-Se lo ruego jefe Kyoshiro, necesito ayuda...- (t/n) opto por suplicar, si sospechaban de ella o la echaban, sería el fracaso de su misión.

-Podría ayudarnos...- una tercera persona se hacía presente, (t/n) levantó la vista para ver a una hermosa mujer, de cabellos verdes, quien poseía una mirada orgullosa.

-Komirasaki...- Kyoshiro se sorprendió por la interrupción de la oiran. -¿En qué piensas?- cuestionó con una leve sonrisa.

-¿Cual es tu nombre?- Komirasaki miró a fijamente a la recién llegada, quien volvió a bajar la mirada.

-(t/n)...

-Bien, puede ayudarnos a atender a los hombres de Kaido, después de todo esos hombres suelen ser bruscos, y muchas veces, las otras chicas se asustan al verlos, creo que (t/n)-san tiene más carácter...- señaló la Oiran, Kyoshiro lo pensó un poco y le dio la razón.

-Puede que tengas razón...- concluyó Kyoshiro.

-La tomaré bajo mi tutela...- Komirasaki se acercó a (t/n). -¿Estás de acuerdo (t/n)-san?- la joven levantó la vista.

-¡Por supuesto que si!- bajo la cabeza en señal de agradecimiento. -No sabe cómo le estoy agradecida...

-Descansa esta noche, mañana comenzará un largo y tediosos camino...- dijo con una amable sonrisa, mientras salía, Kyoshiro también dejó la habitación y después de vestirse, (t/n) fue llevaba a una habitación, suspiró con alivio, había logrado la primera fase de su plan, ahora debía ser firme e ingeniárselas para evitar ser tocada por otro hombre y conseguir la información para Kin'emon...

Más que un deber. (One Piece. Law y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora