Capítulo VIII

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Por fin ya eran más de las 3:30pm lo que significa termino de clases sabatinas, mi cuerpo con resaca lo agradece grandemente. Mis amigos y yo caminamos juntos de regreso, Kira y Cerez pelean por bandas musicales mientras yo me mantengo al margen riendo de los tontos que son, tontos pero amo a ambos, solo que no se los diré mucho en la vida real.

- En fin, tienes un gusto de mierda - insulta Kira y Cerez sonríe irritandola para luego decirle un insulto en italiano

- Sabes debimos traer alguna chuchería para este fin de semana - comentó tocando mi estómago que gruñe con ansiedad de dulce

- Verdad. Más lentas imposibles - suspira Kira con molestia. Me detengo de golpe y más adelante mis amigos lo hacen, voltean para verme confundidos

Camino los pasos que me quede atrás y agarro los hombros de mi mejor amigo que me mira sin entender mi reacción, sonrió porque su rostro se ve lindo con el gesto.

- Mejor amigo del mundo mundial, plis ¿irías por dulces a la cafetería? - preguntó

- Hablas de aquel que queda a 20 minutos de los dormitorios, donde estábamos hace nada ¿A esa cafetería? - dice señalando el obvio echo de que hable muy tarde

- Por fis, por fis. Es que nosotras nos iremos acomodando y quiero elegir buenas películas para el maraton, hazlo plis y te juro que haré el favor que me pidas - aprieto mis dedos alrededor de sus fuertes hombros, sin quitar mi mirada de perro a la suya fría de hielo

- Nunca me haces favores Trix - reclama saliendo de mi agarre

- Es que películas sin dulces no es película - digo mirando al cielo que va oscureciendo. Bien toca ser más agresiva

Vuelvo a agarrar a Cerez pero esta vez de la camisa del uniforme, la aprieto de forma que se arruga y se le levantó un poco y lo obligó a doblar su cuerpo para que se tire levemente sobre mi, su rostro queda cerca del mío, mucho para notar que mira mis labios por un segundo mientras sonríe de lado y todo remata con su cabello blanco cayendo en su frente ilumina sus grises ojos de tormenta de otoño. Regresó su vista a mis ojos para luego poner en blanco los suyos con fastidio

- Mira D'angelo hazme este favor por las buenas o por las malas - digo con voz baja pero firme

- Dramática - dice quitando de forma gentil mis manos de su camisa, así se coloca recto y saca su altura - La anotare y esta vez cumplirás tu palabra

Aplaudo complacida y Kira me sigue orgullosa, Cerez gira para regresar por nuestros dulces. Kira entrelaza su brazo con el mio para terminar de caminar hasta las habitaciones como dos niñas caprichosas...

[...]

I kissed a girl and I liked it
The taste of her cherry chapstick
I kissed a girl just to try it
I hope my boyfriend don't mind it... - cantamos con sentimiento la castaña y yo antes de que la puerta sonara

Extrañada me bajo de la cama para abrir la puerta mientras Kira sigue tarareando la canción de fondo. Lo raro es que no tenemos seguro en la puerta por lo que no debe ser Cerez, ya que el lo sabe

- ¿Quién es? - preguntó pero no creo que escuche por la música. Abro pensando que sería una de mis compañeras de piso

Quedó como piedra a mis ojos chocar con unos azules conocidos, la sonrisa del peli negro, ya que ahora tiene el cabello oscuro carbón y desenfadado marcando su increíble mandíbula y sus ojos se ven profundos al conectar con mis ojos. Trago saliva, me obligó a reaccionar y puedo encontrar mi voz

- ¡Keled! - saludo. La puerta de Cerez se abre y de ahí sale mi peli blanco amigo cambiado por ropa casual, una que le va muy bien

- Hey, mira a quien encontré en el camino - habla Cerez señalando a Keled una vez llega a su lado. Ambos siendo altos y super sexys me hacen sentir algo intimidada y familiarizada. Todo se torna caliente en mis pensamientos y eso que no he recordado todo lo del clóset

Eres tan Gay como para ser GayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora