Mi Corazón Es Todo Tuyo (LucaxAlberto +18)

Capítulo 39

Los primeros rayos salían, lo que hacía que el cielo se mirará de un color anaranjado.
Alberto despertó antes que su prometido, al momento de querer levantarse le fue imposible, ya que el castaño lo abrazaba como si el mayor fuera una almohada.

El de piel morena lo miró, le dió un beso en la frente y dijo en voz baja;

—Me encanta verte dormido, incluso cuando lo haces, te ves precioso pececito hermoso.

A lo que el menor, aún con sueño le respondió;
—Pero más hermoso es despertar y estar abrazándote ojitos.

—Buenos días bonito, ¿Cómo dormiste?
—dijo el mayor seguido de un beso en los labios de su amado—

—Buenos días guapo, dormí muy bien, pero lo más lindo de despertar, es saber que tú estás a mi lado —dijo el castaño correspondiendo el beso—

—Bueno bonito, tenemos que comenzar a planear todo sobre nuestra boda, ¿Cómo te gustaría que fuera? —expresó el mayor—

—En verdad ojitos, no me preocupa mucho los detalles, solo que cada centro de mesa hallan rosas rojas con girasoles, por qué me recuerda a la primera vez que tuvimos una cena y después... bueno ya sabes que pasó
—respondió el menor sonrojado con su mano detrás de su cuello—

—Bueno pececito, a mi no me gustaría que todo fuera de color blanco, preferiría que fuera como la primera vez que cenamos, como Giulia decoró, con listones verdes y morados por qué hace referencia al color de nuestras escamas  —dijo el mayor—

Luca sonrió y dijo tomando la mejilla del mayor;

—Está bien ojitos, lo que a ti te guste, mi también me gusta.

Alberto sonrió y le plantó un beso en los labios.

—Bien, ahora lo que sigue es que vamos a usar ese día, no se tú bonito, pero la verdad, con el traje que tenía ayer me sentía cómodo, pero quiero usar ese día uno de color negro —exclamó el moreno—

—Está bien ojitos, me parece bien, yo también me sentí cómodo con ese traje de ayer, solo que no quiera usar uno el día especial —dijo el castaño—

—¿A no?, ¿Entonces que quieres ponerte pececito? —preguntó extrañado el mayor—

—La verdad, es que, es que
-El menor tomo aire y dijo- Me gustaría... Usar un vestido largo y de color blanco.

El mayor lo miró con ternura, tomó la mejilla del contrario y dijo;
—Si ese es tu deseo pececito, está bien, te verás más que hermoso, te verás muy, pero muy guapo, más de lo que ya eres.

—Pero solo será durante la ceremonia religiosa ojitos, no quiero usarlo todo el rato, sólo quiero casarme contigo con un lindo vestido y después cambiarme por un traje de color negro, así como el tuyo —dijo el castaño—

—Está bien bonito, si así lo decides, está perfecto, pero la verdadera pregunta es, ¿En cuánto tiempo nos vamos a conyugar?
—Dijo el chico de los ojos color esmeralda—

—Yo quiero que sea un mes antes de que nuestro pequeño nazca ojitos —respondió el menor—

—Muy buen pececito, así será sí aquí lo deseas. Ahora vamos a casa de mi familia para que Giulia nos ayude a organizar todo, por que para ella no será tan complicado
—dijo el moreno—

Ambos se levantaron de la cama, se cambiaron, tomaron a su hijo y salieron con dirección a Portorosso.
Al llegar a casa de los Marcovaldo, la chica pelirroja los recibió e invito a pasar.

—Buenos días tortolitos, ¿Cómo están?
—exclamó la chica—

—Bueno días, venimos a pedir que nos ayudes a organizar nuestra boda, Luca y yo lo hablamos y será en un mes, antes de que nuestro hijo nazca, ¿Puedes ayudarnos con eso? —preguntó el chico de la piel morena—

—¡Claro que los ayudaré, cuéntenme como! Dijo la pelirroja muy contenta.
Ambos chicos le explicaron rápidamente sobre lo que habían hablado antes en la isla.

—Bueno, no será tarea fácil, pero no será problema para mí, dejen todo en mis manos, y Luca, en cuánto al vestido que dices, dile a tu madre y abuela que vengan con nosotros, iremos a la casa de modas para que tomen tus medidas y hagan el vestido a tu gusto, y en cuánto a sus trajes... Papá y el Señor Paguro pueden ir contigo y con Luca con el sastre del Pueblo para que tomen tus medidas también y hagan su traje a su estilo —dijo la pelirroja—

—Espera, ¿Por qué no estoy incluído para ir con ustedes a la casa de modas para ver a Luca? —preguntó el moreno algo molesto—

—Es que si el novio ve al otro es de mala suerte, es una tradición —exclamó la pelirroja—

—Naah, esos son supersticiones, no creo en eso —dijo el mayor riendo—

—Oye ojitos, anda, hazlo por mí, no es que te excluyamos, pero es algo curioso ¿No?, Anda no te pongas triste, total, iremos después nosotros juntos para nuestro traje —expresó el castaño con una miradita de súplica—

—¡Ahhh!, está bien bonito, todo sea por nuestra boda —dijo el moreno mientras le daba un beso apasionado en los labios—

—¡Hey, hey, hey, no están solos! —dijo la pelirroja interrumpiendo el beso de los chicos—

—¡Ahhhhgg Giulia!, ¿Por qué siempre tienes que ser tan imprudente? —dijo el moreno—

—¡Pues oye!, no están solos, hay personas presentes, dejen sus besos para después
—exclamó la pelirroja con sarcasmo—

—¡Ay ya, perdón!, No es culpa mía que estés más sola que yo antes en la isla —dijo el moreno— seguido de una risa por parte de los tres.

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Luca con vestido weey si 🥺❤️