Capítulo 24

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Todo quedó en un incómodo silencio por un par de minutos.

—Entonces... ¿Eso significa que voy a ser abuelo? —dijo el hombre de bigote con alegría mirando al de ojos verdes—

A lo que el moreno dijo;
Aspetta papá, ¿Entonces no estás molesto con nosotros?

—Para nada hijo, aunque no lo parezca, estoy feliz de que voy a ser abuelo, no estoy decepcionado de ti, ni mucho menos, el que venga un bebé en camino me da felicidad y más saber que es tuyo Alberto —dijo el hombre de bigote con una ligera sonrisa en su rostro—

—Pero Luca, ¿Desde hace cuanto tiempo estás esperando un hijo? —dijo Massimo—


—Pues básicamente me acabo de enterar jeje, apenas ayer fue que supe que estoy embarazado, pero todo bien, ahora no sé si mi hijo deba nacer en el hospital o bajo el agua —dijo el castaño—

—¿Por qué no vamos con tu familia pececito?, digo, ellos pueden sacarnos de esa duda y hablar con ellos sobre... Ya sabes nuestra pequeña metida de pata y de que formalmente somos novios —expresó el de ojos esmeralda—

—Está bien guapo, debemos hablar con ellos se una vez para sacarnos de dudas y tal vez ambos nos llevemos un buen sermón de mi mamá, ya sabes cómo es ella, algo... especial —expuso el castaño riendo—

—Sólo espero que no me golpeé enfrente de todos, aún así estaré preparado para eso
—dijo el moreno con un tono sarcástico—

—Anda, vayan de una vez para que hablen con tus padres Luca, no tarda en anochecer y deben volver aquí para la cena, y si tú familia lo desea, nos pueden acompañar está noche y asegúrate de que a mi hijo no le suceda nada —dijo el hombre con bigote con ironía—

—jeje, Gracias señor Massimo, yo les convenceré y en cuánto a su hijo no se preocupe, estará bien, eso espero —decía el castaño mientras pasaba su mano por detrás se su cuello con nerviosismo—
No te preocupes papá, estaré bien, estoy preparando por si mi suegra quiere golpearme —dijo el moreno con un tono de burla—

Ambos chicos salieron de casa y se dirigiendo al océano e iban camino a casa de la familia Paguro. Al llegar, Luca tocó el timbre y su madre los recibió.

—Luca, sabes que no necesitas tocar el timbre, está fue y siempre será tu casa
— dijo Daniela—

—Lo sé ma, pero prefiero tocar el timbre
—expuso el castaño mientras pasaba—

—Luca, cuando vienes con Alberto me preocupo, ya que verlos juntos no significa algo bueno, ¿Qué hicieron está vez?
—expresó la madre del menor cruzada de brazos—

—jeje, verás mamá, papá, abuela, tal vez se enojen con nosotros pero... se que nos entenderás.
Alberto y yo... estamos...
¿Están que Luca? —dijo Daniela ya desesperada—

—Lo que pasa señora, es que su hijo está embarazo, está esperando un hijo mío —dijo el moreno directo al grano, sin rodeos—

El castaño lo miró con enojo y preocupación pero no dijo nada.

—¿Ustedes me están diciendo que van a ser padres? —dijo Lorenzo—

—S yi señor Paguro, pero no sé preocupe, yo me haré responsable de lo que hice, a Luca y a mi futuro hijo o hija no le falta nada, yo estaré con ellos para cuidados, mientras yo esté con vida, a mi familia nada le va a faltar —dijo el de ojos verdes seguro de sus palabras—

—Y haces bien Alberto, no cualquiera se haría responsable de tal situación y me alegro que hables así de tu futuro hijo y de tu futuro esposo, por qué...¿Se van a casar?, ¿verdad? —decía la abuela de Luca—

—Emmm... si, si señora, Luca y yo vamos a casarnos pero... aún no tenemos nada planeado —dijo el mayor—

Luca, al escuchar que se casaría con Alberto no pudo evitar lanzarse encima de el diciendo con una gran emoción

—¡¿Enserio nos vamos a casar ojitos?!—

—¡Si pececito!, ya es una decisión, tu y yo vamos a ser marido y hombre lo más pronto posible —dijo Alberto—

—Ejem, les recuerdo que no están solos chicos, hay más personas a su alrededor
—dijo la abuela—

—si, perdonen jeje.
Pero mamá, abuela... ¿En cuánto tiempo tendré a mi hijo?, ¿Lo tendré aquí abajo o en el hospital arriba en la superficie?
—dijo Luca con nervios—

—si todo sale bien, lo tendrás en 6 meses burbuja, el período de gestación en nosostros los monstruos marinos es de 6 meses, y en cuánto al parto, yo recomiendo que sea en la superficie y si te preguntas el por qué de tu embarazo siento tu un macho, pues la respuesta es que algunos monstruos marinos macho pueden quedan embarazados o poner huevos, y en tu caso cargaras a tu hijo en tu vientre, así que es algo normal entre nosotros burbuja, no tienes nada de que preocuparte —dijo la abuela del menor—

—Gracias por resolverme también esa duda abuela —dijo el menor—

—Y en cuánto a ti Alberto, más te vale que cumplas con tú palabra y no dejes solo a mi hijo en esto, el ya te escogió a ti como su compañero de vida y espero no lo hagas sufrir nunca, de lo contrario, si veo que el derrama una sola lágrima por ti, te irá bastante mal muchachito —dijo Daniela con un tono amenazante hacía el de ojos
verdes—

—C...claro s...señora, le juro que nada de eso pasará, no se preocupe —dijo Alberto tartamudeando—

—¡Basta mamá!, lo asustas, ya déjalo en paz
—dijo Luca riendo— a lo que Alberto dijo hablando entre dientes;

—no tengo miedo pececito.

Todo lo anterior fue cerrado por un abrazo entre la familia Paguro, y la pareja.
Por cierto familia, mi suegro está preparando una cena y dijo que si gustan, pueden acompañarnos —dijo Luca—
Está bien hijo, iremos a esa cena —dijo Daniela—
La familia Paguro y la pareja salieron de su casa para dirigirse hacía casa se la familia Marcovaldo.

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Mi Corazón Es Todo Tuyo (LucaxAlberto +18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora