Mi Corazón Es Todo Tuyo (LucaxAlberto +18)

Capítulo 14

—El plan es completamente fácil, no es la gran cosa, lo que tienes que hacer es ser un obstáculo para ambos, solo hasta que Alberto se cansé de la situación, deje a Luca y el volverá a ti y ahí es dónde yo entro, al meterme con Alberto y fin del asunto, ¿Es algo sencillo, no? —Dijo Leonardo—

—La verdad es que si, bien, ¿Cuándo empezamos? —dijo Marina—

—Si es posible hoy mismo dijo el de ojos Avellana, así que ¿Tenemos un trato?, Trato hecho —dijo la chica—

Por otro lado, Luca llevaba a todos aquellos lugares que siempre quiso visitar con el amor de su vida, visitando uno tras otro por toda Génova, hasta que el recorrido terminó frente a la playa, Alberto estaba a punto de meterse al agua cuando fue detenido por Luca.

—¡No corazón!, aquí no podemos entrar al agua, ya que aquí la gente no está acostumbrada a ver monstruos marinos y si nos ven, pfff, sería muy malo para ambos
—expresó el menor tomando del hombro a su chico—

—¿Qué dices, entonces las veces que venías a la playa con Giulia no entrabas al agua?
—agregó el de piel morena—

—No mi cielo, yo nunca podía entrar al mar aquí, solo miraba a Giulia nadar y tal vez te suene muy pendejo esto pero, yo siento que si nos ven salir del agua como monstruos marinos seremos el centro de atención y probablemente nos querían llevar a un lugar horrible, a un laboratorio quizá, asesinarnos, separarnos y experimentar con nosotros —decía Luca triste a punto de llorar—

A lo que Alberto dijo;

—Hey, pececito no llores aquí, tranquilízate, nada malo pasará, además de que tus lágrimas dejarán ver tus escamas y no sería bueno eso, ven, vayamos al hotel a descansar un poco, ya que casi oscurece y mañana nos regresamos a Portorosso.

Luca y Alberto se dirigieron al hotel, entraron a su habitación y Alberto, con un tono sarcástico dijo;
—anda, aquí si puedes llorar mi vida, nadie te vea más que yo—

Lo cual hizo que Luca dijera entre molesto y riendo;

—¡Ay ay Scorfano! tú definitivamente si que sabes cómo hacerme reír deberás.

El mayor, al escuchar dijo;

—¿Cómo me llamaste Paguro?

A lo que el menor lo vió con una mirada atrevida y dijo;

—¿Pues qué, ese es tu apellido que no?

Alberto se abalanzó sobre el menor, lo sometió y le dijo en un tono seductor, ¿Cómo dices que me llamo?

Luca entendió el juego y le respondió;

—Tú te llamas Alberto Scorfano de Paguro a lo que el mayor se sonrojó y dijo;

—Ese nombre es... es... perfecto realmente me encanta, ¿sabes?
Y si entonces yo soy Alberto Scorfano de Paguro tu eres... Luca Paguro de Scorfano, ¿No es así pececito?

—No pues... Tienes toda la razón amorcito.

Agregó Luca acercadose a sus labios dándole un apasionado beso a su novio, el cual correspondió el beso del menor y lo continúo hasta que ambos se quedaron sin oxígeno y se separaron.

—Oye mi vida, creo que tengo un poco de hambre, ¿No quieres que bajemos al restaurante por algo de comer? —dijo Alberto con una mirada de súplica—

—Ahora que lo dices, yo también tengo algo de hambre, el helado no me llenó para nada —dijo Luca con una pequeña risa—

El menor estiró su mano hacia el mayor, este acepto y entrelazaron sus dedos y bajaron juntos a comer.

Ya en el restaurante ambos pidieron Lasagna acompañada con una copa de vino tinto, Alberto fue el primero el hablar y preguntó;

—¿Luca, cuánto es que tú me amas?

A lo cual al menor le saco un poco de onda la pregunta y contestó;

—Yo te amo de aquí hasta donde están las “anchoas” en el cielo, y todavía más lejos, mucho más lejos —dijo mientas le miraba los ojos color esmeralda de su amado—

—¿Y tú Alberto? ¿Cuánto me amas?, a lo que el mayor respondió;

—Luca, mi vida, mi amor por ti es tan gran grande como el océano, yo te llevo dentro, hasta la raíz de mi alma te llevo, eres lo mejor que me pudo haber pasado en la vida corazón, desde que te fuiste a estudiar yo solo solía pensar en cómo sería una vida a tu lado y ahora volviste junto a mí, me puedo dar cuenta de ello, y te puedo asegurar que es lo mejor que me ha pasado, nunca me cansaré de decírtelo.

Luca se sonrojó al escuchar eso y dijo con un tono caliente

—Felicidades guapo, te ganaste un premio el cuál te daré arriba, y como tú una vez me dijiste, Mi corazón es todo tuyo  —comentó el castaño —

Alberto ya tenía en mente a lo que su amando se refería, solo que no quiso preguntar antes de tiempo para no arruinar nada y dijo;

—Bien pececito lindo, terminemos de comer y vayamos a nuestra habitación a hacer “cositas malas”, a lo que Luca respondió;

—Iremos a hacer travesuras de adultos, lo que excito al moreno.

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Viene el segundo capítulo +18 🔥

Puede que sea más intenso que el primero, esperenlo :3

Recuerden tomar agua mojarritas. ❤️