Mi Corazón Es Todo Tuyo (LucaxAlberto +18)

Capítulo 17

Leonardo estaba sudando frío al escuchar a los muchachos preguntar sobre la maleta y hacia dónde iba o de dónde venía.

—V... vengo de...de... ¡De Florencia! Si de Florencia, es que m... mi tía, ¡Si mi tía esta muy enferma! y ay no, seguramente ya no estará con nosotros el próximo año por qué está muy enferma y fui a despedirme de ella es que pobrecita —decía el chico de los ojos avellana altamente nervioso y tartamudeando—

—¿Es enserio que no pudiste inventar una mentira mejor? jajajaja ni para mentir sirves —expresaron Alberto y Luca riendo—

—¡Es enserio!, No se que les causa risa, les estoy diciendo la verdad —dijo el de los ojos avellana enojado—

—Si, si lo que tú digas, dijeron los muchachos mientras se alejaban del lugar.

—Ya puedes bajar del tren Marina, esos dos ya se fueron —dijo Leonardo—

La chica bajo del tren y dijo;

—Bueno, ahora a llevar a cabo el plan, ya que no quiero dejar pasar mucho tiempo antes de llevarme a Luca de nuevo a Génova, dónde nunca debió hacer salido
—comentó la chica—

—Si, si, recuerda, tienes que hacer que se separen, métete con Alberto hasta por los ojos, pero recuerda, solo que el imbécil de Luca se de cuenta del engaño de Alberto, pero eso si Marina, tienes que ocultar tu identidad, tiñete el cabello, cambia de voz lo más posible y usa bastante maquillaje para que no seas reconocida fácilmente por el pendejo ese —dijo Leonardo—

—Pero tampoco le digas así culero, —yo lo amo y que no se te olvide, te vuelvo a escuchar que lo insultas y te arranco los huevos y te los pongo de ojos, —¿Estamos de acuerdo?— dijo la chica.

—¡Ay ya!, no es para tanto, anda vamos a llevar a cabo esto, por qué tampoco quiero dejar pasar mucho tiempo.

Por otro lado, los novios habían llegado a casa de la familia Marcovaldo, cuándo escuchó una voz familiar.

—¿Pero por qué volvieron tran pronto?
—Era Giulia que se acercaba a gran velocidad en su bicicleta quién venía de terminar algunos pedidos—

—Hola hermanita!, pues básicamente el asunto se arregló en menos de 1 hora, y solo decidimos pasar una noche en Génova, ya que nuestro padre necesita de mi para ayudarle en el negocio —dijo Alberto—

—Oh, ya veo, ¿Y como lo tomó Marina?
—expresó la pelirroja—

—Pues lo tomo bastante bien —dijo Luca con una pequeña risa—

—Sí claro, lo tomo tan bien que le dió una fuerte bofetada a Luca, con decirte que le quedó marca por unas horas —dijo el mayor con un tono sarcástico—

—Jajajaja tal vez te lo merecías Luca, salió brava la mujer —dijo la pelirroja riendo—

—Si, si, si, ¿Giulia sabes dónde está papá?
—preguntó el moreno—

—¡oh!, de hecho está algo molesto, no contigo, si no con Leonardo, ya que el muy hijo de puta desaparecido desde ayer, nadie sabe en dónde está —exclamó la chica—

—Oh ya sabemos dónde está, lo vimos en la estación de tren, dijo que tuvo que ir a Florencia de emergencia a ver a un familiar enfermo según el —dijo Luca sarcástico—

Los tres rieron sarcásticamente, llegó Massimo y dijo;

—Alberto, hijo, creí que tú y Luca volverían hasta mañana.

—Pues la idea era esa papá, pero el asunto se resolvió en poco tiempo, así que decidimos volver antes, ya que no quería dejarte solo con todo el trabajo —dijo Alberto—

—A propósito, Leonardo no vino a trabajar ayer, y nadie sabe dónde esta —dijo Massimo—

Parecía que habían invocado al chico, ya que este llegó por detrás y dijo

—Hola señor Marcovaldo, ¿Puedo hablar con usted a solas? —dijo el chico de los ojos avellana—

—Claro, pasemos a la pesquería y ahí le explicas el por qué tú desaparición —dijo el hombre de bigote con un tono serio y molesto—

—Espero tengas una buena excusa del por qué tú desaparición jovencito.

—Y si la tengo señor, tuve que salir sin avisarle a nadie rumbo a Florencia, ya que mi tía esta enferma y probablemente no sobreviva y quería ir a despedirme ella
—dijo el menor con lágrimas falsas en sus ojos—

Increíblemente el hombre del bigote le creyó tal mentira, mientas le daba consuelo al menor dijo; e

—Está bien Leonardo, lamento la situación, pero la próxima vez por favor avísame

—claro señor Marcovaldo —dijo el chico llorando falsamente—

—Jaja pobre tipo estúpido, cayó redondito en esta mentira —dijo el de los ojos avellana en su mente mientras estaba abrazo a Massimo—

—Bueno pececito, debo terminar las entregas que quedan pendientes, pero te espero aquí por la noche para cenar los 4 juntos, ¿Está bien? —dijo el moreno—

—Está bien ojitos, yo iré a ver a mis padres a si que te dejaré trabajar en paz solo por hoy eh —dijo Luca con un tono pícaro alzando la ceja—

Yo iré con una amiga —dijo la pelirroja— vuelvo en la noche para la cena, todos se despidieron y partieron a sus diferentes destinos. 

El de los ojos verdes llenaba la bicicleta con pescados para salir a realizar los últimos pedidos y salió a hacer las entregas. Una vez entregado el último pedido subió al monte Portorosso a descansar un poco y pudo ver a alguien sin reconocerla hasta que dijo exaltado;

—¿Qué esa no es... ¡¿MARINA!?—

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El próximo capítulo será muy interesante :0

¿Qué pasará?

No vemos en el siguiente capítulo mojarritas tomen agua, bai ❤️

(Gracias por leer) ◉‿◉