WEST || Joshua Bassett [#3]✔️

Capítulo 11

–Pues ya saben– dijo Jamie con una poco de nerviosismo y miedo en su mirada –escuché a a alguien que ahora va en décimo grado decir que en el onceavo grado una chica empezó a salir con él y casi fue expulsada–.

El alma regresó a mi cuerpo en el instante en el que Jamie terminó de darnos su teoría. Sentí mi respiración relajarse y el ataque de pánico alejarse conforme salían de su boca.

Al ser una buena adolescente, la ansiedad vivía en mi cuerpo todo el tiempo, al igual que el miedo a que descubran mi relación con Joshua; ahora si alguien llegaba con noticias de la escuela sobre el porqué estaban dando más seguridad en East High, la ansiedad hacía que mi mente se imaginara los peores escenarios posibles.

Todo eso abarcando el hecho de como mencioné, mi relación con Joshua, que alguien se enterara de que él tiene una novia de aquí sin necesidad de ser yo, o en el peor de los casos, que sinceramente no entiendo como mi mente llegó a imaginar eso, el rumor de que Joshua podría tener otra novia que no fuera yo. Pero eso no tenía nada que ver... ¿o si?

En fin, después de 20 largos minutos, entre platicas con Jamie, contándole sobre la escuela, el sistema y de como será bueno su último semestre si se juntaba con nosotros, logramos entrar a la escuela. A pesar de que íbamos tarde, al ser esto nuevo en el día nos dieron un papel que nos permitió llegar tarde a clase sin necesidad de tener retardo o algo por el estilo.

Los cuatro teníamos cuatro clases diferentes, es decir, no estaríamos juntos en el mismo salón, en mi caso me encontraba en Economía Avanzada con un profesor que impartía la misma materia en la Universidad de Utah, y si somos sinceros aquí, me vi forzada a tomar esta materia, no estaba en mis planes.

De acuerdo a mi consejero escolar, esa materia me ayudaría a entrar a universidades como Yale, Harvard, Columbia, etc. cualquier escuela de la Liga Ivy, y si no fuera por Joshua que también logró convencerme no estaría aquí.

Trataba de poner atención al profesor que estaba hablando frente a toda la clase sobre la base humana de la actividad económica, al igual que siempre, recargada en la pared, aburrida, cuando de la nada, escuché a la voz detrás de mí chistera unos ligeros: "Pstt", que suponía venían para mí.

–Pst... psttt... ____–.

Me giré confundida –¿qué quieres?–.

–Te tengo que preguntar algo– contestó susurrando.

–¿Qué?–.

–No es de mi incumbencia porque ya no me dedico a eso pero...– miró a su alrededor para cuidar que no hubiera nadie escuchando –...¿puedes estar en la escuela con Joshua en el edificio?–.

Y fue en ese momento cuando caí en la cuenta: Deja vu.

Max Gates preguntándome algo susurrando en medio de la clase, algo que tenía que ver con Joshua, exactamente igual que cuando comenzamos a salir él y yo si podemos llamarlo así.

Me quedé callada por unos segundos tratando de actuar lo más casual posible para no delatarme con mis movimientos, y es que por más raro que sonara y sinceramente daba miedo, Max sabía el lenguaje de cuerpo gracias a cuando tenía su sitio de chismes en la escuela, lo hacía un gran entrevistador.

–Sí, si puedo– respondí de lo más tranquila –en realidad no entiendo porque no debería–.

Él chico abrió los ojos sorprendido –creí que seguías con él o tenías algún contacto con él...–.

–Creíste mal– lo interrumpí –ahora debes poner atención a la clase si no quieres que te vuelvan a sacar–.

Me volví a mi asiento para sentarme normal y volver a fingir poner atención a la clase, todo para dejar a Max con la palabra en la boca mientras yo me sentía demasiado orgullosa por mi respuesta.

La clase continuaba siendo sorda para mis oídos, a la vez que en mi cabeza pasaba el pensamiento sobre como estar en la escuela con Joshua sería más difícil de lo que imaginaba, en el sentido de que las personas que sabían lo que había pasado con él el año pasado no dejaban de verme, con la mirada gritando: "ella salió con el actor", "casi la expulsan".

Tenía la presión de negar mi relación con él, una pelea en mi mente, cuando en realidad ese chico era todo lo que estaba bien en mi vida y era de lo que más amaba.

Por segunda vez tenía mi mente vagando por pensamientos, pensando en lo guapo que era mi novio y en todos los momentos que habíamos tenido... sí, a veces soy cursi, cuando de la nada, el profesor detuvo su clase por una persona que llamaba a la puerta.

Era la secretaria escolar. La Srita. Valdés llamó al profesor para que se acercara hasta donde ella estaba, y después de susurrarle un par de palabras, los dos voltearon a verme, logrando hacer contacto visual directo.

–____ Breslow– dijo el profesor –tome sus cosas, la solicitan en la oficina del director–.

Mierda.