Oxford (Gastina)

TWENTY EIGHT

[Nina]

En diez días Gastón aproximadamente a esta hora tendrá que tomar un avión hacia Oxford y nos volveremos a ver posiblemente después de un par de meses, cuando sea mi graduación. Él ya me prometió que intentaría terminar antes su primer curso en la Universidad para así él poder viajar a Buenos Aires y lograr estar presente en mi graduación. 

Gastón me prometió que el día en que me entreguen mi diploma en donde se me da mi acreditación donde se demuestra que he concluido el colegio de manera satisfactoria, él estará ahí, en primera fila, aplaudiéndome, sintiéndose orgulloso de mí. Él me dijo que estará a mi lado, que me tomará la mano a la distancia, que me sonreirá y me acompañará en todo momento para que así no me sienta sola y así yo pueda sentirlo a él junto a mí. Gastón me dijo que en cuanto regrese a Inglaterra, se comprará un lindo traje de esos estilo inglés para poder venir a mi fiesta de graduación. Me dijo que se comprara el traje más maravilloso, igual a uno que le describí una vez que le platiqué sobre una novela romántica inglesa que estaba leyendo hace poco. Le conté lo apuesto que en mi mente se veía el protagonista con ese estilo de traje, y al parecer, Gastón se tomó muy enserio mis palabras, pues al día siguiente por casualidad despareció ese libro de mi librero, y días después lo encontré en el escritorio de su cuarto. No me molesté, no pude hacerlo porque al abrir el libro, vi que el separador estaba justo en la página donde la protagonista describía como su amado iba vestido, con ese bello traje estilo inglés que la hizo suspirar. Gastón incluso marcó el párrafo en donde se describía a la perfección el estilo del traje de pies a cabeza.

Recuerdo haberlo visto temblar un poco cuando vio que descubrí que robó mi libro y que encima de todo, se había atrevido a marcarlo. Él sabía que yo me iba a molestar porque lo único que me podía hacer enfurecer en la vida, es que alguien tome mis cosas, más si se trata de alguno de mis libros. Además de que odio marcar los libros con bolígrafos o marcadores, yo prefiero usar post-its si quiero marcar alguna parte, porque de verdad me desagrada manchar las hojas de esa manera. Y él había hecho dos cosas que odiaba en la vida, sin embargo, me fue imposible molestarme cuando ese día lo escuché decirme:

—No te molestes Nina, por favor— él dio un paso acercándose a mí— todo tiene una explicación— lo miré con los brazos cruzados, esperando que me diera esa explicación— lo que pasa es que después de que me platicaras sobre tu libro, vi como brillaron tus ojos cuando me platicaste del baile ese tan importante que narra la protagonista, aquel en el que el chico del que está enamorada, le pide ser su novia, así que me fue imposible pasar por alto la manera tan encantadora en la que me dijiste la forma en la que él iba vestido, incluso me dijiste "me encantaría verte vestido un día con un traje así", por lo que me pareció una buena idea conseguir uno ahora que vuelva a Oxford, así podré usarlo cuando sea tu baile de graduación. 

>>Podría ser tu pareja y acompañarte en ese baile mientras uso ese traje que tanto te encantó imaginar en el cuerpo del protagonista— en seguida me puse roja y sentí como mi corazón dio un vuelco de felicidad— quería que fuera sorpresa, pero no quiero que pienses que te quise molestar al tomar tu libro y marcarlo de esa manera, cuando recordé que odiabas que la gente marcara los libros de esa manera, ya era muy tarde, por eso lo dejé marcado hasta la mitad, ni siquiera terminé de marcar la frase "hacía contraste con sus luminosos ojos azules esa noche"— él terminó de acercarse a mí hasta que tomó mis manos— de verdad lo siento, sólo quería prepararte una sorpresa así, pero entiendo si estás molesta...— no lo dejé terminar, tomé su rostro entre mis manos y choqué sus labios con los míos.

Gastón me prometió conseguir un traje igualito o al menos muy parecido al que el protagonista de esa historia usó en ese baile especial e importante para la historia. Él me dijo que sería mi pareja del baile, que pasaría a recogerme a mi casa en una limosina. Me dijo que permitiría que mis padres nos tomen muchas fotos, incluso me dijo que ese día usaría zapatos de vestir sólo por mí, porque ese tipo de zapatos eran los que usaba el protagonista de esa historia de amor. Me dijo que bailaríamos toda la noche y que él haría de esa noche una noche muy mágica y especial para mí. Una noche que nunca olvidaría.