Oxford (Gastina)

SIX

[Nina]

Era viernes, el día de mi aniversario número siete con Xavi, le había comprado un equipo de pinturas de acrílico, traía pequeños lienzos tamaño carta y unas lindas brochas.

Esperaba a que llegará al Blake, estaba nerviosa, mis regalos nunca se comparaban con lo de él, era el mejor dando obsequios. Sentí como un nuevo mensaje me llego, no pude evitar sonreír, sabía que era de Gastón, en toda la semana estuvimos manandonos correos hasta que comenzamos a intimidar más y volvios a hablar por mensajes de texto. Extrañaba esto.

Gastón:
Nina, buenos días, dime ¿cómo amaneció la chica más linda de la tierra?- no pude evitar ruborizarme al leer su saludo- me imagino que más hermosa que ayer. Vaya, ¿soy muy cursi, verdad?. Lo siento, prometí que no sería así.

De igual forma quiero que me digas como te va con tu noviesito Picasso, quiero saber como reacciona con tu regalo, y que es lo que te dará a ti.

No sé porque pero me sigue costando trabajo tratarte como amiga, si eres mi ex, bien espero irme acostumbrabdo. Estoy por ir a una fiesta y sólo espero no morir ebrio, deseame suerte. Te quiero chica anteojos.~

No pude evitar reír por todas sus ocurrencias, realmente lo extrañaba y la verdad él no era él único sintiendose extraño por nuestra faceta "amigos", a mi también me resulta extraño y más desde ayer que me contó de una tal Lisa, al parecer siente que está interesada en él y no pude evitar ponerme celosa, y más cuando dijo que era linda

Nina:
Gastón Perida de fiesta, ya se me había hecho raro no escuchar eso. Pero sí, te daré lujo de detalles de cuando vea a Xavi y le de el regalo, siento que se parece al equipo de pintura que le regalé hace un mes. Soy pésima novia.

Y sí, por favor no te pongas ebrio, sí lo haces seguro tendré que ir por ti hasta Oxford para que no mueras, igual sé que te puedes controlar. También te quiero chico mosquetero.~

Sí, fue el único apodo que se me vino a la cabeza cuándo el comenzó a llamarme "chica anteojos". Que poca imaginación Nina. De inmediato me llegó su repuesta.

Gastón:
Sin detalles, aún no me acostumbro a la idea de que se besen todo el tiempo, que asco- que gracioso eres Gastón, pensé y reí por lo bajo- y no, no eres pésima novia. Sin duda has sido la mejor que he tenido.

Haberlo dicho antes, me embriagare hasta perder la cordura y así hacer que vengas por mí.

Sabes que es broma, aunque no puedo negar que extraño verte y oír tu voz, como sea no me puedo poner romántico existiendo el riesgo de que tu novio esté cerca. Hablamos después de la fiesta, te quiero Nina Simonetti.~

Sentí mis venas vibrar y mi corazón latir desbocado, Gastón aún tenía ese efecto en mí. Lograba que me pusiera colorada y que deseará tenerlo a mi lado.

Ay Gastón Perida, ¿qué me hiciste?.

-Amor, hola.- no me di cuenta del momento en que llego Xavi por estar pensando en Gastón, ya era algo habitual desde el lunes. Debo dejar de hacerlo.

-Hola Xavi.- conteste y respondí a su beso de saludo. Me extendió un ramo de rosas y un chocolate. Sonreí, sabe cuánto me gusta esto.

-Feliz aniversario.- comentó alegre y después de darme los dos obsequios, sacó una pequeño paquete, me indicó que lo abriera y sin poder esperar un segundo más, lo hice.

Cuando quite el papel, una novela que hace tiempo quería leer sé puso frente a mí.

-Orgullo y prejuicio- susurre, tenía cinco meses que quería leerla, pero cada vez que estaba por comprarla, se agotaba. Al fin, y era una copia original del primer libro publicado- ¡está autografiado!, ¡Xavi eres el mejor, te amo!.- dejé que las palabras salieran de mi boca sin pensar y al igual que yo, Xavi se asombró. Él ya antes me había dicho que me amaba, pero yo no, era la primera vez.