Lo describí de pies a cabeza, nunca había especificado tan bien a una persona como lo hice con Enzo. Le conté que me gustaba alguien, le dije quién era esa persona sin decir nombre, estuve como un boludo explicándole todo, sin embargo, solo recibí de respuesta: "Na, te gusta una chica que es igual que yo, que buen gusto tenes rey. Pregúntale si tiene alguna minita para presentarme". En ese momento solo sonreí aunque haya salido una mueca.
¿Cómo debería sentirme ante eso? La persona de la que estás enamorado te diga que le presentes a una chica ya era mucho para mí. Quede como un boludo cuando lo miré triste y me fui de ahí. Si me delante o no a estas alturas ya no tenía sentido. Porque sí hice de todo desde quedarme mirándolo como un tonto durante horas mientras practicaba tiros libres con Franco hasta describirlo como dije antes y él no capto nada de eso, nunca lo va a hacer.
En estos momentos me encontraba en el vestuario guardando mis cosas en el bolso; hoy me la pasé ignorando como un campeón a Enzo, nunca lo hago aparte porque es el estúpido de mi mejor amigo del cual estoy enamorado, pero cuando te cansas de estar siempre atrás de él para ver si te da aunque sea 5 minutos de tu tiempo, llegas a estas instancias. Créanme cuando les digo que es cansador. Y Como frutilla del postre, tengo que soportar que me enseñara a todas las chicas con las que sale de vez en cuando.
-Fede, ¡Acá estás!-yo le sonreí desganado-¿Te pasa algo?-niego con la cabeza-Okey, ¿Te parece ir a cenar hoy? Inventé a una chica re linda, y me dijo que iba a ir con una amiga, no me quiero quedar solo con dos mujeres entonces decidí que vos irías conmigo como buen amigo que sos.
¿Ustedes escucharon eso? Debe ser una broma, una de muy mal gusto. Me está invitando a una cena para que el conozca a una más de su enorme ganado y encima quiere presentar a alguien.
-Bien, voy a ir-¿Qué acabo de decir qué?-¿A qué hora?
-Y yo que había pensado unas 100 oraciones para convencerte de ir a esa cena, fue más fácil de lo que pensé-ni yo sé porque acepté pero al fin y al cabo lo hice.
-Sí, sí, ¿A qué hora?
-A las 20:00hs, ¿Pasó por vos?
-Mándame la dirección por mensaje y nos vemos ahí-intenté sonar lo más cortante posible.
-¿Estás seguro que no te pasa nada? Te noto raro-interrogó.
-No nada, quédate tranquilo-agarré mis cosas y me fui.
Si el pibe me quiere presentar a alguien tendré que ir lo más "formal" que pueda. Espero no arrepentirme de todo esto y no llevarme una gran decepción está noche, por lo menos quiero pasarla, entre lo que se puede, bien.
Después de mucho tráfico pude llegar a mi casa; Trate de descansar un poco pero mis pensamientos no me dejaban. Suspiré, mejor preparo mi ropa y que sea lo que Dios quiera.
[...]
Más le vale que Enzo tenga la plata suficiente para pagar semejante restaurante. Tipo está bien que seamos futbolistas y que tengamos un sueldo bastante bueno, pero vivimos en Argentina, eso no te sirve ni para dos caramelos.
A lo lejos pude verlo, estaba realmente guapo con esos jeans negros y esa remera blanca simple con una campera de cuero encima; me acerqué a paso lento, tenía bastante miedo. La chica parecía bastante bonita, me sonrió una vez que me senté en la mesa. Al final no era tan malo después de todo, la chica de nombre Sofía sacaba temas a lo loco y nos dimos cuenta que teníamos bastantes cosas en común.
Tiempo después, decidimos ordenar la comida. Menos mal, ya tenía hambre.
-Hola, ¿Cómo están?-saludó el mesero a todos mientras me guiñaba el ojo. Pude ver la mirada matadora de Enzo sobre él-¿Qué van a ordenar?-preguntó amablemente. Mientras los de la mesa decidían que pedir, el chico empezaba a sacar temas de conversación-Sos lindo, ¿Sabías?
