ꜱᴇʀᴘᴇɴᴛɪɴᴇ ꜱᴇʀɪᴇꜱ | ᴛᴏᴍɪᴏɴᴇ

Susurros del Pasado, ch. 26

CAPÍTULO VEINTISEIS 

Narcissa la agarró de los brazos y la sacudió. "¿Dónde está?" preguntó desesperada. "¿Dónde está mi hijo?"

Cuando Draco entró desde la cocina, la preocupación desapareció poco a poco de las cuidadas cejas de Narcissa, comenzó a brillar. La bruja soltó a Harmony y abrazó a su hijo. 

"Si te llega a ocurrir algo, no sé lo que habría hecho conmigo," dijo Narcissa acariciando el pelo rubio de Draco. 

Las miradas de Snape y Harmony se cruzaron , asintiendo hacia el otro. 

"¿Tuvisteis mucho problema con el pequeño ejército que esperaba fuera?" Preguntó Harmony a los adultos. 

Sin soltar a Draco, Narcissa contestó, "Pelearon, pero nada puede contra una madre que quiere volver a su familia."

"Este pequeño ejército," añadió Snape, "puede que consistiera principalmente en oficiales del Ministerio, pero no estaban organizados. No parecían tener un plan de batalla, luchaban como pollos sin cabeza."

"Lo que significa que..."

"Que fueron a la competición, seguramente, sin el permiso, o el conocimiento, del Ministro."

"Así que las personas están comenzando a rebelarse."

"Más desde la Batalla de Hogwarts." Dijo. "Muchos perdieron a alguien en esa Batalla. Muchos se sienten en la obligación de vengarse contra lo que les fue arrebatado. Puede que seas el centro de la ira de las personas, pero hay algunos que pueden cambiar de opinión."

Harmony prestó atención a esto último. "¿Qué quieres decir?"

Los finos labios de Snape se apretaron, sabiendo que ese pequeño dato le interesaría. "Después de que Draco y tú escaparais en el ascensor, una gran masa se preparó para subir en el siguiente. Pero algunas personas bloquearon la entrada a los ascensores, ralentizando a la masa para que no pudiera alcanzaros." Miró con seriedad y ladeó la cabeza, "No todos parecían Mortífagos. Había gente a la que no había visto nunca; también un par de chicos de vuestra edad."

Harmony recibió estas noticias con agradecimiento y sonrió. Más gente además de los mortífagos estaba intentando protegerla. 

Viendo su sonrisa Snape intervino, "Pero no deberíamos relajarnos todavía. La gente que está en tu contra sigue siendo más, de lejos."

Pronto, Narcissa —siempre atenta de su aspecto— notó su vestido embarrado y preguntó a Harmony si la acompaña a limpiar. Ella accedió y preguntó a Snape si podía hacer algo respecto a sus quemaduras. No eran graves, aunque la piel quemada le escocía, y le llegaba desde el pecho hasta la espalda. Él dijo que, con permiso de los Malfoy, podía hacer una pomada usando sus ingredientes. Narcissa asintió y guió a Harmony escaleras arriba para que se cambiara. 

Cuando intentó quitarse el corset, soltó un gemido de dolor. Parte de la tela se había derretido en su cuerpo, por lo que intentar desprenderla era como quitarse capas de su propia piel. Pero con la ayuda de Narcissa, y su magia, la ropa cayó con ligereza, dejando a su paso manchas rojas en su estómago y espalda. Narcissa le dejó uno de sus vestidos, uno verde de terciopelo con un bordado plateado. Cubría brazos y piernas, era un vestido ceñido en el torso que le daba una apariencia delicada y femenina que otras prendas no. 

Narcissa se llevó la ropa antigua, Harmony pensó que quizá era para quemarla. Cosa que estaba bien. La ropa había tenido su uso y había servido su propósito y era un alivio poder quitársela, como si estuviera deshaciéndose de su parte de Mortífago, y se quedara ahora con algo más elegante, majestuoso.