—Tú, niño, vas a ser la causa de mi muerte.
Fueron sus últimas palabras antes de acercarse a grandes zancadas hacia mí y devorar con fuerza y ganas mis labios. Sus manos tomaron en seguida mis nalgas y las apretaron sin compasión, provocando que dejara salir varios jadeos en el beso.
Mi espalda chocó con fuerza contra el armarios y sus manos recorrieron todo mi cuerpo. La excitación me estaba llevando a otra dimensión, mi entrada no tardó en comenzar a lubricar, aquel líquido pegajoso y transparente cayendo por el interior de mis muslos. Yoongi me arrancó los boxers, rompiéndolos en el proceso y yo gemí en su boca preso por los sentimientos que afloraron en mi pecho por los toques dulces y a la vez salvajes del alfa en mi cuerpo.
Levanté los brazos y mi sudadera fue retirada, rompiendo el beso por unos segundos para pasar la tela entre nosotros.
—Te voy a dejar el cuerpo totalmente rojo de tantos azotes que voy a dejar en él.—Mordió el lóbulo de mi oreja.—Te he extrañando mucho, mucho.—Besó detrás de mi oreja.—Tus manos al frente, ya.
Tomó de sobre la cama las esposas de cuero negro y las abrió, quitando el broche de en medio de estas y poniéndolas una después de otra para luego unirlas con el broche nuevamente. Tiró de ellas, haciéndome caminar unos sentímetros más adelante. Rápido alzó mis manos y tomó una correa que estaba sujeta a una cadena atornillada al techo.
—Te acabo de atar al techo, si sientes que no te puedes sostener más o que duele, debes decirme. ¿Aún recuerdas tu palabra? Dime—Me exigió y yo asentí con la cabeza.
—Sí, la recuerdo. Azul.—Él sonrió asintiendo y se posicionó detrás de mí.
—Ya estas muy lubricado.—Pasó los dedos de su mano izquierda por entre mis muslos y estos subieron hasta mi entrada, acariciándola sin meter un solo dedo. Mis ojos se cerraron y solté el aire de golpe.—Sabes tan bien.—Frente a mí, metió sus dedos empapados de lubricante en su boca y los chupó, enredando su lengua entre su dedos.
Tiré de mis muñecas hacia abajo, comprobando que el agarre del techo era seguro y no me podría soltar con movimientos bruscos. El desapareció de mi vista y sin previo aviso su palma chocó contra mi glúteo izquierdo. Yo gemí alto y me hice para adelante, aguantando el picor en la zona.
—Te voy a poner el vibrador, ¿Ok?
—Sí, señor Min.
Escuché el sonido de la vibración del huevo unos echándose después, paró y luego su manos estaba acariciando mis nalgas.
—Tú culo me fascina, es tan lindo, tan redondo y joder, se ve tan atractivo con mi mano marcada en él.—Volvió a aporrear mi trasero con su mano, esta vez en el glúteo contrario.
—Me encanta que le guste, señor Min.—Otro golpe.—Ah...
—Quiero que te inclines hacia adelante, apóyate de tus manos, la cadenas aguantan todo tu peso y el de tres tu.—Así lo hice, tiré todo mi peso hacia adelante y levanté mi trasero lo más que pude.
Sus dedos se pasearon entre mis glúteos mientra su boca besaba lento y pasmado mi espalda baja. Un dedo entró en mi y sin querer pegué un pequeño salto, jadeando al instante que este se torció dentro de mí. Lo metió y sacó con una lentitud que rozaba la locura y pronto hubo otro, siendo los dos los que invadían mi entrada, doblándose en mi interior y tocando con insistencia aquel punto de placer intenso dentro de mí.
De mi boca no salían más que gemidos que rozaban loa gritos, mi miembro erecto en poco empezaría a doler por no ser atendido. La punta de mi pene lucía tan roja como sabía que estaba mi trasero después de varios golpes. Esta también brillaba, siendo mojada por líquido preseminal que expulsaba mi miembro gracias a las estimulaciones de Yoongi.
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Sʀ. Mɪɴ| ʸᵒᵒⁿᵐⁱⁿ| OMEGAVERSE✔︎
FanfictionJimin estaba terminando la secundaria. Yoongi estaba a punto de firmar un importante contrato. Jimin quería amor. Yoongi quería sexo. Jimin realmente quería algo con Min Yoongi. Yoongi no quería nada que tuviera que ver con una relación. 💫Yoonmin. ...