Si bien encontrar un par de cadáveres de dos sujetos ahogados en la playa era algo impactante, pero para Alice era más un — Ñe— Ni los conocía.
Así era la magia atrae todo tipo de circunstancias ajenas a lo cotidiano, incluso algunos seres mágicos se quejaron que un tiempo había traído demasiados cráneos de no sabían dónde y los dejaba regados por todo el mapa.
La fachada y el ambiente promedio de una bruja era tan aburrido para Alice, ha de admitir que cuando Betsy llegó a sus vidas pensó lo peor pero le mostró un mundo nuevo, en esos programas, las prendas, las ropas incluso descubrió series sobre chicas mágicas pero con colores vivos y más alegre, entre la comunidad de las brujas aún era un tema muy tabú así que siempre puede guardar otro secretito más.
Cuando rescataron al pequeño lo primero que se le vino a la mente fue la oportunidad de oro para probarle cada uno de los trajecitos disponibles que tenía con solo un poco de magia serían exactamente de su medida, cada uno más adorable que el anterior, nada era de ella todo era para el pequeño bebe o al menos eso le decía a todo mundo.
Alice salió con todo lo que podía cargar, tenía tantos modelos que tenía en mente.
— ¿No crees que son demasiados? — Cuestiono Betsy mientras le daba de comer con una fórmula que según Barb era apta para cualquier tipo de infante.
— ¿Demasiado? literalmente le has dado de comer casi un galón de esa fórmula al infante — Alice notó como su barriguita le quitaba ese encanto y ahora veía difícil ponerle algunos de los trajecitos que tenía, al menos tenía ropa normal y simple que podría usar por el momento, resignada regreso todo lo que había cargado nuevamente a su escondite.
Horas más tarde el pequeño se veía algo inquieto y arrugaba la cara, ambas brujas no tenían idea de qué hacer en este caso — Ya le diste unas palmaditas en la espalda — preguntó Alice.
— Varias veces, acaso le incomodara la ropa? — Betsy tenía esa duda
Justo en ese momento Susie había llegado de enterrar los cuerpos se les quedó mirando un momento y noto lo inquieto que estaba el bebe — tal vez un baño caliente ayude al niño a dormir— Susie subió al que era el baño principal tenía una amplia tina y rara vez este grupo terminaba haciéndose compañía, pero hoy tenían un invitado.
Susie se limpiaba el exceso de tierra que traía del panteón, Betsy preparaba el agua para que estuviera a una temperatura ideal y Alice desvestir al pequeño bebe — Y yo que pense que era una niña — Alice pensaba en las nuevas posibilidades y los conjuntos de atuendos que podrían modelar juntos.
— El agua está lista — Expresó Betsy.
Las tres miraron al pequeño y se dieron cuenta que era demasiado pequeño para una tina tan grande.
— Así que quien entra al agua con el bebe ? — cuestiono Betsy.
— ¡Piedra¡ !Papel¡ o !tijera¡ — Las tres brujas gritaron a la vez mostrando su jugada.
— Es enserio— se molesto Susie — Debería estar quejándome sin motivo aparente no estar trabajando de niñera —
— Deja de lloriquear y entra, casi recuperas tu almizcle de antes — Alice se tapaba su nariz.
Resignada Susie se comienza a quitar la ropa, lanzándosela en la cara a su amiga Alice en son de venganza.
— Al menos esta tibia — Susie se sentó y recibió al pequeño en sus brazos — Hola Oscar nos vemos de nuevo y ni se te ocurra hacer otra gracia de nuevo pequeña bolsita de orines— El resentimiento se palpaba en cada palabra.
ESTÁS LEYENDO
El pequeño alquimista
FantasyUn pequeño con un gran poder . . . Una bruja que lo cuidara de mala gana y una chica que le arrebataron todo