El pequeño alquimista

Parte 39 Posesión

Erizo se levantó algo confundida de la cama se sentía desorientada y la cabeza le palpitaba.

— ¿Alguien? Hola — Erizo comenzó a gritar tratando de buscar ayuda, pero al no recibir respuesta esta comenzó avanzar a la única puerta, al abrirla el brillante sol le impidió ver con claridad de inmediato pero a brevedad se acostumbró a su entorno.

La vista era diferente, una gran alberca, rodeado por un hermoso jardín lleno de arbustos llenos de rosas blancas y unos cuantos setos que rodeaban el lugar que conjugaba su verdor con el césped del jardín, al fondo se podía escuchar las olas del océano.

Erizo avanzó hacia la piscina y miró su reflejo — Que me pasó — Ella era mayor, tenía puesto un traje de baño de dos piezas y claramente no se veía como ella, se veía elegante e incluso cargaba ese enorme sombrero blanco y una copa en su mano derecha.

— Cariño al fin despiertas — Oscar muy diferente al amigo que conoce era varonil, musculoso todo una pieza de arte para la vista y esa voz grave que le daba un toque soberbio.

— Oscar que esta pasando — Comentó Erizo

— Bebiste demasiado — Oscar se acercó y le tomó de la barbilla — Eres igual de hermosa como el da que te conoci — Este gentilmente le beso la frente

Erizo estaba dudosa ante esta situación.

— Niños saluden a su madre que hoy estamos festejando — Oscar llamó a un par de pequeños que se abalanzaron sobre erizo llenándola de abrazos y pequeños besos en la mejillas.

— Eres la mejor mama del mundo— Comentó uno de los pequeños — Quiero que siempre estes a mi lado — Otro de ellos continuaba.

— YA BASTA!!! — Erizo entre lagrimas grito tan fuerte que espanto a los pequeños.

— Todo esta bien, su madre solo esta cansada — Oscar trataba de calmar a los asustados niños.

— Quien seas, basta de juegos ¿Qué quieres? — Erizo comenzó a buscar a su alrededor hasta que noto que en una mesa al final del jardín estaba tomando un poco de té y leyendo un periódico a la sombra de un gran árbol

Erizo comenzó a ir hacia esa señora, mientras el árbol bajo el cual estaba se comenzaba a marchitarse y comenzaba a perder sus hojas.

— Es suficiente no más ilusiones maldito fantasma — Erizo hablo muy enérgica.

La señora cerró su periódico — Toma asiento —

Erizo de mala gano se sentó frente a esta — ¿Quién eres y qué quieres?

— Solo una amiga de muchos años en el futuro, pero que viajó al pasado para matarte matarte — La señora contestó tranquilamente.

— matarme pero que te hice — Erizo estaba enojada —

— Solo sobrevivir a mi primer intento de asesinato, pero el destino es caprichoso y bueno ya sabras el resto eso ya hace como 11 años — La señora comenzaba a tornarse cada vez mas borrosa.

— 11 años fue cuando él se fue — Erizo estaba confundida — Que hiciste hace 11 años.

— No, no, no, sin spoilers — La señora comenzó a reírse — Solo debes saber que una amiga de tu futuro te intentara asesinar en el pasado, así que crees que podrás confiar en alguien mas —

— no importa vas a fracasar una y otra vez — Erizo habló con firmeza.

— Erizo, aprenderás que el futuro es incierto nunca es el mismo — La señora hablaba arrogantemente — tal vez ganaste esta vez pero y la siguiente, lo dudo —