El pequeño alquimista

Parte 22 Hombre de negocios

Susie estaba disfrutando de su comida con un ambiente literalmente agitado y diferentes bandos en la misma mesa.

Por un lado estaba Betsy con la que se supone sería su nueva pupila reclamando a Alice por hacer que los niños se pelearan, la pequeña que no dejaba de ver a Betsy mientras era la única que disfrutaba su sopa.

Por otro lado estaba Oscar a quien habían olvidado desamarrar, le sorprendía cómo se las ingeniaba para comer de todas formas su hamburguesa en esas condiciones claro no sin dejar de mirar con odio a su tía Alice, por el momento a ella no importaba, por ahora tenía hambre.

Después de haber terminado y haber eructado de felicidad por la buena comida Susie comenzó a percatarse.

— Oscar por que te falta un diente — Cuestiono Susie.

— Me ganaron en una pelea — comentó triste Oscar mirando de reojo a Erizo

— Espera? la nueva te gano? — Susie volteo a ver a Erizo quien estaba contenta disfrutando la sopa a pesar del ojo morado que tenía.

— Oscar? tu le hiciste eso? — Miró fijamente al pobre muchacho — La verdad estoy decepcionado Oscar con lo que te he enseñado la pudiste noquear con mucha facilidad y solo un ojo morado, mañana mismo regresas a entrenar con los monstruos que por cierto te extrañan.

Oscar solo acepto el regaño de mala gana — Pero mamá no podía pegarle — Oscar se acercó al oído de Susie — Ella es una chica y no tiene ya sabes que entre sus piernas —

— hooo ya entiendo — Susie le guiño un ojo, Susie aun pensaba que era un chico con gustos raros, bien todo mundo se podía equivocar.

— no quería lastimarla, aun le debo una disculpa — Oscar debía confesar — ella no me robo nada, yo me descuide y no me fije cuando le di mi cartera nos separamos y no la volví a ver, hoy me lo contó una de las niñas que conocí en el parque—

— Eso cambia las cosas — Susie estaba algo decepcionada pues tenía contemplado vengarse pero solo por diversión..

Susie usó su magia para desamarrarlo y abrazar a su pequeño — Ven aquí, siempre podrás ganar la pelea otro día — la bruja usó su magia para sutilmente arreglar el diente.

Susie busco entre sus cosas y saco un par de pociones — la más amarga solo por haber perdido —

Oscar tomó la poción sin dudar, era tan amarga como recordaba tanto que solo podía arrugar la cara, pero casi de inmediato le quitó las molestias por su pelea.

Susie le ofreció la otra a Erizo — Tómatela, igual de amargosa por dejarte manipular por Alice—

Erizo hizo lo mismo y de inmediato las molestias cesaron — Bien dame el cilindro que era de Oscar — Le pidió Susie a Erizo, esta sin dudar se lo dio.

Susie le mostró a Erizo como se podía destapar otra sección del mismo donde se podía ver una pequeña cantidad de una crema color verde, Susie tomo un poco con sus dedos y lo paso por el ojo morado de Erizo — Esta es una de las pociones curativas más fuertes que incluso te podría llegar a salvarla vida, de preferencia untada que si la comes te quedara el sabor amargo por dias— Casi de inmediato toda molestia del ojo cesó dejando a Erizo maravillada.

— Erizo, no me puedo enojar contigo al contrario te agradezco cuidar de mi pequeño pero solo quiero saber por qué no entregaste la cartera de Oscar en cuanto lo viste— Pregunto curiosa.

Con un poco más de confianza Erizo le explicó su miedo irracional al ver una cantidad tan grande de dinero que portaba Oscar.

— no exageres ni que tuviera tanto a la mano — Susie se reía de tan infantil miedo.