Una cosa es clara en las comunidades pequeñas, los chismes vuelan y en la isla no era la excepción, sobre todo cuando el hijo de una de las brujas más poderosas de la isla había desaparecido y cuando regresó literalmente no fue el mismo.
En la escuela Oscar estaba malhumorado, un chico que por lo general era muy alegre con todo mundo se la pasaba garabateando en un cuaderno, y era una situación difícil de entender, por un momento se le veía feliz, en el otro triste y algunas veces con cara maliciosa, por el bien de su integridad física y emocional el profesor decidió no molestarlo y sus compañeros lo evitarían al menos unos cuantos días.
Después de la escuela era común que saliera a jugar con sus amigos los monstruos pero esa semana solo salía a caminar solo, algunos pensarán que se la pasaba hablando solo o eso aseguran los que de reojo terminaban mirándolo por los senderos.
Claro que de vez en cuando se le veía con ese cuaderno haciendo garabatos, se concentraba tanto en este que a veces ni notaba cuando alguien más lo saludaba.
Para la vista de algunos monstruos fue raro verlo solo en el bosque y más recolectando hierbas y hongos algunos de ellos bien conocidos por sus venenos.
Uno de los compañeros de Oscar que era un joven elfo un día lo miro preparando brebajes en una olla a la mitad del bosque agregaba hongos de diferente índole y tenía una expresión de miedo, y como era de esperarse los rumores se esparcieron tan rápido que el mismo día Alice y Betsy estaban tratando de convencer a Susie que Oscar no se encontraba bien.
Para sorpresa de ambas Susie simplemente las ignoraba, o la encontraban leyendo algún libro o el mismo diario local, y su única respuesta "Oscar está bien", eso no dejaba demasiado conformes a ambas brujas quienes al tratar de hablar con Oscar se portaba como siempre, solo a estado un poco más enfocado en algo los últimos días.
Susie no era la excepción tenía unas cuantas salidas diarias y se la pasaba en demasiadas reuniones con sus amigos los pequeños alíen, tanto secretismo término bastando a este par.
— Tenemos que hablar — Expresó Alice muy enérgica — Qué secreto nos estas ocultando, es que acaso ya no somos amigas o nos vas a abandonar — Alice sobre exageraba, pero hablaba con honestidad.
Esto tomó a Susie por sorpresa, esperaba una reacción pero no tan exagerada, bien tendría que confesar.
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Después que Oscar regresó a la Isla.
Era muy temprano, justo antes que saliera el sol en la isla, Susie y Oscar visitaron el panteón que estaba en el borde de la isla.
— Justo aquí están enterrados— Susie le mostró a Oscar una tumba simple pero arreglada con flores naturales y una pequeña capa de pasto — quieres que te deje solo con ellos un momento — Oscar se aferró a su brazo dándole a entender que la necesitaba a su lado, Susie abrazo a su pequeño quien solo se quedo mirando la foto que había traído de lo que fue su vieja casa.
Así duraron hasta que el sol se comenzó asomar por el horizonte.
— Mama, me vas a castigar? — Preguntó Oscar preocupado.
— Sabes que si, pero por ahora puede esperar el castigo— Susie sabía por el estrés emocional que atravesaba Oscar y a pesar de las ganas que tenía de castigarlo sin piedad tuvo que contenerse.
— Pero por qué te escapaste — Susie seguía abrazando por la espalda a Oscar.
— No me escape, solo salí a explorar— Oscar comenzó a relatar toda su travesía y como es que fue vilmente traicionado.
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El pequeño alquimista
FantasyUn pequeño con un gran poder . . . Una bruja que lo cuidara de mala gana y una chica que le arrebataron todo