50. Rayo de luz en la oscuridad

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Tyler Durand

Era de noche, el reloj marcaba las once y cinco, la única luz que tenía mi habitación vacía era la de la pantalla de mi celular para verificar la hora. No tenía ánimos de nada, solo esperaba a que se hiciera la media noche para irnos.

En eso el viento que entraba por la ventana trajo una hoja de papel que se estrelló con mi rostro, la tomé y aquella hoja tenía el dibujo de dos cuadrados azules cruzados y tenía escrito "Ritual de alteración de mentes de mortales". Yo conocía ese tipo de papel amarillento, fino y antiguo, eran las hojas de Karen.

Miré a aquel libro que permanecía como si nada en el suelo.

- ¿Qué es esto? - le pregunté.

Tyler lo he estado considerando mucho y puedo hacer una excepción por esta vez.

- ¿Este es uno de esos hechizos avanzados para los que aún no estoy listo?

Así es, entonces quiero que estés al tanto de la responsabilidad que trae consigo. Con este ritual tendrás el poder de controlar la mente de cualquier mortal, en este caso borrarás de la mente de Villa Alta que están muertos, pero debes tener en cuenta que desde ahora podrás controlar cualquier mente a tu antojo, y si no lo sabes usar puede ser un gran caos. ¿Lo harás?

De todo lo que dijo Karen solo entendí "Puedes quedarte junto a Samanta con este hechizo", sobre lo demás solo pensé usarlo en esta ocasión, de ahí olvidaría tener esa habilidad, igual no creo volver a necesitarla.

-Sí, ¿Qué tengo que hacer?

Karen abrió sus páginas en una sección desconocida, las páginas eran negras y tenía en el centro una calavera de fuego azul.

Pisa la calavera.

Respiré profundo y apenas mi dedo rozó la calavera, una fuerza me tiró hacia atrás y un enorme rayo de luz también azul invadió la habitación que tuve que cerrar los ojos para no incinerarme. Cuando la luz disipó me acerqué a Karen y en sus páginas leí los pasos para realizar el ritual.

Miré la pantalla de mi celular nuevamente, once y cuarto, me quedaba poco tiempo. Chasqueé los dedos y fui al lugar con la persona que me podía apoyar en esto.

Aparecí en la habitación de Samanta, ella ya estaba dormida, la miré y sonreí, ¿Cómo era posible que alguien se viera tan linda hasta durmiendo? Y era casi imposible, pues dormía en una posición extraña, roncaba y babeaba.

Me acerqué lentamente a ella, aparté unos cuantos cabellos de su rostro y moví un tanto su hombro- Samanta- susurré.

En ese momento Samanta gritó y me lanzó una bofetada horriblemente fuerte.

- ¡Hey! - le reclamé sosteniendo mi mejilla- ¿Crees que no he recibido suficientes cachetadas?

- ¿Qué haces aquí a esta hora? - preguntó aún con cara de miedo y voz chillona.

-Te necesito, tal vez descubrí la forma de quedarme en Villa Alta.

- ¿Cómo así?

-Ven conmigo- le dije ofreciendo mi mano.

- ¿No volveremos al Más Allá, cierto? - dijo con la duda en su rostro.

-No, solo confía en mí y ven, Orquídea Negra.

Ella con desconfianza tomó mi mano y segundos más tarde aparecimos en el parque. Tomé a Karen y leí el hechizo.

Ingredientes:

-Ocho velones de funeral (Puede crearlos usted mismo con el hechizo "Luz de vela")

-Tiza mágica especial para rituales (Esta se encuentra en su dedo solo invóquela pronunciando su nombre)

Una Familia fuera de lo común [Durand #1] ✔ ¡En físico Muy Pronto!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora