T W E N T Y T H R E E

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—¡Auroncito, mira esto! —. El castaño de ojos color zafiro subió corriendo la colina. Parecía una niño pequeño en busca de su padre para enseñarle alguna hazaña. Su mejor amigo y pareja se encontraba  jugando con el cerdo mascota del primer mencionado.

—¿Que pasa, mi niño? —dejó lo que hacia para acercarse a ver lo que lo tenía tan emocionado. Sonrió de lado al ver un gran libro entre sus manos, de pasta dorada y gastada que lo hacia parecer mas viejo de lo que seguramente era. —¿Otro libro de astronomía romántica? —Bromea haciendo referencia a su ultima noche de pasión, en donde Luzu lo sedujo con una linda historia de las estrellas. Con una mano lo toma de la cintura para acercarlo y con la otra entrelaza sus dedos con los contrarios. Para después murmurar en su oído coquetamente: —Si es 'eso' lo que quieres, solo pidelo.

El rostro del mayor se cubre de color  carmín al recordar esa noche, había sido genial y placentero, pues era la primera vez que tenia relaciones con su pareja, pero al mismo tiempo era vergonzoso. Suelta una risa nerviosa y lo empuja levemente.

—Me lo dio Merlón, dice que ya que me  postule a la alcaldía sería bueno que estudie la historia de Karmaland y sus posibles futuros. —. Escuchó un ligero: "ouh" de parte de su pareja al inició, pero a medida que explico lo demás recupero en entusiasmo.

—¿Historia?... Este pueblo aún es joven para tener una historia.

Una sonrisa triste paso al rostro de Luzu: —Somos considerados ladrones;  Karmaland creció rápidamente después de la guerra. Lo que dio paso a que pueblos vecinos creyeran que nuestros avances eran deshonestos y no propios. Cuando era pequeño aun nos invadían intentando conquistar pero tenenos algo que ellos no —esta vez era una sonrisa de orgullo fue quien adornaba su rostro —fe, en los dioses y el poder que nos prestan.

Esa tarde comprendió que Karmaland es mucho, mucha mas de lo que parece; su riqueza se creó a base del trabajo en equipo, lo que dio paso a un ambiente sano en la sociedad. Los niños pequeños veían todo eso y serian aun mejores personas; Karmaland nunca perecería.

Bajo la sombra de aquel árbol fue que pasaron el día; Luzu leyendo el libro y respondiendo las preguntas que el azabache formulaba, Auron escuchaba atentamente cada palabra que salía de la boca del castaño, de alguna manera cada expresión que hacia su pareja lograba hacerlo cada vez mas feliz. En ningún momento notaron que el sol comenzó a esconderse y mucho menos que el clima comenzaba a estar frío.

—«Dos almas destinadas a provocar el caos. Traición e incomprensión son los causantes. Un par de enamorados que están mejor solos que acompañados». —Leyó en voz alta el de mayor edad, quedó callado unos segundos procesando la información.

—¿Dos almas enamoradas destinadas a estar separadas? —divagó Auron, sin pensar mucho en que hablaba en voz alta. Es un futuro posible y si pasaba; Karmaland estaría en caos, no quiere eso para su amado pueblo, definitivamente tiene que hacer algo, pero ¿Que?... Hay muchas parejas en la aldea, no puede ser cualquiera. Debería ser alguien que sea parte del pilar de Karmaland; ¿Alguna de las parejas entre los héroes?, ¿Vegetta y Rubius? No, viven juntos y están comprometidos, además a pesar de los caprichos de rubio teñido tienen una relación estable. ¿Mangel y Lolito? Existe una posibilidad, son solo un par jóvenes que están en: "lo que pase después", quizá romperían y el pelirrojo tendría una recaída. También escucho que hay un pequeño lío entre Fargan, Willy y Alexby, aunque resultaba indescifrable, ¿Que habrá hecho el de máscara de búho para que el albino y el policía trataran de conquistarlos? Ni siquiera era muy guapo. Y si... ¿Se refería a Luzu y el?. Descartó la idea tan pronto llegó a su mente, no tendría sentido, de verdad sería una metida de pata muy grande para que Luzu se enfadara con el.

—¿Te imaginas... Encontrar a tu destinado y que su amor cause destrucción? —su pregunta quedo en el aire y Auron no se sentía capaz de responderle después de su ultimo pensamiento.

En toda su vida nunca se sintió tan tonto como ahora; su rostro estaba pálido y jura que tiene una expresión muy negativa, por que todos le observan como si le dieron fecha de su muerte. Se deja perder un poco el equilibrio, provocado por la noticia tirada de golpe, el ya sabia eso, sin embargo, todo recién encajaba; el es la traición y Luzu la incomprensión, son las almas que causarán caos. 

Se reincorpora y busca desesperadamente una solución, pero nada llegaba a su cabeza y solo estaba divagando en pedirle perdón a Luzu de rodillas y si es necesario implorar porque Karmaland no sufra las consecuencias de su decisión.

—¿Y los dioses? Ellos podrían explicar Luzu que los dioses oscuros solo lo están usando —la idea sale de su boca mucho antes que termine de procesarlo.

Vegetta lo considera, seguidamente niega con la cabeza. —Somos los héroes, Auron. Si a la primera que no podemos resolver de inmediato, entonces no... —sus palabras quedaron en el aire, como si pronunciarlo fuera difícil.

—Entonces no son dignos —completa Merlón. Los labios de ambos jóvenes se marcan en una linea recta, por la impotencia y frustración que los invaden por igual.

—El juicio del joven Luzu puede ayudar; si le culpan de sus crímenes, lo podrían retener en prisión al menos por un tiempo, mientras encuentran una solución a todo —fue Brett quien compartió su idea.

Nuevamente Vegetta lo considera y esta vez asiente con la cabeza. —Si, de echó es un muy buen plan. Luzu tiene las demandas suficientes para un par de meses dentro de prisión.

Agradecieron en voz alta al mas joven por su idea. Afinaron un par de detalles y se acordó que el alcalde -Lolito- y su mano derecha -Auron- redactarían esta misma tarde la invitación al juicio para el culpable y la o las víctimas. Merlón pidió amablemente al menor que cuidara bien de su tutor y se diera la tarea de investigar de su maldición, el joven acepto gustoso con la promesa de ir le a visitar tan pronto tenga un avance.

Minutos después se retiraron, no sin antes agradecer a Brett por su hospitalidad y Auron por recibirlos, también se disculparon por llegar de imprevisto.

Cuando se quedan solos, el mayor libera un suspiro. Apenas es Lunes y ya tiene la semana completamente ocupada entre pacientes, asuntos de la alcaldía, el juicio de Luzu y sus responsabilidades como tutor de Brett.

『ᴘʟᴀʏ ꜰᴀʟꜱᴇ』ᴋᴀʀᴍᴀʟᴀɴᴅ/ʟᴜᴢᴜᴘʟᴀʏDonde viven las historias. Descúbrelo ahora