F O U R

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Fue cuestión de horas para que todos los héroes de Karmaland y amigos de Luzu estuvieran en busca del pequeño cerdo-mascota. Gracias a la idea de Willy decidieron repartirse tareas para que todo fuera mas productivo y hací lo hicieron: Vegetta junto con Auron pegaron carteles en el pueblo mientras Luzu preguntaba a los habitantes si lo habían visto, Alex, Mangel y Lolito buscaban por los alrededores y un poco mas alejado del pueblo y los tres hermanos oscuros se fueron juntos a la misma tareas, aunque no era mas que una actuación.

—¿En donde lo dejaron?—. Preguntó con cierta molestia el albino.

—En la guarida... ¿En donde mas estaría? —. Respondió con obviedad el de máscara de Búho.

—¿Como pensaron que seria buena idea? —. La molesta voz del líder se escucho mientras detuvo paso y acarició el puente de su nariz intentando calmarse.

—Solo se nos ocurrió y lo hicimos... No es para tanto —. Esta vez el que habló fue el rubio teñido, con una nerviosa sonrisa adornando su rostro.

—¿¡No es para tanto!?... Oh claro —. Se acerco de manera imponente a su subordinado. —No importa poner en riesgo la hermandad, ni nuestras identidades porque «no es para tanto» —. Frunció el ceño mientras le tomaba de la camisa, parecía que estaba a punto de golpearle, pero no, su auto control era mas grande, sus puños apretados en un intento de calmarse lo conformaban.

—Wi-Willy, tío tranquilo.

Fargan nervioso por la actitud de ambos se interpuso.

—Venga tranquilos... El cerdo esta en un la guarida... Es imposible que Luzu o alguien mas le encuentre, además... —. Una sonrisita ladina llena de malicia se asomo por sus labios. —Siempre podemos aprovechar la situación.

Solo eso basto para que una sonrisa idéntica se formara en el rostro de  el líder de la hermandad.

Planearon todo lo suficientemente bien para que nadie sospechara pero para que lo encontraran: El primer paso ya estaba efectuado, secuestrar a Manolo y dejar una amenaza a Luzu.

El paso dos era aprovechar la situación;  en un par de días irían a la  casa del dueño del cerdo y dejarían un lindo mensaje.

—Venga Rubius apresurate — grito en un susurro el de mascara de búho.

Ambos chicos intentaban esquivar todas las torretas que Luzu tenia en su casa, pero parecía ser casi imposible, el día que secuestraron a Manolo estaban apagadas pero ahora encendidas parecía que no existía lugar alguno para llegar a poner los carteles o para huir despavoridos.

—¡Hasta aquí!.

El teñido ya harto de su poco avance tomo a su compañero de la muñeca y lo jalo hasta estar escondidos tras el establo en donde eran invisibles para las torretas. Con un poco de madera hizo una mesa de creación, traía consigo diamantes y un poco mas de madera lo suficiente para hacer un escudó, se le complicó un poco pero cuando tuvo listos las cosas en su respectivo lugar los dioses hicieron lo suyo y las piezas sueltas se transformaron en un lindo y fuerte escudo de diamante.

Avanzaron de a poco; Rubius sostenía el escudo y protegía a Fargan, las torretas seguían disparando pero sus balas se estampaban contra el escudo, llegaron por fin con un par de heridas pero nada grave. De inmediato con velocidad y cierta torpeza el que tenia las manos desocupadas escribió en a carteles de madera el lindo y amable mensaje.

—Ya esta... vámonos —aviso en cuanto término de clavar el ultimo cartel.

De la misma manera en la que entraron, salieron y se escindieron entre los arbustos. Por ordenes de el líder tenían que esperar hasta ver que Luzu leyera los carteles y saber cual era su reacción.

Poco tiempo después se escucharon pasos y la voz de Luzu maldiciendo en ingles, se reincorporaron en su lugar y  prestaron atención a lo que hacia y decía.

El castaño vio los carteles y los leyó cuidadosamente, su boca se abrió en una gran «o» y apretó sus puños para controlar la furia creciente.

«3 bloques de diamante si quieres recuperar tu cerdo». Decía el primer cartel.

«Aquí una prueba de que lo tenemos ». A su lado un cofre que dentro tenía un pedazo de carne de cerdo y una foto de Manolo amarrado con una rienda, junto con un libro que tenia todos los detalles del secuestro.

—Paso dos terminado.

Ambos chicos pertenecientes a la hermandad oscura chocaron sus manos mientras bajo su máscara una sonrisita ladina llena de malicia adorno su rostro.

Y así después de dos días el castaño solo se dirigió al molino, justo como lo especificaron, los bloques iban en su mochila junto con su espada y su arco, si era necesario no duraría en usarlos.

Caminaba con firmeza, cierta aura oscura le envolvía de tan solo verlo y el ligero color rojizo en sus ojos no ayudaba.

Llego al molino y suspiro tratando de calmarse, no sirvió de mucho, seguía ansioso por ver a lindo cerdito que tanto amaba.

Entró al molino, en el centro los tres integrantes de la hermandad oscura estaban ahí con sus trajes puestos.

—Es un gusto verte Luzu.

To be continued...

∆★ ••••• ★∆

Por alguna razón la inspiración me acompaña desde hace días. UwU
Jsjsjsjs

En este fanfic la hermandad oscura es muy importante, ya lo leerán.

Esperó que les haya gustado este capítulo, si fue así no olviden dejar su voto, recuerden que es un gran apoyo y una manera de decir que les gusta. :3
Aun solo tengo un voto pero seguiré hasta que unas cuantas personitas mas les guste esto. :D

Nadie me respondió mi nota anterior ;-; así que no se si es buena idea pero ya tengo varios one-shots hechos XD
Probablemente la empiece a publicar por inicios de enero o cuando Play False avance  más.
¡Gracias por leer, que tengan un lindo día y nos leemos la próxima!.

-Sunshine

『ᴘʟᴀʏ ꜰᴀʟꜱᴇ』ᴋᴀʀᴍᴀʟᴀɴᴅ/ʟᴜᴢᴜᴘʟᴀʏDonde viven las historias. Descúbrelo ahora