En un oscuro rincón de la historia mágica yace un secreto profundo, uno apenas susurrado entre las sombras más densas. La hija de Lord Voldemort, un ser nacido de los experimentos más oscuros, emerge como un eco misterioso en los pasillos del tiempo...
Nota: Lo que esté escrito «así» es en lengua parsel.
17 de diciembre:
Narra T/n:
Después de que me dieran de alta en la enfermería fui a decirle a Potter lo que escuché de la cámara y de Dobby, hoy estábamos en un club de duelo.
- ¿Quién creen que vaya a dirigir el club?- preguntó Mattheo.
- Talvez Flitwick o Snape- dijo Daphne.
- Ni menciones a Snape que T/n se emociona- dijo Draco divertido.
- Cállate rubio mal teñido- dije y me miró molesto- Si dejas de joder tanto, te dejaré de joder tanto- luego el profesor Lockhart subió a una mesa.
- ¡Acérquense!¡Acérquense todos!¡¿Todo el mundo me ve?!¡¿Todos me escuchan bien?!- dijo caminando por la mesa dirigiéndose hacia mi.
- No pendejo, somos ciegos y sordos- dije en voz baja y mis amigos retuvieron risas.
- Excelente- dijo dando vuelta sobre su eje- Dados los sucesos penosos que han ocurrido, el profesor Dumbledore me ha permitido crear este pequeño club de duelo y prepararlos bien en caso de que necesiten defenderse a sí mismos como yo lo he hecho innumerables veces, para más detalles consulten mis libros- rió, se quitó la capa y la lanzó hacia mi, yo con falso gusto la atrapé, Granger se acercó a mi.
- Hola T/n- dijo la chica.
- Hola Hermione- dije- Toma- le tendí la capa de Lockhart.
- ¿Me llamaste por mi nombre y me estás dando la capa de mi héroe?- preguntó con los ojos muy abiertos, yo asentí y tomó la capa- Gracias- luego se fue con sus amigos.
- Vaya, jamás pensé que la llamarías por su nombre- dijo Astoria.
- Siempre espera lo inesperado- dije devolviendo mi atención a Lockhart.
- Les presento a mi asistente, el profesor Snape- dijo el rubio mirando hacia una parte de la mesa, yo me asomé rápido y vi a Severus- El dice que sabe un poco sobre el arte de batirse.
- T/n, algo me dice que estás loca por Snape- dijo Daphne.
- Cállese a la verga- dije sin despegar mi vista del pelinegro- ¡Snape!- lo llamé- ¿No estaría bien que lo mataras?- el pelinegro negó- Bueno, entonces chínglatelo wey- el sonrió discretamente y asintió.
- Él acepto ayudarme con esta demostración, no quiero que ninguno se angustie, su querido profesor no será lastimado, no teman- sacó su varita y se posicionó frente a Sev, se saludaron e hicieron una reverencia, caminaron 10 pasos y voltearon poniéndose en guardia como si estuvieran portando espadas.
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- Se puso fuerte la cosa- dije mirando la expresión de Severus.
