Abril 1992:
Narra Potter:
Quirrell debía de ser más valiente de lo que habíamos pensado, en las semanas que siguieron se fue poniendo cada vez más delgado y pálido, pero no parecía que su voluntad hubiera cedido, le habíamos dicho a T/n que Snape le estaba mintiendo y le dijimos lo que sabíamos, hasta la plática que tuvo con Quirrell y de Corvus, pero ella no nos creyó nada a excepción de esa persona.
Cada vez que pasábamos por el pasillo del tercer piso, Ron, Hermione y yo apoyábamos las orejas contra la puerta, para ver si Fluffy estaba gruñendo, allí dentro, Snape seguía con su habitual mal carácter, lo que seguramente significaba que la Piedra estaba a salvo, cada vez que me cruzaba con Quirrell, le dirigía una sonrisa para darle ánimo, y Ron les decía a todos que no se rieran del tartamudeo del profesor.
Hermione, sin embargo, tenía en su mente otras cosas, además de la Piedra Filosofal, había comenzado a hacer horarios para repasar y a subrayar con diferentes colores sus apuntes, a Ron y a mi eso no nos habría importado, pero nos fastidiaba todo el tiempo para que hicieramos lo mismo.
- Hermione, faltan siglos para los exámenes.
- Diez semanas- replicó Hermione- Eso no son siglos, es un segundo para Nicolás Flamel.
- Pero nosotros no tenemos seiscientos años- le recordó Ron- De todos modos, ¿para qué repasas si ya te lo sabes todo?
- ¿Qué para qué estoy repasando? ¿Estás loco? ¿Te has dado cuenta de que tenemos que pasar estos exámenes para entrar en segundo año? Son muy importantes, tendría que haber empezado a estudiar hace un mes, no sé lo que me pasó...
Pero desgraciadamente, los profesores parecían pensar lo mismo que Hermione, nos dieron tantos deberes que las vacaciones de Pascua no resultaron tan divertidas como las de Navidad, era difícil relajarse con Hermione al lado, recitando los doce usos de la sangre de dragón o practicando movimientos con la varita, quejándose y bostezando, nosotros pasábamos la mayor parte de nuestro tiempo libre en la biblioteca con ella, tratando de hacer todo el trabajo suplementario.
- Nunca podré acordarme de esto- estalló Ron una tarde, arrojando la pluma y mirando por la ventana de la biblioteca con nostalgia, era realmente el primer día bueno desde hacía meses. El cielo era claro, y las nomeolvides azules y el aire anunciaban el verano.
Estaba buscando «díctamo» en Mil hierbas mágicas y hongos no levanté la cabeza hasta que oí que Ron decía:
- ¡Hagrid! ¿Qué estás haciendo en la biblioteca?- Hagrid apareció con aire desmañado, escondiendo algo detrás de la espalda, parecía muy fuera de lugar; con su abrigo de piel de topo.
- Estaba mirando- dijo con una voz evasiva que nos llamó la atención- ¿Y ustedes qué hacen?- De pronto pareció sospechar algo- No estarán buscando todavía a Nicolás Flamel ¿no?
- Oh, lo encontramos hace siglos- dijo Ron con aire grandilocuente- Y también sabemos lo que custodia el perro, es la Piedra Fi...
- ¡¡Shhh!!- Hagrid miró alrededor para ver si alguien los escuchaba- No pueden ir por ahí diciéndolo a gritos ¿Qué les pasa?
- En realidad, hay unas pocas cosas que queremos preguntarte- dije- sobre qué cosas más custodian la Piedra, además de Fluffy...
- ¡SHHHH!- dijo Hagrid otra vez- Miren, vengan a verme más tarde, no les prometo que les vaya a decir algo, pero no anden por ahí hablando, los alumnos no deben saber nada, van a pensar que yo os lo he contado...
- Te vemos más tarde, entonces- dije, Hagrid se escabulló.
- ¿Qué escondía detrás de la espalda?- dijo Hermione con aire pensativo.
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𝕷𝖚𝖓𝖆 𝖉𝖊 𝕾𝖆𝖓𝖌𝖗𝖊 // 𝕾𝖊𝖛𝖊𝖗𝖚𝖘 𝕾𝖓𝖆𝖕𝖊
FanfictionEn un oscuro rincón de la historia mágica yace un secreto profundo, uno apenas susurrado entre las sombras más densas. La hija de Lord Voldemort, un ser nacido de los experimentos más oscuros, emerge como un eco misterioso en los pasillos del tiempo...