Las cosas se habían enfriado bastante.
Natsume no había vuelto a pisar la residencia, desde su charla con Subaru, pues el trabajo se lo impedía. Tampoco habías tenido mas roces con ninguno de los hermanos. Las prácticas con Fuuto se volvieron pan de cada día, junto con salir a correr con Subaru y llevar a Yuusuke, Iori y Ema a la escuela.
Habían tenido tiempo de ir a ver el estado de la casa y Ukyo, comenzó con todo el papeleo legal, por lo que estabas bien asesorada. Y en cuanto a lo demás, vivías pegada a Ema cuanto fuera posible.
Era mitad de semana, en horario laboral y también escolar. No había casi nadie en la casa, salvo por algún que otro Asahina. Estabas bastante aburrida, por lo que quisiste ir a echarte una siesta pero justo en ese momento entró una llamada por parte de Masaomi. Se habían enviado mensajes luego de que se dieran sus números, pero nada mas allá de avisar sobre cosas importantes, pero esta era la primera vez que llamaba.
— Es bueno encontrarte.
— ¿Ocurrió algo, Masaomi-san?— te preocupaste ante aquella llamada tan inesperada.
— Llevo rato intentando contactar a Ukyo para avisarle que tomaré el turno de la noche también. ¿Podrías avisarle en cuanto lo veas?— la voz del hombre era seria, parecía que estaba realmente ocupado.
— Entendido, yo se lo diré. Y no te exijas demasiado, Masaomi-san— algo preocupada por el horario del hombre intentaste darle algo de contención a lo que Masaomi solo pudo sonreír.
— Gracias por preocuparte. Creo que ya recuperé mis ánimos— sonreíste y se despidieron para que Masaomi pudiera seguir trabajando.
— No hay tiempo que perder Doctor, hay mucho trabajo— una de las enfermeras bajaba por las escaleras cargando un montón de documentos y fichas que todavía tenían que ser completadas. La mujer termina por pisar mal y estar a punto de caer desde la escalinata pero Masaomi alcanza a reaccionar y al atraparla, el impulso hace que al caer hacia atrás golpee su cabeza y caiga al suelo inconsciente.
Quisiste salir al jardín. Estuviste largo rato viendo las plantas y flores que había al rededor, cuando viste a Tsubaki ir hacia donde te encontrabas. Suspiraste, pues no querías mas problemas y te encaminaste hacia la puerta para perderle de vista.
Escuchaste que el peliblanco había dicho algo, pero no entendiste y decidiste ignorarlo y continuar caminando a tu habitación. Una vez que llegaste a la puerta Tsubaki te alcanzó.
—Te pedí que esperes— por su tono de voz y exaltación parecía que había corrido.
—Ah, volviste del trabajo— tu indiferencia fue irritante para el joven.
—Quería hablar de forma civilizada contigo, ¿podrías escucharme?
Tsubaki estaba serio, no parecía querer iniciar una pelea y por menos ganas que tuvieses de hablar con él, no podías negarte.
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¡No Caigas Por Esos Hermanos!
FanficEma tiene una amiga de la infancia, a la que considera su hermana. Pero está está trabajando fuera de la ciudad y hace ya un año no se ven. Pero, ¿que pasará cuando se entere que Ema se irá a vivir con sus números hermanastros? Su llegada a la resi...