Subaru llegó dentro de la residencia y por su mala cara más de un hermano preguntó por su estado.
— ¿No te estás sintiendo bien?— Masaomi llevó su mano a la frente del muchacho y este se removió. Subaru miró con preocupación a su hermano mayor y le contó sobre lo que estaba ocurriendo en el jardín.
— Ella... no quiso involucrarme, y me envió de vuelta, pero me preocupa...— dijo con frustración rascando su nuca.
Masaomi acarició el cabello del muchacho para darme ánimos y le sonrió.
— Iré a ver qué ella esté bien.Y así fue. Masaomi salió casi corriendo hacia el jardín y desde la distancia pudo ver aquella escena tan clara como el agua.
Natsume acarició tu mejilla y cerraste los ojos. Masaomi creyó que si intervenía solo iba a estorbar, pero al notar tu cuerpo tan tenso y tú respiración agitada despidió acercarse e intervenir.***
Salieron del jardín, Masaomi te guiaba por la residencia todavía del hombro y tú solo intentabas procesar la información que recibiste. Te sentías abrumada, tonta, un ser despreciable y egoísta. Y por una vez pudiste comprender el sentimiento de Tsubaki, ese repudio que él te demostraba, lo estabas sintiendo por ti misma en ese momento.
No supiste cuando llegaron, pero ahí estaban. Masaomi estaba acuclillado frente a ti y te tomaba de ambas mejillas. Mientras te repetía una y otra vez que respires con tranquilidad, que todo iba a estar bien. Tu espalda estaba apoyada en un costado de la cama y estabas hecha una bolita enfrente a aquel hombre preocupado.
Te encontraste a ti misma colapsando en el suelo de la habitación de aquel hombre y te sentiste muy pequeña estando frente a él.
Al darte cuenta de la situación en la que estabas comenzaste a jugar con tus manos y a evitar sus ojos. Pero el hombre volvió a hacer que estuvieras en calma.— Todo está bien, respira— te ayudó a respirar, inhalaron juntos y exhalaron repetidas veces— lo vez, todo va bien. Lo estás haciendo genial.
Lograste calmarte luego de eso. Masaomi intentó entonces ponerse de pie para ir a por un vaso de agua, pero sus piernas se habían adormecido al estar en la misma posición largo rato.
Rápidamente lo notaste e intentaste ayudarlo a ponerse de pie. Pero sus piernas no parecían pertenecerle y en un paso en falso cayó sobre la cama contigo debajo de él.Se quejó por el doloroso hormigueo pero aquello quedó olvidado al ver que te tenía bajo su cuerpo.
Sus ojos se encontraron con los tuyos y viste en ellos la sorpresa y la vergüenza por estar en esa situación.
Se apartó rápidamente y se sentó sobre la cama.
—...yo...lo siento mucho— se disculpó. Por algo que no fue su culpa. Lo viste masajear sus piernas adormiladas, y notaste que sus orejas estaban algo rojas.
Apretaste los labios y cerraste fuertemente los ojos. Cubriste tu rostro con tu antebrazo aún estando acostada y respiraste profundo, una vez, dos veces y tres.
Estabas sobrepasada. Si no era por causa de Tsubaki, era por Natsume,y ahora de a poco ¡se iban agregando más y más hermanos!— Siento que hayas tenido que mentir por mi...—te disculpaste casi al borde del llanto. Masaomi se percató de eso y rápidamente tomó tu brazo y descubrió tu rostro para verte. Sorprendida por su accionar te levantaste y él te soltó algo más apenado.
— Todo está bien— de todas las sonrisas que habías visto hasta ese momento, aquella fue la más forzada y falsa que Masaomi hizo. Te sentiste desconcertada y algo ansiosa por ello, pero creiste quemas de una razón tenía para sentirse incómodo contigo ahí.
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¡No Caigas Por Esos Hermanos!
FanfictionEma tiene una amiga de la infancia, a la que considera su hermana. Pero está está trabajando fuera de la ciudad y hace ya un año no se ven. Pero, ¿que pasará cuando se entere que Ema se irá a vivir con sus números hermanastros? Su llegada a la resi...