10. Mecánica automotriz

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Kirito y Alice no podían creer lo que veían. Su ridículo y usualmente intrascendente amigo Ryoutarou "Klein" Tsuboi había resultado ser aquél corredor famoso que le ganaba siempre a todo el mundo, incluídos a ellos dos, a quienes les acababa de ganar una pequeña fortuna. Él los miraba igual de sorprendido, aunque también con un poco de satisfacción.

—¿Y bien? —les preguntó luego de algunos instantes en los que ninguno dijo nada—. ¿Acaso hay algo que quieran explicar ustedes dos?

—¿Qué insinúas? —preguntó Kirito un poco nervioso y molesto, y luego dijo señalando a Alice—. Yo no tenía idea de que ella estaría aquí.

—Ni yo que estarían ustedes dos —les dijo Alice, quien se veía aún más molesta que Kirito, a quién le preguntó—. Creí que habías dicho que no sabías conducir. ¿Cuándo fue que aprendiste? ¿O nos has estado mintiendo todo este tiempo?

—Es una larga historia —respondió él—. ¿Qué hay de ti? ¿Tú conduces? ¿Y de dónde sacaste un auto?

—Eso, yo... —quiso responder Alice, al parecer sin saber cómo hacerlo—. También es una larga historia.

—Ustedes dos están llenos de sorpresas —les dijo Klein casi riendo, pero se detuvo al ver las miradas que ambos le lanzaron.

—¿Y tú? —le preguntó Kirito después a él—. ¿Qué es todo esto? ¿Tú eres Akai Inazuma? ¿Desde cuándo juegas ICO? No nos habías dicho nada.

—Oye —le respondió Klein, ya también molesto—, mejor no empieces a señalar quién no le dice las cosas a quién.

—¿En serio fuiste tú quién ganó la carrera? —le preguntaba Alice con incredulidad—. ¿Cómo fue que lo hiciste en un auto como ese? ¿Cuál es tu secreto? ¿Por qué es que conduces tan bien? ¿Acaso hiciste trampa?

—¿Qué pasa? —siguió respondiendo Klein—. ¿Acaso es tan difícil de creer que yo sencillamente sea mejor que ustedes en algo?

Ninguno de los dos le respondió, solo desviaron las miradas.

—Miren, ¿por qué no nos calmamos un poco? —les dijo entonces Klein deteniéndolos a ambos con las manos—. ¿Qué tal si vamos a un lugar un poco más tranquilo para poder... ?

—¡¡¡LA POLICÍA!!! —gritó de pronto alguien entre la multitud—. ¡¡¡TENEMOS QUE IRNOS TODOS DE AQUÍ!!!

Y al escuchar la señal, todo el mundo empezó a gritar y a correr por todos lados, dirigiéndose hacia sus autos para poder emprender la huida.

—¡Parece que tendremos que dejarlo para después! —les dijo Klein.

—¡Oye, espera un momento... ! —trató de detenerlo Kirito.

—¡Lo siento pero no puedo dejar que me arresten con tanto dinero encima o se lo llevarán todo! ¡Me largo de aquí y les sugiero que hagan lo mismo! ¡En este lado de la ciudad la policía siempre está buscando a quienes compiten en estas carreras!

Klein se fue antes de que pudieran detenerlo. En medio de la confusión Higa volvió a llamar a Alice a través de su dispositivo.

¡No dejes que te detengan o se llevarán el Audi! ¡Huye lo más rápido posible! ¡Escóndete y me reuniré contigo en cuanto pueda!

Lanzándole una última mirada furtiva a Kirito indicándole que no había terminado de hablar con él, Alice subió de nuevo a su auto y arrancó. Kirito también quiso correr hacia el suyo pero había demasiada gente en medio. Y de repente, justo cuando ya tenía su McLaren a la vista otra vez, un par de hombres lo tomaron por los brazos y comenzaron a arrastrarlo en una dirección diferente.

Sword Art Online: Drive-By Ridin'Donde viven las historias. Descúbrelo ahora