Fear Street Erotic One Shots🔪🔥

🔥Deena.🔥

ACLARACIÓN: Este One Shot será narrado por Deena.

Íbamos por la segunda película de la maratón de terror cuando oímos la puerta de entrada sonar, tanto Sam como yo observamos curiosas y nos encontramos con su hermana menor y un chico al cual no conocía.

— Oh, hola Sam, pensé que saldrían hoy.

Comentó la más joven. Observé las manos unidas de ambos y aquella extraña sensación de ya hace un tiempo me invadió, pero intenté ignorarla. Sam rió ante la obviedad de las intenciones de su hermana.

— Tranquila, nos quedamos a ver películas, pero no subiremos hasta dentro de un rato, así que el segundo piso es suyo.– Le guiñó un ojo y no pude evitar fruncir el ceño, ¿de verdad iba a permitir lo que estaba pensando? — Oh, Deena él es Harry, el novio de Jade.

— Es un gusto.

Habló el chico con amabilidad a lo que me obligué a formar una sonrisa.

— Igual.

Conteste secamente.

— Bien, estaremos... Arriba.

Sam asintió y volvió a sentarse sin más a mi lado mientras los otros dos se dirigían a las escaleras.

— ¡Usen protección!

Gritó mi novia entre ligeras carcajadas.

— ¡Samantha!

Se quejó la menor y pude imaginar su rostro totalmente sonrojado. A pesar de que traté de reír no pude, mi cabeza estaba en otra parte totalmente.

Desde hacía ya varias semanas algo había... Cambiado. Jade para mí siempre había sido la pequeña hermanita de Sam, totalmente intocable e imposible verla de cualquier forma que no fuese como a una hermana propia. Sin embargo, ahora estaba hecha toda una mujer y había comenzado a despertar una serie de sentimientos muy fuertes en mí. ¿Cuándo comencé a notarlo? Cuando en una pijamada jugando verdad o reto el pervertido de Simon me retó a besarla, y yo nunca pierdo un reto. Obvio en ese momento a Sam no le importó, pues solo era un juego. Pero ella ignoraba que por aquel juego nuestra relación probablemente pendía de un hilo.

Sentí a la castaña apoyar su cabeza en mi hombro y la culpa me invadió. Decidí dejar de lado todas esas idioteces e intentar centrarme en Sam, ella era mi novia y la amaba... ¿verdad?

...

Mis ojos se abrieron lentamente tratando de distinguir algo en la oscuridad de la habitación. Sentí al instante el ardor en mi garganta por lo seca que estaba, miré a mi lado y ví a Sam durmiendo plácidamente.

Lo más silenciosamente que pude me coloqué de pie y busqué mi blusa por el piso sin excito, por lo cual finalmente tomé el buzo de Sam y me lo coloqué junto con mis bragas. Salí de la habitación y bajé las escaleras sintiendo el frío del piso bajo mis pies.

— ¡Oh, Dios!– Exclamó Jade sobresaltada al verme entrar de repente en la cocina. — Casi me matas, Deena.

Reí levemente ante su susto y al igual que ella tomé un vaso y me serví agua.

— Lo lamento, pensé que no habría nadie, ¿no deberías estar durmiendo con tu noviecito?

Traté de que mi voz saliera lo más indiferente posible, aunque sabía que probablemente se me había notado desde kilómetros el sarcasmo.