43. Persistencia de la memoria

984 68 70
                                    

LENA

Dos meses más tarde...

Es increíble el poder que tiene el tiempo sobre nuestras vidas. Es el encargado de llevar y controlar nuestros días. Es poderoso, peligroso y a la vez muy caprichoso. Sabe cómo controlar sus horas para hacer que te pierdas y te enredes en sus manecillas. Quizá me atrevería a decir que es un poco malvado, pero me gusta.

Cuando las cosas van bien, este, pasa volando. Pasa casi tan rápido que no te da tiempo de disfrutar de todo lo bueno que sucede. Sin embargo, cuando las cosas no van tan bien, las horas y los minutos se hacen eternos. Parece que nunca pasa el tiempo y que nos vamos a quedar ahí estancados para siempre. Pero nada dura para siempre.

Pienso que el tiempo sabe perfectamente hacer uso de su poder, cuando el tiempo pasa rápido, es porque así tiene que ser. Y cuando el tiempo pasa lento quizás es porque todavía no estamos preparados para lo que nos viene. Al fin y al cabo, el tiempo siempre nos ayuda, nos cuida e intenta buscar lo mejor para nosotros. El tiempo todo lo cura.

Pero no todo en la vida son blancos y negros. También existen los puntos intermedios, puntos donde el tiempo se nos puede pasar rápido para unas cosas, y lento para otras. Estos dos meses son el claro ejemplo de ello.

Parece que fue ayer cuando estaba encima del escenario representando a mi país en Eurovisión. Pero han pasado tantas cosas desde entonces...

Llegamos a España y después de celebrar con nuestros seres queridos, todo lo que habíamos conseguido, fue cuando empezamos a darnos cuenta de que esto no era un juego.

La gente se había vuelto loca, no paraban de seguirnos, de apoyarnos, de buscarnos, de preocuparse por nosotros, de seguir el equipo tan bonito que formábamos. Las personas nos acechaban por las esquinas, a cada sitio que íbamos, por redes sociales... En todo momento contamos con un apoyo increíble, mi cabeza no era capaz de asimilar lo que habíamos conseguido.

Era increíble el apoyo y el amor que recibíamos. He de confesar que todas las chicas se volvieron locas con Tomás y con Jorge. Era casi imposible salir con ellos sin que alguna se tirase en sus brazos.

Me encantaba hacerme fotos con todo el mundo que me lo pedía, firmar autógrafos y devolver al máximo todas las muestras de cariño que recibíamos. El mundo nos había ayudado a llegar a donde estábamos y ahora nos tocaba a nosotros agradecerlo de la mejor manera posible.

Hicimos cientos de entrevistas al llegar a España, nos encantaba que nos pudieran conocer un poco mejor. Nos pasábamos todo el día dando vueltas de una ciudad a otra promocionándonos. Y sobre todo trabajando en la parte que más nos gustaba. La música y el espectáculo.

Decidimos sacar un videoclip de la canción con la que nos presentamos a Eurovisión. Lo dimos todo para conseguir el videoclip perfecto y fue todo un éxito. No parábamos de seguir aumentando seguidores cada día. Era increíble sentarte por la noche tranquilamente y leer todos los mensajes de amor que recibíamos.

Saqué un nuevo disco y nos fuimos de concierto por España para poder llegar a todo el mundo. Era una locura ver como las entradas se agotaban a los pocos minutos y teníamos que hacer más fechas en las mismas ciudades para que pudiera ir más gente.

Realmente nos iba genial como grupo, cada día más unidos y con una amistad más fuerte. Nos iba tan bien que por fin después de mucho tiempo deseándolo, todos pudimos hacer lo que llevábamos un tiempo esperando. Independizarnos.

Ahora nos lo podíamos permitir, así que cada uno nos compramos nuestra propia casa. Aquello supuso una de las mejores cosas, podíamos contar con la tranquilidad de tener nuestro hogar, contar con los beneficios de la independencia y eso sin contar con las fiestas. Hicimos una fiesta de inauguración en cada una de nuestras casas. 6 fiestas que fueron una auténtica locura y que dieron paso a nuevas aventuras.

𝕀ℕ𝕋ℝ𝔼ℂℂ𝕀𝔸𝕋𝔼 •Damiano David•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora