Capítulo 7

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Hola! Para los que no saben comencé una nueva novela llamada "Inevitable", acá les dejo el argumento!

"Mariana Espósito siempre fue la alumna perfecta, estudió Peridismo y el Traductorado de Inglés en simultáneo, se recibió a los 24 años siendo casi una alumna sobresaliente.
Siempre soñó con trabajar afuera, es por eso que emprendió vuelo hacia los Estados Unidos para probar suerte, puntualmente a Nueva York, ¿su mayor sueño? Ser la nueva cara que un canal de noticias busca.
Ahí, entre decorados, camerinos, luces, cámaras, noticias y música conocerá a Juan Pedro Lanzani, el director del canal que tiene mucha mala fama.
¿Él? Un seductor nato.
¿Ella? Una persona que solamente quiere hacer su trabajo.
Resistir a la tentación va a ser todo un desafío"

Espero que se pasen!
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Llegué a mi departamento y cuando abrí la puerta me llevé una sorpresa.
-Benja-lo miré a los ojos
Él se acercó para terminar abrazándome.
-¿Estas mejor? Traje sopa de calabaza-se apartó para mirarme nuevamente- se que me dijiste que no me querías ver pero me quedé preocupado
-Estoy.. Mejorando-mentí- lo mejor sería que duermas en tu casa hoy
-Pero podemos cenar juntos, ¡ey te extraño!-me agarró de las manos.
-Esta bien-asentí con la cabeza.
-¡Sos la mejor compañera de vida!-me besó en los labios, acto seguido me sonrió.
Me sentí mal por no estar pudiéndome conectar con el presente, con el momento, no tenía ganas de estar compartiendo un momento con Benjamín.
Cenamos y lo saludé besándole una de sus mejillas, cuando finalmente se fue recibí una llamada.
-Hola Lali-me sonrió Candela por la videollamada-¡seguro te sorprendí eh! Pasaba a invitarte a mi casa, viene Eugenia también, seríamos solo nosotras, ¡ahora! ¿Podes venir?
-¿Ahora?-me sorprendí, ella asintió con la cabeza-bueno.. Me cambio y voy, pasama la dirección
-¡Genial, nos vemos!-ella colgó la llamada y me puse a pensar que podía ponerme para estar a la altura de ellas, terminé encontrando algo arreglado pero sencillo.
Una vez en el auto manejé hasta el barrio de la casa de Candela y toqué el timbre sin saber que hacía exactamente ahí.
-¡Hola La!-me abrazó cálidamente, sí, como si fuéramos amigas de toda la vida-¡pasá!
Ella me hizo señas e ingresé al interior de su casa.
-¡Hola!-Eugenia se balanceó para también abrazarme- pedimos pizza, ¿cenaste ya?
-Sí.. Pero en un rato seguro tengo hambre de nuevo-les sonreí- no se que hago acá..-me agarró timidez.
-Estas acá para hablar de la vida con nosotras, como si fuéramos amigas desde siempre, tomando cerveza-Candela me pasó una botella- relax Lali, somos personas sencillas aunque no lo parezca
-Tienen esa vibra...-asentí con la cabeza, ellas me sonrieron.
-Me interesa saber quién sos exactamente, sos una admiradora de la carrera de Peter, y terminaste siendo algo así como su secretaria.. Seguro estas tocando el cielo con las manos-Eugenia me sonrió, me reí nerviosa.
-Sí... No puedo creerlo-asentí con la cabeza- igual, para sus ojos no lo admiro, no soy su máxima fan, solo soy una persona común y corriente
-Una persona común y corriente pero muy atractiva, ¿ya sacó su instinto depredador?-Candela elevó sus cejas y al notar mi cara se rió- cuidate de él, ese es nuestro consejo
-Igual.. Yo estoy muy lejos de eso, tengo novio, uno que es divino, amoroso, me quiere..-empecé a enumerar las virtudes de Benjamín, a medida de que pasaba el tiempo iba sintiéndome más culpable.
-Pero Peter es talentoso en lo suyo eh, como fan suyo seguro sabes que hay mujeres que terminaron sus relaciones por él-Eugenia me miró con seriedad-, como persona él es un encanto, buen tipo, pero en modo depredador no hay nada ni nadie que lo pare, por eso estas advertida de entrada-ella soltó un suspiro.
-¿Me citaron para advertirme acerca de él?-elevé mis cejas sorprendida.
-Entre otras cosas-Candela se rió- y para hacer noche de karaoke, ¡te toca a vos!-me dio un micrófono y se puso a buscar la pista de una canción-¡tu turno!
Me señalaron el televisor y terminé cantando una canción de la queen B, Beyoncé.
-No sos mala, ¿te dedicas a esto?-Eugenia se sorprendió.
-Hice comedia musical de chica, pero de cardura eh-me reí nerviosa- lo mío es el arte, las esculturas, pinturas
-Así que ese es tu verdadero trabajo...-Candela se sorprendió.
-Sí... Y me apasiona-asentí con la cabeza y les sonreí.
-Cuando hagas una exposición invitamos-Eugenia elevó sus cejas y me sonrió.
Tomé más cerveza y cantamos a los gritos varias canciones más, como no podía manejar por haber tomado bastante alcohol me quedé dormida en la casa de mi nueva amiga Candela.

Sonó mi alarma e instintivamente busqué mi celular con mis ojos cerrados en la mesa de luz, me extrañé al no encontrarlo, entonces me estiré nuevamente y me caí al suelo.
No estaba en mi casa y tenía resaca, solté un suspiro y vi que al lado mío dormía Candela, rápidamente apagué la alarma para no despertarla pero fue inútil, ella abrió sus ojos y se quedó mirándome.
-Buen día Lali-me saludó-¿desayunamos algo?
-Creo que tengo más nauseas que hambre..-me reí- hace mil años no terminaba en este estado
-Igual estuvo divertido-ella se rió y me sonrió-¿una tostada sola por lo menos comes?
Asentí con la cabeza aceptándolo, ella me preparó un té y desayunamos eso.
-Sos una persona copada-levanté mi mirada para mirarnos- jamás lo hubiese creído..
-Cosas que pasan, la mayoría de la gente especulan, pero todos somos seres humanos, sentimos, nos reímos, disfrutamos, todos pasamos por las mismas cosas-se encogió de hombros.
-Tendría.. Tendría que irme a ver a Peter-la miré ahora entrando en pánico- pero no llego a ir a mi casa, cambiarme y todo eso
-Ey tranquila, te presto ropa, te podes duchar acá-Candela me sonrió de manera descontracturada.
-¿Sí? ¡Gracias!-le di un abrazo, ella se rió.
-Al fondo de este pasillo esta mi baño, te dejo la ropa afuera-ella asintió con la cabeza.
Fui hasta el baño para darme una ducha, arreglarme algo el pelo, para estar bien, agarré la ropa de Candela y me reí, era un top blanco con unos jeans, yo no solía usar mucho estas cosas.
Una vez lista le agradecí y la abracé.
-Gracias por todo...
-¡Cuando quieras! ¡Sabe que estoy!-me guiñó un ojo y me reí.
Me subí finalmente a mi auto y manejé hasta lo de Peter, toqué el timbre de la puerta y él se asomo.
-¿Mariana?-se sorprendió al ver como iba vestida.
-Lali-volví a corregírselo- me lo prestó Candela, no voy por la vida así, siendo una estrella de la tele-me reí nerviosa, Peter se rió conmigo.
-No te queda mal.. Nada mal..-él hizo una caricia en mi cintura y levanté mi mirada, acto seguido él se atrevió e hizo lo mismo en mi cara.
-Mejor.. Mejor arrancamos recorriendo..-iba a seguir hablando pero él me interrumpió.
-Algún lugar que quiera conocer yo-elevó sus cejas mirándome y asentí con la cabeza.
-¿Me vas a decir donde queres ir?-me entró curiosidad.
-No.. Pienso manejar yo esta vez, busqué yo solito la dirección, mi objetivo es sorprenderte-me sonrió.
¿Él sorprenderme a mi?
Cuando ambos nos subimos al auto inevitablemente me puse nerviosa, ¿a donde iba a llevarme?
-¿Te conté que me gustan las sorpresas? Eso es algo que en ninguna revista se dice..-elevó sus cejas mirando al frente-espero que te guste como a mi
Asentí con la cabeza completamente intrigada.
-Siento que de vos se puede esperar cualquier cosa..-solté un suspiro.
-Haces bien.. Haces bien en creer eso-asintió con la cabeza.
Después de que estacionó el auto Peter Lanzani relamió sus labios y me sonrió.
-Vamos-me hizo señas para que saliera, le hice caso siguiendo sus pasos.
-Me trajiste al Tigre, al Puerto de Frutos, ¿vamos a pasear entre los locales?-elevé mis cejas mirándolo.
-No...-negó con la cabeza- vamos a navegar.. Te voy a enseñar como- él se rió al darse cuenta de mi cara- conmigo vas a estar sana y salva eh

Sin querer queriendoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora