30 Days with You | Bubbline ((+18)) [Completo]

[⚠️] 𝘋𝘪́𝘢 𝘘𝘶𝘪𝘯𝘤𝘦 | Slumber Party.

✎ᝰ ❛ Pijamada ❜ ♡

Fionna había hecho una pijamada. Bueno, en realidad era una salida de chicas por la tarde, que terminó en una pijamada de cinco personas.

ㅡLo siento, muchachitas. Realmente me gustaría quedarme, pero no puedo ㅡCake hizo un pucheroㅡ. Mis hijos me esperan en casa.

ㅡYo tampoco me puedo quedar ㅡGrumosa movió sus grumos en forma de negaciónㅡ. Tengo que tener mi sueño de súperbelleza esta noche, y dejé todo listo en casa.

ㅡOww ㅡdijo la rubia con un puchero, después de despedir a dos de sus amigasㅡ. Ustedes sí se van a quedar, ¿cierto?

ㅡEhh... ㅡMarceline pensó por unos segundosㅡ. Agh, está bien, me quedo. ¡Pero sólo porque te tengo lástima!

ㅡMarceline, no seas así ㅡla pelirosada le tiró una almohadaㅡ. Claro, nos quedaremos contigo.

ㅡ¡Genial! Nos divertiremos mucho, ¡se los prometo! ㅡchilló, dando saltitos contentos.

La promesa duró poco tiempo.

Después de unas botanas y unas latas de gaseosas, las tres se recostaron a hablar de la vida. Fionna había dicho que estar acostadas en la cama sería una mejor opción que estar encorvadas sobre ella, así que apagaron las luces y se recostaron.

La primera en dormirse había sido Fionna, en su cama.

Más abajo, en dos pequeños colchones, estaban Marcy y Bonnie.

ㅡSe durmió, ¿cierto? ㅡmurmuró la pelinegra.

ㅡSí, está dormida ㅡconfirmó la pelirosada, después de levantarse un poco para ver a su compañeraㅡ. Ya está babeando.

ㅡ¿Quieres que yo te haga babear a tí? ㅡle preguntó, acercándose lentamente.

ㅡNo sé de lo que estás hablando ㅡmurmuró la pelirosada, cubriéndose hasta la bocaㅡ. No te me acerques, Marcy. Sabes que Fionna no sabe acerca de nosotras y no quiero que se entere mientras... hacemos algo.

ㅡNo entiendo por qué aún no les dices nada ㅡmurmuró, arrastrándose hasta el borde de su "cama" y pasándose a los pies de Bonnieㅡ. Fio duerme cómo una roca, no se enterará.

ㅡNo estoy tan segura de eso ㅡsiguió murmurando.

Marceline pasó sus manos por su cintura, acariciando suavemente su cintura y los lados de su cuerpo. Con suavidad, besó sus labios. La pelinegra murmuró su nombre, mientras besaba sus mejillas. A Bonnie siempre le habían gustado los besos de Marceline, y ahora que era su novia, los amaba aún más.