Condición. ✔️

CAPÍTULO VEINTISIETE 🌼

Luego de la comida y de fregar, que nos ha tocado a mí y a mi hermana, nos sentamos a jugar algunos juegos de mesa con música de fondo. Rondas y rondas de juego en las que soy ganadora.

—¡Uno y sin cartas! ¡He ganado de nuevo, perdedores! ¿Dónde está mi premio?

—Amery, como las últimas cinco veces, no hay premio—comenta Suzy con cansancio y molestia.

—A la quinta vez que gano debería haber.

—No juego más—sentencia.

—Haces trampa.

—Que tú no sepas perder no es mi problema, Caracol—contesté sin mirarlo.

He evitado su mirada y su presencia toda la mañana y tarde. Cada vez que recuerdo sus palabras siento mi corazón a mil y es una sensación entre agradable y odiosa; desconocida.

—¿Jugamos a verdad o reto con la botella?—sugiere Trisha. Todos asienten de acuerdo y yo ruedo los ojos y me siento. ¿Qué tenemos? ¿Nueve años? Yo quería seguir ganando como he estado ganando al stop, y al monopolio y al uno—Yo empiezo—gira la botella y cae en Chad—¿Verdad o reto?

—Reto—contesta seguro.

—Te reto a besar a Amelia.

—¿Qué? No—hablan mis hermanos y Chad los mira nervioso, pero se levanta—Ni se te ocurra.

—Debe cumplirlo—digo con gracia. Él se acerca a Amelia y la besa rápidamente sintiendo el peligro de su alrededor, sonrío y mis hermanos se levantan, pero Trisha sostiene a Kim, yo a Dan y Moon a Hako.

—Bien, turno de Chad de girar la botella.

Bien, el juego ha ido así, Kendal verdad, Trevor reto, Diego verdad, Dan reto, Suzy reto, Amelia verdad y cuando me toca a mí:

—Reto—Amelia sonríe con malicia y es entonces cuando me arrepiento de lo que elegí.

—Te reto a besar a Ashton—la miro con seriedad antes de sonreír y levantarme.

Me acerco a Ashton, quien me mira atento y cauteloso, precavido ante mi siguiente movimiento. Coloco una mano en su mejilla mirándolo a los ojos y luego su boca recordando aquel día en la fiesta, y sin quererlo mi corazón empieza a palpitar más deprisa. Sí, quiero besarlo, pero no lo haré. Beso su mejilla y casi todos se quejan mientras que Ashton sonríe con gracia.

—Era un beso en la boca—se queja mi hermana

—Eso no vale—me encojo de hombros ante sus reclamos. Mis hermanos sonríen. Claro, a ellos les ha agradado.

—No especificaste. Lo siento por ti, hermana—cuando giro yo, la botella cae en Ashton y sonrío con malicia—¿Verdad o reto, Baboso Insoportable?

—Reto.

—Te reto a estar cinco minutos bajo la nieve en ropa interior.

—Si quieres verme desnudo solo dilo, no necesitas congelarme para eso—habla con ego y picardía; resoplo con fastidio.

—En ropa interior y una camiseta. Venga.

—¿Por qué me tenía que tocar ella?—se queja, levantándose.

—Suerte que has tenido.

—Lo dudo. ¿No puedes ser normal y retarme a tomar vinagre o qué sé yo?—me pregunta a la vez que se va quitando la ropa.

—¿Dónde está lo divertido en eso?—ojeo su cuerpo, y él, al notarlo, chasquea los dedos.

Cuando lo miro noto diversión y burla en su mirada. Veamos si continúa teniendo esa mirada cuando esté congelándose fuera. Él le dice algo a Amelia y Trisha y están asienten enseguida. Nos levantamos para acompañarlo hasta la puerta, Sidney está grabándolo mientras ríe. Ashton se acerca a mí mirándome con los ojos entrecerrados, sonríe después y, sin verlo venir, me levanta en su hombro.