T/n giró los ojos mientras buscaba algo interesante en aquella oficina. Llevaba una hora de mierda en aquel lugar y aún no sabía para que la habían llevado.
Solamente hablaban de lo que necesitaban los Fairchild, ella no tenía nada que ver.
—Una vez nos ayudamos mutuamente, para salvar a tu primo, te pido que está vez me ayudes... Son mis hijos los que están en peligro y no sabemos si toda la agencia vendrá por ellos... —pido Theresa.
T/n infló las mejillas con aburrimiento mientras giraba los ojos.
Al fondo de aquella oficina, Aidan se encontraba de brazos cruzados mientras la veía. No había otra cosa que llamara su atención.
—¿Qué necesitan? —miró a la rubia, Apolo estaba dispuesto a ayudar.
Por alguna razón se sentía culpable.
—¿Soldados? Su casa puede quedar bajo la seguridad del rey.
T/n tomó el mando de la pantalla que estaba en el lugar para empezar a cambiarle a distintos canales en busca de noticias sobre aquella camioneta, pero no encontraba nada.
—Este es el único lugar seguro, mi querido amigo peliteñido.
Aidan bajó la mirada para no reír. El humor de esta nueva versión de T/n era realmente pesado y era la prima vez que la escuchaban hablar después de una hora de haberla visto.
—Quieren matar a los gemelos porque yo maté al tío de... ¿Sus tíos...? —frunció el entrecejo mientras se levantaba del sillón donde estaba —como sea, no recuerdo —giró los ojos mientras hablaba del tema como si no le importase —el caso es... No sabemos dónde guardarlos para mantenerlos con vida.
Los aludidos la miraron mal.
—Podemos cuidarnos solos...—refutó Milie.
—Por supuesto que sí —dijo T/n con ironía, Aidan río bajo. El rubio lo miró mal —tanto así, que casi les cortan las manos...
—No creo que sea diferente a lo que haces tú... —la miró Marcus.
—Yo lo hago por diversión —admitió frente a los demás —No por venganza... ¿Notas la diferencia, Anakin?
—Entendí la referencia —todos miraron a Apolo—esque, se parece a Anakin de la guerra de las galaxias... Entendí.
T/n y Aidan sonrieron con sequedad.
—Genial.
En ese momento la puerta se abrió con un estrépito. Las miradas fueron a la rubia de ojos azules que entraba molesta. Aidan suspiró con pesadez.
—Irina. Pedí que nadie me molestara.
—Estoy harta de esperar. Llevo esperando una hora.
Los presentes se miraron los unos a los otros. T/n seguía viendo las noticias. Aidan la miró con irritabilidad.
—¿Qué quieres?
—¿Qué quiero? Hay una tipa paseándose por el castillo.
En ese momento T/n la miró.
—¿Estropeó tu vista al horizonte?
La mirada de la rubia fue inmediatamente a ella.
—¡¿Y tú que demonios haces aquí?!
Se voltearon a mirar los unos a los otros. Theresa encaró una ceja mirando a su hija adoptiva. Apolo las señaló.
—¿Se conocen?
T/n meneó los hombros quitándole importancia.
—No se quien sea esa...
La rubia estalló.
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Entregando la corona.
FanfictionDespués de la muerte de Número Cero, la vida del heredero al otro cambia drásticamente, no es capaz de controlar el impulso de sangre, terminando por aceptar que tiene una segunda personalidad que es psicópata. Apolo no puede con la culpa de recorda...