I.M -ZODIACO-

39|Idiota de alto nivel

Narra Tauro

Capricornio se fue tan pronto como llegó, tenía ciertas cosas que hacer, sabrá él qué, el silencio permaneció por un largo momento, su opinión era clara, la persona que escribió la sección sabía más que el resto sobre el asunto.

—¿Y bien?— preguntó Leo mirándome fijamente.

—Es un artículo de la sección que menciono— se lo entregué, no tardó en tomarlo y empezar a leer, era bastante corto, no superaba las diez lineas.

—"Hay algo lejos de nuestro entendimiento en este lugar", "lo que le paso a Anne Foster es un ejemplo repetitivo al que nadie parece prestarle realmente atención", "en mi opinión este no es el final, lejos del destino misterioso de Anne al que no vale la pena una respuesta, algo más interesante, serán más víctimas" ¿por qué no me da la sensación de que esta loca?— preguntó con el ceño fruncido un tanto dudosa.

—Bueno ciertamente hay algo aquí— suspiró Escorpio revolviéndose el cabello —¿ejemplo repetitivo? ¿Sigue hablando del futuro o...?—

—Hubo otras— completó Virgo, un escalofrío recorrió mi cuerpo.

—Bertier...— susurré trayendo nuevamente el nombre a la investigación.

—El fantasma que repite su error— Virgo se mantuvo pensativa —murió por el, ardillas muertas en un pupitre desgastado...—

—Anne cometió muchos errores en sus años aquí— respondí, en ese momento su cara en mi sueño desvaneciéndose pasó por mi memoria.

—Y el fantasma que me atravesó— agregó Escorpio lentamente.

—¿Víctimas de una misma persona?— preguntó Acuario en voz baja un poco preocupado por la situación.

—Existe algo lejos de nuestro entendimiento en este lugar— repitió Leo seria —es una posibilidad, la muerte de Anne no es el único misterio aquí—

—Hay mucho más que investigar que su paradero— afirmó Acuario dejando un pesado silencio.

[...]

Narra Virgo

Maldecía a Leo continuamente en mi cabeza mientras me esforzaba por cargar el pesado balde frente a mi , esto no era algo que le fuera a perdonar en un largo tiempo.

Gruñí recostandome en la pared a un lado tomando un descanso, aún me faltaban varios metros hasta el gimnasio, realmente dudaba de si mis brazos eran lo suficientemente resistentes, no me agradaba la idea de ser aplastada por el peso que cargaba.

Miré la hora, el tiempo parecía disminuir rápidamente, lamentaba el tener que acabar con tan corto descanso, sin embargo, cuando me preparaba para levantar nuevamente el cargamento ciertas risas y murmullos llegaron a mis oídos.

Desde que Leo y yo llegamos aquí los escuchaba semanalmente, aveces más ruidosos que otros días, no era como si le diésemos mayor importancia a lo que hablaban, era tal cual nos habían explicado las chicas, el nivel social importa y para algunos somos escoria, igualmente habían sido semanas ocupadas como para distraerse con tales cosas.

Agite mi cabeza de un lado a otro con la intención de seguir con mi camino, aunque algunas palabras no pudieron evitar llegar a mis oídos.

—Es realmente denigrante tener que estudiar lado a lado con este tipo de persona—

—Tienen la cara para actuar de esa forma, se creen la gran cosa—

—No les bastó con la función en los vestuarios, andan escalándole por los brazos—

Estaba realmente confundida en este momento, ¿qué tenía en la cabeza esta gente?, literalmente solo había pasado tranquilamente frente a ellas.

—Karina estaba furiosa tras el articulo de esa, todo lo que escribió, debería girarse a mirar a las amigas que tiene—

Nop, nunca lo entendería.

—Escuche que no es muy diferente de su amiga la becada, la única diferencia es la caridad que reci...—

Y las palabras que nunca hubiese imaginado me sorprendieron por completo haciéndome tropezar hacia adelante chocando directamente con alguien.

Miré hacia un lado del gran balde que no sé como seguía en mis manos enguantadas, reconocí rápidamente al idiota frente a mi, por lo visto se me hizo tarde o el se adelantó más de lo esperado.

—¿Qué crees que haces?— soltó en un tono bajo bastante enojado.

—Que te importa tarado—

—Deberías tener más cuidado por donde caminas en vez de estar al pendiente de conversaciones privadas —

—Hasta donde yo sé medio patio las esta escuchando, no son realmente muy discretas—

—Bueno no es un secreto tu situación caridad—

—Qué sabrás tu de eso— mi tono era serio, estaba molesta y mis manos apretaron con mayor fuerza el balde.

—Bueno enrealidad suena divertido por aquí, nos odias, pero tu vida consiste en aceptar el dinero lastimoso como si nada de aquellos que...—

Y en ese momento mi paciencia con el idiota se acabó, dejé el balde caer interrumpiendo sus palabras con el fuerte golpe, mis manos se dirigieron involuntariamente al balde, apenas la tapa se levantó el fétido olor invadió el ambiente, ya no sería como lo tenía pensado, no me importó hundir mis manos en la espesa sustancia.

Aries me miraba desconcertado cuando reuniendo una gran cantidad de la peste mis manos se alzaron hasta su cabeza bañándolo con ella, era poco decir sorpresa, la rabia invadió su mirada cuando comprendió lo que había ocurrido, realmente no estaba satisfecha únicamente con eso, no hasta verlo completamente empapado y él por supuesto estaba listo para seguir esta apestosa batalla.

[…]

Ignore la atención de los pocos que se habían atrevido a quedarse tras la llegada del maestro, ninguno menciono palabra o se dirigió mirada mientras caminábamos a la oficina con la cabeza en alto, sin embargo mi expresión no pudo evitar el cambio cuando mi mirada cayó sobre el par de conocidas cabezas, demasiado cercanas, sonrientes y para finalizar, compartiendo un tierno beso.