29|Jardin de Rosas

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Narra Tauro

El sol se había empezado a poner, llevaba una hora esperando la llegada de Virgo, con dos horas de diferencia entre el final de sus clases y las mías esperar era un tanto tedioso, se suponía que su clase terminaba una media hora atrás y aún así aquí estaba esperando que terminara de hacer yo que sé.

La tarde había sido bastante relajada «considerando el inicio de los exámenes no era raro», había hablado con Cancer en el almuerzo, a pesar de ser serio para su edad me sentía un tanto incomoda bajo su mirada, aunque la comida fue en su mayoría agradable, ahora había aceptado cierta invitación de su parte esperando que este no lo tomara como una cita.

Me había perdido en mis pensamientos cuando me sobresalté por una mano en mi hombro.

—Maldición Virgo ¿dónde demonios estabas?— se encogió de hombros divertida.

—No importa, luego les cuento, vamos por esos archivos— asentí no muy convencida empezando a caminar hacia la entrada del ala.

El camino por los pasillos fue silencioso cada una metida en sus propios asuntos hasta llegar a la habitación que buscábamos, nos dirigimos de inmediato a los archiveros, los expedientes de los estudiantes debían seguir ahí aunque no estaba segura de que el de Anne permaneciera entre ellos.

Miré a Virgo, ya había sacado un montón de papeles de una gaveta y los revisaba en uno de los viejos escritorios mientras jugaba con el anillo entre sus manos, dirigí mi atención a mi trabajo, no tardé en encontrar los del año de la investigación, tomé la carpeta que decía alumnado en la lateral, esto estaba siendo muy sencillo, la emoción me recorrió cuando llegué a una única hoja suelta al final del archivo, me quedé en blanco cuando reconocí la foto al lado del nombre...Anne Foster una hermosa chica, cabello rulo rubio y ojos cafés...

Narra Leo

Mis clases terminaron antes de lo esperado por lo que a media tarde ya me encontraba recorriendo los patios de la institución, Cancer me había ayudado con la supuesta ubicación del jardín que tanta intriga me causaba y que ahora era mi principal objetivo.

Tarareaba tranquilamente una de las tantas melodías que le había escuchado tocar a Géminis, no había faltado un solo día a sus practicas, realmente era muy bueno y me tranquilizaba escucharlo tocar, ahí sentado no parecía ser un completo idiota...

Caminaba distraída cuando lo vi, una larga serie de enredaderas espinosas, realmente no era lo que me imaginaba, me acerqué hasta ellas asomándome por encima, era un largo recorrido. Comencé a rodear la pared improvisada hasta dar con la "puerta" para ingresar, era un jardín bastante grande con una gran cantidad de plantas, cerrando los ojos podía imaginármelo a la perfección, el propio país de las maravillas dentro de la institución, sería bastante hermoso si todo no estuviera muerto.

Caminé entre césped reseco admirando los largos tallos puntiagudos que años atrás debían albergar una gran cantidad de rosas, no quedaba ni una pero la estructura era digna de ver, alargándose como grandes paredes de un laberinto. Seguía perdida el camino cuando algo llamó mi atención, una cabellera castaña a varios metros cuidando una de las secciones.

Me acerqué en silencio sin llamar la atención aunque no sirvió de mucho cuando su mirada verdosa cayó en mí, esta vez su cabello estaba suelto a un lado de sus hombros, me sonrió con gran tranquilidad.

—Es un gusto verte Leo—

—Si, igualmente— dije un tanto tensa mientras la veía trabajar —¿qué haces?— me miró unos segundos antes de volver a concentrarse en la planta.

—Sería increíble que este lugar volviera a recobrar vida, vengo aquí tratando de que eso se cumpla— observé no muy convencida la planta en la que trabajaba, estaba muerta y la tierra lucia inservible.

—¿Lo viste antes de que..?—

—Lo recuerdo como si fuera ayer, una obra de arte, era mi lugar favorito— su sonrisa se veía un tanto melancólica —debes creer que es inútil—

—Digamos que no tendría mucha esperanza—

—Hay veces que te sorprenden, tal vez la tierra reviva, con los cuidados de muchos, solo se puede trabajar hasta alcanzar—

—Parece importante— comenté agachandome a su lado.

—Lo es, este jardín era mi vida— asentí tratando de entender su posición —¿y? ¿Cómo va la investigación?— mi expresión debía reflejar mi sorpresa pues sonrió.

—Bueno...en realidad eso me trajo aquí, aunque no estoy segura considerando que todo está muerto— solté indiferente, ella me miró con curiosidad.

—¿Leíste la edición que te recomendé?— me quedé paralizada, era algo que había olvidado, frunció el ceño un instante antes de suspirar —no todo esta muerto, al final hay un último rosal— asentí un tanto confundida —deberías verlo, es realmente hermoso— y sin más se puso de pie sacudiendo la tierra en sus manos dándose la vuelta, yo solo asentí en silencio mientras la veía irse.

Miré las flores frente a la pared de piedra del fondo, Piscis tenía razón, unas hermosas rosas blancas destacaban entre lo muerto transmitiendo una extraña calma, valia la pena ver. Sin embargo la energía que daban las rosas fue opacada rápidamente cuando dirigí mi mirada al pie del rosal.

Una única rosa se encontraba posada en el suelo, marchita y azul...

Con Escorpio

La pelinegra salía con calma de la torre C, había sido un día bastante productivo y estaba segura que pasaría fácilmente los próximos exámenes del ciclo. Ya había anochecido cuando dejó la habitación del chico y estaba feliz de por fin descansar, claro que antes debía ver como les había ido a sus amigas con la búsqueda.

Caminaba tranquilamente hacia su torre, la brisa era bastante fría esperaba llegar pronto sin embargo fue frenada por un fuerte ruido. Se quedó quieta mirando a su alrededor en busca del causante sin encontrar respuestas, sacudió su cabeza, pensando que se trataba de un producto de su imaginación, lastimosamente no era así y un escalofrío la recorrió por completo cuando aquella figura blanca a gran velocidad la atravesó dejándola aturdida en el suelo...

—¡Escorpio!—

***
Bueno solo tengo algo que decir si alguien lee esto
¡Feliz Año!
1/1/2021
Propósito de año nuevo, terminar aunque sea una historia
¿Poco probable?

I.M -ZODIACO-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora