18|Uno a uno

250 24 3
                                    

Narra Tauro

Hoy con Escorpio nos habíamos levantado antes de lo normal, por lo que ya listas salimos de la habitación en busca del desayuno temprano, claro que eso no salió como lo esperábamos.

—¿Qué sucede ahí?— observé hacía la dirección de Escorpio, señalaba justo la entrada de la torre A, un mal presentimiento me recorrió, una fuerte alarma sonaba por todo el lugar y en la entrada un montón de cosas regadas.

—No me digas que...— avancé hacia las cosas y reconocí varias de ellas —oh mierda...— Escorpio comprendió todo, ambas estábamos al tanto de lo del zorrillo, no era fácil esconder uno en una habitación tan pequeña, sin embargo ninguna había dicho nada sobre tirar sus cosas —¿dónde estarán Leo y Virgo?— me agaché y empecé a juntar algunas de las cosas cuando noté a alguien salir de la torre...Capricornio.

Narra Capricornio

Desperté de un brinco por un fuerte sonido afuera de la habitación, un tanto aturdido comencé a buscar al responsable, aún era muy temprano, me senté sobre la cama con la intención de investigar cuando algo dentro de la habitación se movió sacandome de mis pensamientos, apenas enfoque mi vista saliendo de la ensoñación noté el papel pegado en mi frente, lo tomé y revisé rápidamente, una nota, "esto es por idiotas -L.V-". No entendí que pasaba hasta que miré a mi alrededor,  había un puto zorrillo en la habitación.

—¡Zorrillo!— dije alterado despertando a los otros dos, tenían el sueño profundo, sorprendentemente la alarma no había conseguido levantarlos, sin embargo el animal en la habitación...

—¿Qué?— dijo Aries sobresaltado apenas comprendiendo mis palabras antes de ver al nuevo inquilino, los tres nos levantamos tratando de salir de la habitación lo antes posible para evitar su atención, pero la puerta estaba trancada y el zorrillo bastante atento apunto de rociarnos con ganas.

Géminis harto le dio un fuerte golpe, la puerta por fin cedió, claro que no fue un alivio, ya que cedió con los tres, caímos deslizándonos por el piso hasta chocar con el otro lado de la habitación, claro que lo más preocupante fue el fuerte ruido que escuchamos provenir de la ventana. Me levanté lo más rápido que pude y cerré la puerta evitando que el animal saliera, me giré a mis hermanos apunto de reprocharles hasta que los miré bien, Aries se encontraba envuelto en cinta, por otro lado Géminis tenía varias de sus cosas pegadas en su cuerpo y ambos se rascaban como locos.

—¿Qué demonios hicieron ahora?— interrogué de mal humor mirandolos fijamente.

—¡NADA!— no podían ser más rápidos para negar al mismo tiempo.

—Ya claro— dije mostrándoles la nota que seguía en mi mano, automáticamente su expresión paso de aturdida a furiosa —me parece que les dieron su merecido—

—Ya cállate, ¿qué hacemos con el zorrillo?— preguntó Géminis unos tonos más serio.

—Ni idea y nuestra ropa está en planta baja— gruñó Aries después de asomarse por la ventana.

—¡¿QUÉ?! Malditas...—

—Para ser justos me parece que se lo buscaron, aunque el allanamiento...— comenté observandoles de arriba a abajo, estaba empezando a considerar lo de mudarme.

—Es lo de menos, ellas trazaron la linea muy alta ahora nosotros tendremos mayor libertad— me interrumpió Aries sacandome de mis pensamientos, rodé los ojos en su dirección y tomé una camisa en la sala para ir a buscar las cosas de los dos tarados, después de tantos años aún no tenían remedio.

Ya abajo me llevé una sorpresa, no me esperaba encontrar a dos chicas recogiendo el desastre, distinguí a Escorpio y Tauro por lo que me acerqué rápidamente, notaba el nerviosismo de esta última cuando al fin puso su vista en mí.

—Yo lo lamento...— susurró tendiéndome algunas de las cosas cuando llegué a su lado.

—No te preocupes, entre nosotros: se lo tienen merecido— mi comentario pareció calmarla, soltó una linda sonrisa que hace tiempo no veía, no sabía que la extrañaba, me agaché a su lado empezando a recoger el resto de las cosas —¿fueron las nuevas?—

—Si..no se han acostumbrado a como son las cosas— la miré fijamente, estaba al tanto de las injusticias que vivían diariamente por las personas de mi clase, es algo que siempre tengo presente —¿qué sucede?— pareció notar mi extraña mirada, no tardé en apartar mi mirada para evitar incomodarla.

—Nada, lo siento me distraje, dile a tus amigas que tengan cuidado, están realmente enojados y ya que trazaron los limites ellos harán lo mismo— parecía un tanto sorprendida aun así asintió dándome una sonrisa de agradecimiento la cual devolví con facilidad.

Después de unos minutos entre los tres llevamos las cosas devuelta a la habitación, cosa que claro, no les agradó mucho a mis hermanos...

—Jajajajajajaja, maldita sea— Escorpio no paraba de reír después de ver su estado.

—¿Qué mierda hacen estas aquí?— la mirada de Aries se centró en mí con reproche, aunque su molestia no me importaba en lo absoluto.

—Te informo que gracias a "ellas" podrán vestirse pronto—

—¡Son amigas del enemigo!— señaló Géminis malhumorado tratando de despugar la pantufla en su estómago.

—Ya bájale enano, ¿ves? por razones como estas no ayudo a la gente— le frenó Escorpio, Tauro solo asintió a sus últimas palabras.

—¿Y el zorrillo?— preguntó directa mirando alrededor, mis hermanos la fulminaron con la mirada.

—Ustedes malditas, díganle a sus amigas que se preparen— gritó Géminis mucho más disgustado que de costumbre, estas chicas debieron llegar muy lejos para obtener estas reacciones, sonreí internamente.

—Con gusto, ahora puedo ver que no les será difícil ponerlos en su lugar, Tauro trae a Ricky para irnos de aquí— respondió Escorpio en un tono burlón que consiguió irritarlos aún más, Tauro solo asintió y entró a nuestra habitación como si nada.

—Espera Tauro puede...— paré en cuanto vi a la chica saliendo como si nada con el zorrillo en una jaula.

—No te preocupes, soy buena con los animales, nos vemos— dijo en mi dirección —idiotas— despidió a mis hermanos y con eso ambas salieron.

—Que humillante— susurró Géminis con molestia.

—No se quedará así por mucho— dijo Aries frunciendo el ceño y jaló una de las cintas —mierda—

—No me gustaría ser ustedes en este momento— comenté tranquilamente yendo a cambiarme, ya pronto iniciarían las clases.

I.M -ZODIACO-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora