La luna alumbró la ventana de Mich al mismo tiempo que el cielo se oscurecía. Mich, tirada en un rincón de su estacionamiento abrió un ojo mientras que con una mano se cubría de la luz y en seguida se tocaba la cabeza con una mueca de dolor.
"Maldito Mani." Dijo mientras se levantaba atontada y se tropezaba con las almohadas y el edredón que estaban en el suelo pareciendo montañas y cerros.
Se acercó a la ventana, y aspiró el olor a noche. Nubes de lluvia se dibujaban al norte. Ya le habían dejado plantada con él "¡Qué onda!" en la punta de la lengua, pero esta vez le dolió más que antes. Sólo le había pasado 1 vez: la primera en la noche de graduación de secundaria, a la que fue invitada por el más guapo de la escuela por una apuesta de la que ella no sabía y al llegar al baile él la ignoró. Tomó un abrigo y sin un vistazo en el espejo salió en dirección a la Editorial Fernando.
El vestido rojo con chaquiras le jugueteaba entre las piernas mientras la lluvia lavaba su enojo. La magia de la noche con la lluvia le arrebató a Mich la posibilidad de cualquier reclamo a Mani. Tarareando una canción de Hilary Duff dio vueltas sobre su eje aplastando los charcos que la lluvia abandonó simulando un baile. Recogió una flor del piso y se la enredó en el pelo, una rama en sus sandalias de madera y algunas hojas entre su ropa. Se dejó caer a la mitad de la angosta calle de "Los Limones", con un millón de mariposas en su estomago y trillones de carcajadas en su boca.
Mani no dejaba de pensar en Mich. Escribía un nuevo artículo explicando el amor. Le parecía inexplicablemente interesante este nuevo sentimiento y consideraba una terapia el escribir sobre ello.
Mich, se levantó después de media hora de relajación a la mitad de la calle evitando que los coches pudieran pasar y los cláxones no paraban de tocar. Caminó hasta su casa grande con jardín y balcón: el sueño de su vida. Llegó hasta su taller de pintura y dibujó hasta el amanecer con el radio tocando Fireflies una y otra vez marcando el paso de las pinceladas que dibujaban el lienzo. Dibujos azules, dibujos diferentes: dibujos de la realidad.
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Diario de una ilusión
Science FictionMani ya no quiere estar dormido. Quiere confundir realidad y sueño y escribir sobre ello.