Los días pasaron en Hogwarts.
Los aurores estuvieron investigando la muerte de Astoria Greengrass, cuya verdadera identidad era Delphini Riddle y la desaparición del chico de ravenclaw, Matthew Smith.
Resultó que el joven ravenclaw, no tenía una hermanita. A la pobre niña, la había hechizado para hacerle pensar que sí tenía un hermano, ya que sus apellidos eran iguales.
El chico realmente era huérfano, y era un gran estafador.
Y en cuanto a la investigación con respecto a Delphini y el paradero de la chica Daphne Greengrass.
Harry y su grupo les explicaron a las autoridades, con lujo de detalle la situación, obviando la parte de que Hermione y Draco eran animagos no registrados.
Gracias a la credibilidad del trío de oro como héroes de guerra y las declaraciones de la directora, todo resultó bien para el joven matrimonio y no recibieron castigo alguno.
_______🦁_______
Minerva caminaba a gran velocidad por los pasillos de Hogwarts.
Se había quedado dormida, por culpa de la cantidad de papeleo extra que debía entregar.
El asunto de las Greengrass y el matrimonio Malfoy le habían quitado años de vida y ya no sabía ni que en día vivía.
Grandes ojeras se reposaban alegremente debajo de los ojos de la directora.
En cuanto llegó a su oficina se dejó caer de forma cansada en su amado escritorio.
-Mineeeerrvaaaa...- canturreo Albus a sus espaldas.
-Me cago en Merlín.- gruñó ella.
-Ay niña, ¿que ánimos son esos?.- contestó Albus poniéndose ambos brazos como jarra mientras negaba lentamente con la cabeza.
-Me duele la cabeza Albus, estoy cansada y no tengo ninguna intención de aguantarte hoy.-
Ella se recostó sobre su escritorio usando ambos brazos como almohadas.
-Ya se lo que te hace falta.- le comentó con una sonrisa.
-¿Que amablemente cierres el ocico y me dejes disfrutar del hermoso sonido del silencio en mi oficina por primera vez en la vida?.- preguntó ella con una sonrisa cansada mientras cerraba los ojos.
-Eso sí que jamás, me aburriría y tu también, pero eso no es lo que te hace falta querida.-
-Iluminame.- dijo ella rodando los ojos.
-Sexo.- Albus le contestó a secas con una gran sonrisa.
Ella abrió enormemente los ojos y se giro para verlos.
-Por fin pasó, el lienzo terminó de pudrirte el último ápice de cordura.- ella hizo una mueca de asco.
El entrecerró los ojos y se cruzó de brazos.
-Estoy tan lúcido como tu necesitada de sexo, querida.- contrarrestó él, haciéndole pico de pato.
-Como se te ocurre venir a hablarme de estas cosas en una institución escolar ¡por amor a Merlín!, este lugar es sagrado, ten algo de decencia.- se horrorizó la animaga.
-Si, recuerdo que practiqué muchas posturas de "decencia" ahicito mismo, donde estabas apoyando tu carita. Si no habrá sido testigo de tanta lujuria esta oficina.-
Albus miraba soñadoramente al techo mientras recordaba con una sonrisa picara.
Minerva estaba escandalizada, horrorizada y asqueada en partes iguales mientras se apartaba del escritorio dejándose caer en la silla.
ESTÁS LEYENDO
Mᴇ Cᴀsᴇ́ Cᴏɴ Mɪ Eɴᴇᴍɪɢᴀ (Dramione)
Фанфик(En edición) Después de la guerra magica, algunos alumnos volvieron a Hogwarts para concluir sus estudios, aunque otros volvieron en contra de su voluntad. Hermione Granger encuentra un libro en la sección prohibida, y accidentalmente termina uniend...