La mañana siguiente de la estresante charla y reunión con la directora
Draco se despertó primero y fue hasta su sala por un vaso con agua.
Se sentía de un increíble buen humor, estaba en una nube de felicidad como nunca antes lo hubiera sentido.
El día era precioso, el sol brillaba maravillosamente, su chica le quería y eso era la mierda más cursi y linda que le pudo haber pasado en sus 19 años de vida.
Sentía tanta dicha que era imposible que algo pudiera joderle el buen humor.
Sentía su espalda deliciosamente adolorida por los arañazos de cierta leona demasiado apasionada para su delicada piel. Aún así no pudo evitar sonreír bobamente mientras se llevaba el vaso de agua a los labios.
-Te ves contento.- le habló una voz a su espalda
-La vida es hermosa, que puedo decir.- respondió con una boba sonrisa mientras bebía su agua sin mirar.
-¿Tuviste sexo anoche?.-
-Sip.-
-¿Fue bueno?.-
-Delicioso.-
-¿Mejor que el que tenias conmigo?.-
Draco dejó de sonreír. Y se quedó pensativo, con el ceño fruncido. Algo no cuadraba. Ladeo la cabeza tratando de procesar lo que ocurría.
Se dio la vuelta para ver el origen de esa misteriosa voz mientras le hablaba.
-¡¿A que viene es-- WOOOA ASTORIA QUE MIERDA HACES AQUÍ?!.-
El platinado se sobresalto tanto que dejó caer su vaso de vidrio al suelo, mientras retraía sus brazos y levantaba una pierna, aterrorizado por la imagen de la rubia muy seria.
Ella estaba vestida con un top rosa, falda blanca, collar de perlas grandes, botas blancas satinadas, hasta el tobillo de tacón, con un bolso rosa haciendo juego con su conjunto.
-Hola, conejito.- respondió ella con una sonrisa que no presadiaba nada bueno.
El blondo puso cara del más puro horror, totalmente pálido, mientras retrocedía poco a poco para intentar ponerse seguro del otro lado de la sala.
-¿Como entraste...?.- preguntó con cuidado como si estuviera huyendo de él mismísimo Voldemort, pero peor.
-Amor, no me ves en meses ¿y lo primero que me preguntas es como entre aquí?. No deberías ser tan cruel con tu prometida tontito.- ella le hizo un puchero.
Draco la miraba como si fuera el diablo. Con absoluto terror. Mientras rogaba a todos los fundadores de Hogwarts que Hermione no se despierte aún.
Está chiflada... ¿Cómo mierda le hizo para volver?...se preguntó mientras la miraba con pavor.
-Astoria... No deberías estar aquí...- dijo con extrema cautela, como si tratara de tranquilizar una fiera salvaje.
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Mᴇ Cᴀsᴇ́ Cᴏɴ Mɪ Eɴᴇᴍɪɢᴀ (Dramione)
Fiksi Penggemar(En edición) Después de la guerra magica, algunos alumnos volvieron a Hogwarts para concluir sus estudios, aunque otros volvieron en contra de su voluntad. Hermione Granger encuentra un libro en la sección prohibida, y accidentalmente termina uniend...