ᴅᴜʟᴄᴇꜱ ᴅᴇ ᴄᴀꜰÉ (ꜱᴀɪᴋɪ ᴋᴜꜱᴜᴏ)

𝟏𝟕

         🄰🄺🄰🄽🄴 🅃🄰🄺🄰🅃🄰

Después de ayudar a Yume a controlar a Mera, que no sirvió de nada por que siguió siendo salvaje, la noche llegó, tuve que dormir en la arena de la playa.

Desperté era el tercer día del naufragio.

—Ahora trabajen, peones. Terminaremos esto hoy. Peón charlatán y  dios de los peones, dejen de cortar madera y construyan — lo voltee a ver — Y tu... — lo interrumpí.

—Oye, tu también ayuda. No sólo nosotros estamos en este problema — le grite señalandolo.

—Calla, plebeya —me silencio.

—¡Ayúdanos tú también! ¡Y no calles a Akane! —vi como Aren me defendía.

—Estoy supervisando. Y además a Akane yo la puedo callar cuando quiera. — le apuntó con el dedo. — Hago que todo se haga con eficiencia — siguió hablando.

—¡Solo quieres las cosas fácil! — le grito aún más.

—¿Quieres que ayude? Entonces arrodillate y ruega mi ayuda. — volvió a hablar.

—Aren, es mejor que lo dejes así, no va a hacer nada. —le toque su hombro.

—¡No necesitamos tu ayuda! — le grito para darse la vuelta.

Después de esa discusión todos empezamos a armar la balsa.

—Trae eso. — Nendo cargo de un lago un tronco.

—Bueno.—a mi parecer Mera ya no era salvaje.

Todos trabajamos, hasta que nos interrumpió Saiko.

—Por cierto ¿quién ira en la balsa? — nos preguntó arrogante.

—¿Qué? Todos nosotros. — Aren lo dijo en un tono como si no entendiera.

—¿Por qué deberían ir todos? — le volvió a preguntar.

—Cierto... No deberíamos ir todos, más bien... Mejor te dejamos aquí, y que las personas de tu padre te encuentren — le apunté con disgusto.

—¡Te apoyo Akane! —se volteo hacía mi Nendo. — ¿Dices que quieres dejar a alguien? —se le iba a ir encima pero Kaido lo detuvo.

—¡Calmate, Nendo! — seguía viendo el conflicto.

—¡Debes estar bromeando! ¿Cómo puedes siquiera decir eso? — aventó a Kaido por los aires y agarro de la camisa a Saiko. — Todos trabajamos mucho juntos para llegar hasta aquí. — empezó a llorar, yo solamente me acerque y lo aleje de Saiko, e hice que me abrazara.

         🅂🄰🄸🄺🄸 🄺🅄🅂🅄🄾

-𝚀𝚞𝚒𝚜𝚒𝚎𝚛𝚊 𝚚𝚞𝚎 𝚎𝚜𝚎 𝚊𝚋𝚛𝚊𝚣𝚘 𝚏𝚞𝚎𝚛𝚊 𝚙𝚊𝚛𝚊 𝚖𝚒.-

—No me refería a eso. Los que van en la balsa pueden mandar ayuda cuando los rescaten. ¿Y si vienen a rescatarnos antes y todos estamos en la balsa? Dejar un grupo en ambos lados nos da más posibilidades. — le dijo.

—¡Entiendo! ¡Eres listo! —Nendo dejó caer su puño en la palma de su mano.

—Te apoyo —vaya cambió repentino en Akane.

—Viendolo bien, tienes razón. No necesitamos que vayan todos. — vi como ponía Aren su mano en su mentón.

—Me pregunto por qué pensamos que todos deberíamos ir. — apoyo Yumehara.

—Solo necesitamos que alguien pida ayuda. — Kaido grito.

—¡Bien pensado! — grito Aren en apoyo.

~¿𝙲𝚘𝚖𝚘 𝚗𝚘 𝚜𝚎 𝚍𝚊𝚗 𝚌𝚞𝚎𝚗𝚝𝚊?~  Pude leer el pensamientos de Saiko.

~𝚈𝚊𝚛𝚎, 𝚢𝚊𝚛𝚎. 𝚂𝚎 𝚍𝚒𝚘 𝚌𝚞𝚎𝚗𝚝𝚊. ~

~𝙳𝚎𝚋𝚎𝚗 𝚍𝚎𝚌𝚒𝚍𝚒𝚛 𝚚𝚞𝚒é𝚗 𝚒𝚛á 𝚎𝚗 𝚕𝚊 𝚋𝚊𝚕𝚜𝚊 𝚢 𝚚𝚞𝚒é𝚗 𝚜𝚎 𝚚𝚞𝚎𝚍𝚊𝚛á. 𝙴𝚜𝚝𝚘 𝚍𝚎𝚌𝚒𝚍𝚒𝚛á 𝚎𝚕 𝚍𝚎𝚜𝚝𝚒𝚗𝚘 𝚍𝚎 𝚝𝚘𝚍𝚘𝚜.~

—Bueno. ¡Busquemos el almuerzo! — grito Kaido.

—¡Estoy de acuerdo! — Yumehara parecía querer agradarle a Kaido.

Todos nos sentamos a comer quedando así. Nendo en una roca. Aren a lado mío, yo alado de Akane, Akane a lado de Yumehara, Yumehara de Mera y Mera de Teruhashi. Saiko está en otra roca un poco alejado de nosotros y Kaido estaba sentado casi enfrente en el piso de Akane.

~¡𝚁𝚊𝚢𝚘𝚜 𝚜𝚎 𝚖𝚎 𝚊𝚌𝚊𝚋𝚘 𝚖𝚒 𝚛𝚊𝚖𝚎𝚗 𝚢 𝚝𝚎𝚗𝚐𝚘 𝚖𝚊𝚜 𝚑𝚊𝚖𝚋𝚛𝚎!~

—Akane, ¿Quieres un poco de mi ramen? — le extendí el recipiente.

—Pero... ¿Tu no tienes hambre? — me preguntó.

—No. Ahora habré la boca — ella estaba abriendo la boca, pero antes de poder dar un bocado, nos interrumpieron, así que dejo de hacerlo, y puso atención.

—Ahora, hablemos de sobre quien irá en la balsa. — era Kaido quien nos interrumpió. —¿Hay alguien que quiera ir? — se volteó a ver a todos pero estos quedaron en silencio al igual que yo.

Después de eso, todos decidieron mejor no arriesgarse. Así que tuve que hacer una isla y luego teletransportarlos ahí.

Habíamos sido rescatados, casi todos en fueron a la escuela, menos ella.

Todos contaban sus historias, pero en verdad lo único que me preocupaba era ella. No quería que nada le pasara como la otra vez. Más tarde iría a su casa.